Matesanz de la Torre, Mariano. Arganda del Rey (Madrid), 29.VII.1867 – Madrid, 14.III.1945. Empresario.
Impulsor del agrarismo como movimiento político en España. Desde su juventud fue consciente de la necesidad de modernizar la agricultura española desde un punto de vista técnico y comercial incrementando su competitividad y, al mismo tiempo, conseguir que los agricultores tuvieran la misma capacidad de presión sobre la política económica española que los representantes de la industria. Su trabajo como aprendiz de farmacia le acercó al mundo de la química y las posibilidades de aplicar esta ciencia a la agricultura. Fue vendedor de abonos químicos en pequeña escala al mismo tiempo que realizaba experimentos en sus propiedades. En 1904 fundó, junto a otros empresarios, Cros, Sociedad Anónima, la primera empresa española dedicada a la producción de abonos químicos. Su éxito fue innegable, a pesar de la renuencia de los agricultores a emplear este tipo de productos, contribuyendo al desarrollo de la industria química en España hasta niveles desconocidos.
Su actividad empresarial se extendió al campo de la energía y la fabricación de materiales de construcción.
Participó en diversas iniciativas de carácter patronal: presidió la Cámara de Comercio de Madrid entre 1916 y 1918 y la Asociación de Agricultores de España desde 1925 hasta su muerte.
Inició su carrera política como concejal y diputado provincial en Madrid, posteriormente, aprovechó su influencia entre los propietarios agrícolas segovianos para ser elegido senador y diputado por esta provincia en varias ocasiones hasta 1923. En el parlamento fue uno de los más firmes defensores de la política reformista propugnada por Santiago Alba con quien compartía los principios ideológicos del liberalismo moderno y las demandas de los agricultores castellanos sobre cuestiones como los aranceles y las tarifas ferroviarias. Su creencia en la discriminación de los agricultores por parte de los gobiernos de la Restauración le llevó a apoyar, en un primer momento, a Primo de Rivera, sin embargo, pronto comprobó que la política económica de la dictadura seguía una línea industrialista similar. El establecimiento de la Segunda República le forzó a participar en política de nuevo, actuando como un portavoz del empresariado más reticente hacia lo que se consideraba una legislación demasiado intervencionista por parte del nuevo régimen. En 1933 fue elegido diputado por Madrid dentro de la candidatura del partido agrario contando con el apoyo de comerciantes y pequeños industriales de la capital.
En esta nueva etapa intentó llamar la atención sobre los problemas económicos de España que, debido al creciente deterioro político habían quedado desatendidos.
Fuentes y bibl.: Archivo del Senado, Exps. personales, HIS-0277-05; Archivo del Congreso de los Diputados, Serie documentación electoral, 129 n.º 39, 131 n.º 39, 133 n.º 39, 135 n.º 39 y 139 n.º 30.
P. Carasa, Elites castellanas de la Restauración, Valladolid, Junta de Castilla y León, 1997; P. Calvo Caballero, Asociacionismo y cultura patronales en Castilla y León durante la Restauración, 1876-1923, Valladolid, Junta de Castilla y León, 2003; F. del Rey Reguillo, “Apuntes sobre un liberal agrario: Mariano Matesanz de la Torre (1867-1945)”, en Historia y Política, 12 (2004).
Juan Antonio Cano García
