Ayuda

Gonzalo de Hermosillo

Biografía

Hermosillo, Gonzalo de. México, c. 1567 – Macorito (México), 28.I.1631. Misionero agustino (OSA), catedrático, teólogo, hebraísta, obispo.

Sus padres fueron Juan González de Hermosillo y Ana Rodríguez, naturales de Ciudad de México. En esta ciudad estudió las primeras letras, para luego ingresar en el convento de San Agustín de México, en donde vistió el hábito agustiniano e hizo la profesión religiosa el 22 de mayo de 1583, en manos del prior Martín de Perea.

Tras concluir los estudios de Artes, inició, en 1584, los de Teología en el mismo convento de San Agustín de México. Al año siguiente, siendo todavía estudiante de Teología, defendió unas conclusiones escolásticas en el Concilio mexicano (1585), presidido por el arzobispo de México, virrey y visitador de la Audiencia, Pedro Moya Contreras. Seis obispos asistieron a este Concilio Nacional de México.

El Capítulo Provincial intermedio de 1591 le autorizó para leer Artes a los religiosos carmelitas descalzos de su convento de Puebla, por carecer éstos de profesores propios; y el Capítulo siguiente le fue asignado el convento agustino de la misma ciudad para leer también Teología. En 1596 le trasladaron al colegio de San Pablo de México en calidad de catedrático de Teología, convirtiéndose de este modo Gonzalo de Hermosillo en el primer alumno y profesor de este centro de estudios.

Por su parte, el prior general de la Orden agustiniana, Hipólito Fabriani, le facultó el 4 de mayo de 1603 para que pudiese opositar a las cátedras de la Universidad de México, y al año siguiente, el día 2 de mayo, le dio licencia para graduarse en cualquier universidad previa aprobación en la provincia agustiniana de México. El grado de licenciado en Teología lo obtuvo por la Universidad de México el 20 de febrero de 1605; y también por esta Universidad consiguió el título de maestro de Teología después de haber ganado por oposición el 1 de febrero de 1613 la cátedra de Sagrada Escritura y haberle dado la Orden agustiniana el grado de maestro el 26 de junio de 1613. A la Universidad de México permaneció vinculado hasta 1620, ocupándose de la cátedra de Biblia y de la propagación del estudio de las lenguas griegas y hebrea, las que dominaba como verdadero especialista. En la provincia agustiniana de México fue elegido definidor provincial en los Capítulos de 1608 y de 1617, ambos celebrados en el convento de México, los días 23 de abril y 15 de abril, respectivamente.

Francisco de Ibarra fundó Durango en 1563, en la provincia de Nueva Vizcaya; y Pablo V, en el consistorio de 28 de septiembre de 1620, decidió la creación de una nueva diócesis en la antigua ciudad de Guadiana, capital de Nueva Vizcaya, cuando se comenzaba a usar el nombre de Durango. Previamente había presentado Felipe II el 27 de enero de 1620 a Gonzalo de Hermosillo para esta nueva sede episcopal, y el 10 de octubre del mismo año se extendieron las bulas de erección de la diócesis y del nombramiento de su primer obispo. La ejecución de las mismas correspondía al patronato español en América, no sin mediar alguna controversia. En efecto, el representante regio tuvo que afrontar algunas disputas provenientes de la propuesta de división de la diócesis y de asignación económica para la nueva sede, y en las que llegó a intervenir el mismo Gonzalo de Hermosillo desde el convento de San Agustín de México, donde residía.

Aunque todavía no estaban zanjadas las negociaciones, el obispo mandó en su nombre a tomar posesión de la diócesis a un procurador, el licenciado Amaro (o Amado) Fernández Pazos, quien tomó posesión el 22 de octubre de 1621, al tiempo que se hacía cargo de su gobierno mientras llegaba el obispo.

La consagración episcopal tuvo lugar en la catedral de México el 30 de noviembre de 1621, y su entrada en la Diócesis de Durango se produjo unos días antes, del 12 de agosto de 1622, fecha en la que firmó por vez primera en la sede diocesana un decreto para la constitución del tribunal que debía investigar las circunstancias del martirio de ocho misioneros jesuitas asesinados en 1616 por los indios tepehuanes. En la misma matanza cayeron un franciscano, un dominico y algunos españoles.

Una vez en la diócesis comenzó Hermosillo su organización.

La parroquia de San Mateo de Durango fue dedicada a la Asunción de Nuestra Señora, con la categoría de iglesia catedral. El 1 de septiembre de 1623 constituyó el Cabildo de la catedral, cuyo decreto preveía la existencia de las siguientes dignidades y oficios: decano, arcediano, chantre, maestrescuela, tesorero, diez canónigos y prebendados que fueran presbíteros, seis racioneros, seis acólitos, seis capellanes, sacristán, organista, perdiguero, ecónomo y procuradores, notario de la iglesia y Cabildo, perrero, etc. Sin embargo, en la práctica comenzó a funcionar el Cabildo con dos capitulares, un sacristán y dos indios cantores.

Aunque en la diócesis las necesidades pastorales estaban cubiertas, puesto que en Durango además del clero secular existía una amplia comunidad de jesuitas y un convento de franciscanos, sin embargo, el obispo Hermosillo fundó en la sede de la diócesis un convento de agustinos. Según indica el cronista Basalenque, parece que los primeros agustinos llegaron en 1622, cuando el obispo entró en la diócesis.

La visita pastoral la comenzó al poco tiempo de llegar a la diócesis. Se interesó, en primer lugar, por las misiones de los jesuitas, que recorrió personalmente, infundiendo ánimo y afirmando la generosa labor evangelizadora de sus misioneros. Como pastor de la Iglesia, trabajó con ahínco por la conversión de los indios y en este empeño pidió a los jesuitas que evangelizasen las tribus de los indios hinas y humis, que habitaban las serranías de Topia, hoy Durango, que todavía no habían recibido la predicación evangélica.

