Gato y de Vicente, Agustín. Agustín Durán. Madrid, 14.X.1789 – 1.XII.1862. Bibliotecario mayor de la Biblioteca Real y director de la Biblioteca Nacional, erudito, poeta, editor literario y coleccionista.
Aunque conocido y citado habitualmente por el segundo apellido paterno, en ocasiones se le menciona con su doble nombre y los apellidos completos tanto paternos como maternos: Agustín Francisco Gato (o Gatto) Durán y de Vicente Yáñez. Era hijo del médico Francisco Gato Durán y de Antonia de Vicente Yáñez, que falleció cuando su hijo sólo tenía cuatro años. Se han repetido frecuentemente fechas y noticias de su biografía totalmente erradas; por ejemplo, su nacimiento en 1793 o la realización de estudios de Filosofía en la Universidad de Salamanca.
Su precario estado de salud desde la infancia motivó la elección, por razones climáticas, del Real Seminario de Nobles de Vergara (Guipúzcoa), para realizar sus estudios. Allí permaneció desde el 22 de mayo de 1801 al 17 de noviembre de 1802, más días en cama que en las aulas. Durante los años 1803 a 1806 asistió en ocasiones, junto a su padre, a la tertulia madrileña de Manuel José Quintana, el centro del liberalismo intelectual, donde sin duda conoció a Bartolomé José Gallardo. Un traslado familiar a Sevilla hizo que el 7 de octubre de 1806 se matriculase en el curso de Lógica que había comenzado en septiembre y se examinase en mayo de 1809, justo antes de que Carlos IV decretase la reforma de las universidades españolas.
Durán tuvo que incorporarse entonces a los Reales Estudios de San Isidro, en Madrid, y volvió a Sevilla a principios de 1808, en cuya Universidad obtuvo el grado de bachiller en Derecho el 29 de septiembre de 1813 y el de licenciado el 18 de agosto de 1817. Posiblemente asistió a las clases de Retórica y Poética de Alberto Lista, pues su interés por el estudio de la Literatura ya estaba claramente decidido y sin duda también habían comenzado a materializarse sus afanes de coleccionista, nacidos sin duda por su relación con Bartolomé José Gallardo.
Trabajó primeramente como abogado en la Real Chancillería de Valladolid a partir del 22 de septiembre de 1817, pero pronto retornó a la casa paterna en Madrid. El 16 de junio de 1820 contrajo matrimonio, en la iglesia de San Martín, con María Cayetana Cuervo Martínez, y su hijo Juan José Francisco de Asís Leandro nació el 23 de marzo de 1821.
El segundo, Francisco de Asís Luis María, nació el 24 de septiembre de 1822, y finalmente su hija María Ana Luisa Eulalia en 1829. Decidido a no seguir ejerciendo la abogacía, fue nombrado oficial 2.º de la Dirección General de Estudios, regida por Manuel José Quintana, donde trabajó entre el 14 de septiembre de 1821 y el 10 de mayo de 1823. Al restaurarse el absolutismo logró permanecer en Madrid, gracias quizá a su liberalismo moderado, al contrario que muchos de sus amigos como los ya recordados Manuel José Quintana y Bartolomé José Gallardo.
La colección del teatro antiguo español de Durán era bien conocida. A él y a sus piezas acudió Leandro Fernández de Moratín para preparar sus Orígenes del teatro español. Durán se decidió entonces a dar a conocer su rica colección y con la ayuda de dos jóvenes amigos, Eduardo de Gorostiza y Manuel García Suelto, editó ciento dieciocho comedias en la Colección general de comedias escogidas del teatro antiguo español, con el examen crítico de cada una de ellas, durante los años 1826 y 1834. Destaca su Discurso sobre el influjo que ha tenido la crítica moderna en la decadencia del teatro antiguo español, y sobre el modo con que debe ser considerado para juzgar convenientemente de su mérito particular, de 1828, que constituye un auténtico manifiesto literario en favor del teatro barroco español y es pieza clave en la historia del movimiento romántico. A partir del año 1828, desarrolló una intensa actividad como editor del romancero y del teatro, pero continuó sin empleo, por lo que el 25 de marzo de 1832 escribió a la reina María Cristina de Borbón solicitando su intercesión para obtener una plaza en la Biblioteca Real y enviándole un ejemplar de su Cancionero y romancero de coplas y canciones de arte menor, letras, letrillas, romances cortos y glosas anteriores al siglo xviii, pertenecientes a los géneros doctrinal, amatorio, jocoso, satírico, etc., que él mismo había encuadernado para la ocasión. Con fecha 21 de noviembre de 1833 solicitó Licencia Real para que se le permitiera copiar y tomar los datos necesarios de las obras dramáticas inéditas que existían en la Biblioteca Real, pues se había propuesto publicar una colección del teatro español antiguo, licencia que le fue concedida el 30 de diciembre de 1833, a la vez que se nombraba a Manuel José Quintana, secretario de la Interpretación de Lenguas, para que censurase dicha colección. Desde el 18 de febrero al 1 de diciembre de 1834 fue secretario de la Inspección de Imprentas y Librerías. Ese mismo año, fue nombrado bibliotecario 1.º de la Biblioteca Real por Real Orden del 1 de diciembre, tomando posesión ocho días después. El 2 de enero de 1835 fue elegido contador, cargo que desempeñó hasta su destitución. En el reparto de tareas para 1836 se le asignaron varias salas: la 11.ª, Prohibidos; la 12.ª, Prohibidos y Manuscritos, y la 13.ª, Manuscritos. El 14 de septiembre de 1840 fue destituido, debido a razones políticas, por los progresistas de la Junta Gubernativa de la provincia de Madrid, recuperando su plaza el 15 de enero de 1844.
