Azaña Catarineu, Esteban. Alcalá de Henares (Madrid), 16.V.1850 – 10.II.1890. Alcalde de Alcalá de Henares, historiador, político y empresario.
Hijo de Gregorio Azaña Rajas, natural de Alcalá de Henares, como su padre y su abuelo, dedicados al mundo del Derecho y de tradición política liberal, y de Concepción Catarineu Pujals, también natural de Alcalá de Henares, pero de familia oriunda de Arenys de Mar. Aunque cursó estudios superiores de Derecho, se apartó de la tradición familiar por vía paterna para dedicarse a los negocios de la familia de la madre, concretamente de la fábrica de jabón. Fruto de su matrimonio con Josefa Díaz Gallo y Muguruza, tuvo cinco hijos: Gregorio, Manuel, que llegó con el tiempo a ser presidente del Consejo de Ministros y de la Segunda República, Carlos, Josefa y Concepción.
Su dedicación a la actividad empresarial le permitió participar activamente en la vida política, social y cultural de la ciudad complutense. Ocupó determinados cargos locales de diversa entidad, juez municipal, presidente del casino tesorero de la Sociedad de Condueños de la antigua Universidad, entre otros.
En el campo literario, su obra más importante es la Historia de la ciudad de Alcalá de Henares (antigua Compluto), publicada en dos tomos entre 1882 y 1883. La importancia de esta obra histórica es tal que, a pesar de haber sido publicadas otras historias generales de esta ciudad con posterioridad, actualmente continúan realizándose reediciones de la misma. Obra menor de Esteban Azaña fue Ludivina, novela de costumbres, publicada en 1877, de carácter romántico y de poca calidad. Su escaso éxito hizo comprender al autor que su futuro no estaba en la literatura.
Mejores debieron ser sus dotes oratorias y políticas, así como sus actividades sociales, que le permitieron realizar una rápida carrera en el ayuntamiento complutense.
En 1875 fue nombrado concejal y, tras la aprobación de la Constitución de 1876, en las elecciones municipales de 1877 fue reelegido, ocupando el cargo de primer teniente de alcalde. Ascendió a la alcaldía el 11 de octubre de 1877. Volvió a ser elegido concejal y alcalde por la corporación en las elecciones de 1879, cesando en este último puesto, pero no en el de concejal, el 6 de marzo de 1881. No tuvo dedicación política entre 1883 y 1885, aunque ese año volvió a obtener acta de concejal, ejerciendo de nuevo como alcalde hasta 1890.
Como alcalde de su ciudad, preocupado por recuperar su grandioso pasado, Azaña llevó a cabo una ingente labor. Fruto de una iniciativa personal suya fue la erección, en 1879, de la estatua de Cervantes obra del escultor italiano Pedro Nicoli. También fue promovido por Esteban Azaña un monumento dedicado a la memoria de El Empecinado, diseñado por el escultor Francisco Graciani, e inaugurado en la calle de la Merced en 1879.
Asimismo, en 1879, tuvo lugar la inauguración de una nueva plaza de toros en la Avenida de Guadalajara, en la que participó el famoso matador Frascuelo.
Fruto de la visita de los reyes Alfonso XII y María Cristina a la ciudad fue la concesión del título de Excelentísimo al ayuntamiento complutense. A título personal, Esteban Azaña fue distinguido con el ingreso en la Orden de Carlos III. Esteban Azaña fue parte fundamental en la acción que abortó la sublevación republicana del general Villacampa en 1886. La reina regente, María Cristina, quiso premiar su acción con la concesión del título de conde de Zulema, pero, al parecer, su padre, Gregorio Azaña, de convicciones netamente liberales, convenció a Esteban para que no lo aceptase.
Aunque no existían documentos fehacientes, sus investigaciones le llevaron a considerar, erróneamente, 1884 como el del séptimo centenario de la aparición de la Virgen del Val, patrona de la ciudad, celebrándose el aniversario con numerosos actos civiles y religiosos.
Esta fecha se ha mantenido hasta hace unos años que se demostró que no podía ser la real.
De 1885 data la instalación del primer alumbrado eléctrico en las calles de la ciudad. Ese mismo año fue creada la diócesis de Madrid-Alcalá, desgajada de la de Toledo, no sin oposición por parte de los alcalaínos, con Esteban Azaña a la cabeza, que escribió un opúsculo reclamando la capitalidad de la diócesis para la ciudad complutense, que el orden de la denominación se invirtiera, es decir, que fuera diócesis de Alcalá-Madrid, que la Magistral se elevara al rango de catedral o, al menos, que el seminario central se estableciera en la ciudad. Ninguna de sus propuestas prosperó.
En 1888, fue inaugurado el Teatro Salón Cervantes tras apenas dos meses de obras, aunque con una fachada provisional muy diferente de la actual.
Murió en su ciudad natal en febrero de 1890, víctima de una gripe. Poco antes, se había celebrado su matrimonio con María Jesús Vicario. Los motivos de esta boda fueron, al parecer, legalizar la situación de vida en común que ambos mantenían. Años después, tras un largo pleito, la familia consiguió la anulación de este matrimonio.
Obras de ~: Ludivina. Novela de costumbres, Alcalá, 1877; Memoria de los acuerdos del Iltre. Ayuntamiento de la Ciudad de Alcalá de Henares para la erección de un monumento a Miguel de Cervantes Saavedra, presentada a dicha Ilte. Corporación por el presidente de la misma, Alcalá, F. García, 1879; Historia de la ciudad de Alcalá de Henares (antigua Compluto), t. I, Alcalá, 1882, t. II, Madrid, 1883 (ed. facs. Alcalá de Henares, Servicio de Publicaciones, Universidad de Alcalá, 2005); La Magistral de Alcalá y la diócesis de Madrid, Alcalá, 1885; Discurso pronunciado el día 25 de Marzo de 1886 por Don Esteban Azaña, Alcalde, Presidente del Excmo. e Ilustre Ayuntamiento [...] en el acto de inaugurar la primera Escuela de Párvulos a cargo del profesor Don José Fornell, Alcalá, 1886.
Bibl.: C. de Rivas Cherif, Retrato de un desconocido: vida de Manuel Azaña, Barcelona, Grijalbo, 1980; J. Marichal, La vocación de Manuel Azaña, Madrid, Alianza Editorial, 1982; J. García Saldaña, Documentos olvidados, Alcalá de Henares, Ayuntamiento de Alcalá de Henares-Institución de Estudios Complutenses, 1986; J. Llull Peñalba, Manuel Laredo, un artista romántico en Alcalá de Henares, Alcalá de Henares, Fundación Colegio del Rey, 1996; L. M. de Diego Pareja y J. C. Canalda Cámara, Alcalá de Henares, crónica general, Alcalá de Henares, Editorial Brocar, 2001; M. V. Sánchez Moltó, “La saga de los Azaña”, en Alcalá de Henares, páginas de su historia. XII Curso de Historia, Arte y Cultura, 2003, Alcalá de Henares, Institución de Estudios Complutenses, 2003, págs. 377-392.
Luis Miguel de Diego Pareja