En la segunda visita pastoral a la diócesis quiso ir a las regiones bañadas por el océano Pacífico, en la provincia de Sinaloa, también encomendada a la Orden de San Ignacio. El obispo Hermosillo impartió el sacramento de la confirmación a unos once mil indígenas en la villa de San Felipe y Santiago, situada sobre la margen izquierda del río Petatlán. Luego pasó a Macori, hoy Macorito, y a otras poblaciones de misiones, si bien, tras sufrir “un grave y repentino accidente” hubo de retroceder a la villa de Macorito, donde falleció el 28 de enero de 1631 en el colegio de los padres jesuitas. Su cuerpo permaneció en la iglesia de dicho colegio hasta el 12 de marzo de 1668, fecha en que se realizó el traslado a la catedral de Durango por el obispo Juan de Aguirre.

Escribió algunos tratados de filosofía y teología (De re logica, y De beatitudine supernaturali) cuando enseñaba en Puebla (1591), y que pasaron a engrosar la biblioteca de los carmelitas descalzos de Coyoacán (México).

 

Obras de ~: De re logica (inéd.); De beatitudine supernaturali (inéd.); Erección y estatutos de la Santa Iglesia Catedral de Durango (inéd.); “Aprobación. México, 1 de julio de 1615”, en J. de Miranda, Vida y milagros del glorioso Padre San Nicolás de Tolentino, México, 1615; “Aprobación. México, 4 de abril de 1617”, en D. de Cisneros, Sitio, naturaleza y propiedades de la ciudad de Méjico, México, 1618 (ed. facs., con intr. de J. L. Peset, Sevilla, Fundación de Ciencias de la Salud-Sociedad Estatal Quinto Centenario, 1992); “Aprobación. México, 13 de mayo de 1619”, en C. Sánchez de Guevara, Fonti vere signato hortoque concluso, México, 1619; “Aprobación. México, 23 de febrero de 1620”, en F. Bramón, Los sirgueros de la Virgen sin original pecado. Dirigido al Ilmo. Sr. D. Fr. Baltasar de Covarrubias, del Consejo de S.M., obispo de Mechoacán, México, 1620 (ed. de A. Yáñez, con prólogo y selección, México, Imprenta Universitaria, 1943); “Parecer de los Drs. Juan Cano, Hierro Guerrero, fray Gonzalo de Hermosillo y fray Cristóbal de Cervantes”, en P. Garcés Portillo, Breve resolución de la duda, que en algunas de las Cahtedrales desta Nueva España ha habido, s. l., s. f.

 

Bibl.: A. Pérez de Rivas, Historia de los triumphos de nuestra santa fee entre gentes las más bárbaras y fieras del nuevo orbe, conseguidos por los soldados de la milicia de la Compañía de Jesús en las misiones de la Provincia de Nueva España, Madrid, Imprenta Alonso de Paredes, 1645, págs. 177-178; J. de Echevarría, Oración evangélica en la translación que la Santa Iglesia, y su Ilustre y Venerable Deán y Cabildo de la ciudad de Durango, Nueva Vizcaya, hicieron del cadáver del Señor D. Fr. Gonçalo de Hermosillo, Primer Obispo de ella, y hijo del Gran Padre y Doctor de la Iglesia San Agustín, del Colegio de la Sagrada Compañía de Jesús Cinaloa, donde estuvo depositado treinta y siete años, hasta el de mil seiscientos y sesenta y ocho, que fue colocado en el Pantheón de la dicha Cathedral, en doze de Marzo de dicho año, México, Viuda de Bernardo Calderón, s. f.; G. de Santiago Vela, Ensayo de una Biblioteca Ibero-Americana de la Orden de San Agustín. Obra basada en el Catálogo bio-bibliográfico agustiniano de Bonifacio Moral, III, Madrid, Imprenta del Asilo de Huérfanos del Sagrado Corazón de Jesús, 1917, págs. 549-551; E. García, Crónica de la Provincia Agustiniana del Santísimo Nombre de Jesús de México [1684], Madrid, Imprenta de G. López del Horno, 1918 (ed. de R. Jaramillo, México, Editorial OALA, 1997, págs. 83, 127, 149, 203-207 y 368-374); J. I. Gallegos, Historia de la Iglesia de Durango, 1563-1910, México, 1972, págs. 210-255; A. Ruiz Zavala, Historia de la Provincia agustiniana del Santísimo Nombre de Jesús de México, II, México, Editorial Porrúa, 1984, págs. 517-518; C. Alonso, “Gonzalo de Hermosillo, OSA, primer obispo de Durango (México) (c. 1570-1631)”, en Analecta Augustiniana, 53 (1990), págs. 329- 357 (reimpr. en Ecclesia. Revista de Cultura Católica, 4 (1990), págs. 247-273); J. Comadraz Ruiz, “Los sacerdotes criollos y las prelaturas indianas durante el período hispano”, en Hispania Sacra, 42 (1990), págs. 221 y 238; V. muñoz Delgado, “Los agustinos y la filosofía en México durante el siglo XVI”, en La Ciudad de Dios, 205 (1992), pág. 454; J. Metzler (ed.), America Pontificia. III. Documenti pontifici nell’Archivio Segreto Vaticano riguardanti l’Evangelizzazione dell’America: 1592- 1644, Città del Vaticano, Libreria Editrice Vaticana, 1995, págs. 448 (n.º 768) y 607 (n.º 1077).

 

Rafael Lazcano González

Relación con otros personajes del DBE

Biografías que citan a este personaje

Personajes similares