Miembro de pleno derecho de la Real Academia Española desde el 25 de febrero de 1847, fue nombrado bibliotecario mayor de la Biblioteca Nacional el 23 de octubre de 1854, tras la jubilación de Manuel Bretón de los Herreros. Fue jubilado el 9 de octubre de 1855 pero se le confirmó en el cargo de bibliotecario mayor con el haber de su jubilación, y posteriormente en el de primer director de la Biblioteca Nacional el 3 de diciembre de 1856. Durante su gestión, se publicó, pues, el Decreto Orgánico de la Biblioteca Nacional, de 3 de diciembre de 1856, y el consiguiente Reglamento de 7 de enero de 1857.
Igualmente se produjo la creación del Cuerpo Facultativo de Archiveros, Bibliotecarios y Anticuarios, y la incorporación a él de los bibliotecarios de la Biblioteca Nacional, comenzando por el propio Durán.
En aplicación del reglamento recordado, inició la elaboración y publicación de las Memorias anuales, en las que consta su empeño por conseguir la construcción de un nuevo edificio; lograría, pues, que se encargara al arquitecto Francisco Jareño Alarcón el oportuno proyecto. Su preocupación por la carencia de índices adecuados y suficientes de la colección, le llevó a iniciar la elaboración de un nuevo catálogo general, y con ese fin redactó Indalecio Sancha y Moreno de Tejada la Instrucción para formar los índices de impresos exisstentes en la Biblioteca Nacional que se publicó en 1857.
En 1838 se le concedió la Cruz de la Real Orden de Carlos III y en 1854 la Gran Cruz de la Orden de Isabel la Católica. El 31 de diciembre de 1858 fue nombrado miembro de la Academie d’Archeologie de Belgique.
Editó, con el marqués de Pidal, El cancionero de Juan Alfonso de Baena (Siglo xvi), en 1851, y prologó los Sainetes de Ramón de la Cruz, en 1850, y las Poesías de Joaquín Fontán, en 1851.
Falleció el 1 de diciembre de 1862 ocupando aún el cargo de director de la Biblioteca Nacional. Le sucedió Juan Eugenio Hartzenbusch Martínez. Fue enterrado en el cementerio de la iglesia parroquial de San Martín.
Su viuda puso inmediatamente en venta su célebre biblioteca, que adquirió la Biblioteca Nacional por 9.000 duros. Con la biblioteca particular ingresaron en la Biblioteca Nacional muchos “índices” y “catálogos” preparados por el gran coleccionista y estudioso (Martín Abad, 2004). El “Inventario de la Librería que fue del Excelentíssimo Señor Don Agustín Durán comprada por el Gobierno de S. M. con destino a la Biblioteca Nacional en virtud de Real Orden fecha en 27 de Junio de 1863”, se publicó en la Memoria remitida al Excmo. Sr. Ministro de Fomento, Instrucción y Obras Públicas, por el Director de la Biblioteca Nacional, Madrid, 1865, páginas 30-111.
Obras de ~: Colección general de Comedias escogidas del Teatro antiguo español, con el examen crítico de cada una de ellas, Madrid, Imprenta Ortega y Cía., 1826-1834; Discurso sobre el influjo que ha tenido la crítica moderna en la decadencia del teatro antiguo español, y sobre el modo con que debe ser considerado para juzgar convenientemente de su mérito particular, Madrid, Ortega y Cía., 1828 [reprod. en Memorias de la Academia Española, I, II (1870), págs. 280-336; ed. de R. Navas-Ruiz, en El Romanticismo Español. Documentos, Salamanca, Anaya, 1971, págs. 54-100; ed. de D. L. Shaw, Exeter, University, 1973; y Málaga, Librería Ágora, 1994]; Romancero de romances moriscos compuesto de todos los de esta clase que contiene el Romancero general impreso en 1614, Madrid, Imprenta de León Amarita y Librería Cuesta, 1828; Colección de romances castellanos anteriores al siglo xviii, Madrid, Imprenta de León Amarita, 1828- 1832; Discurso sobre los romances antiguos caballerescos e históricos, y sobre los libros de caballerías, Madrid, Imprenta de León Amarita [1829]; Romancero de romances doctrinales, amatorios, festivos, jocosos, satíricos y burlescos, sacados de varias colecciones generales y de las obras de diversos poetas de los siglos xv, xvi y xvii, Madrid, Imprenta de León Amarita, 1829; Cancionero y romancero de coplas y canciones de arte menor, letras, letrillas, romances cortos y glosas anteriores al siglo xviii, pertenecientes a los géneros doctrinal, amatorio, jocoso, satírico, etc., Madrid, Eusebio Aguado, 1829; Trovas en lenguaje antiguo castellano al augusto enlace del [...] sennor D. Fernando VII con S.M. la Reyna Donna María Cristina, Madrid, 1829; Trovas en antigua parla castellana con motivo de la succesión qu’ofresce el Tálamo del Sennor Rey Don Fernando VII y su augusta espossa Donna María Cristina, Madrid, Imprenta Eusebio Aguado, 1829; Romancero de romances caballerescos e históricos anteriores al siglo xviii, que contiene los de Amor, los de la Tabla Redonda, los de Carlo Magno y los Doce Pares, los de Bernardo del Carpio, del Cid Campeador, de los infantes de Lara, etc., Madrid, Eusebio Aguado, 1832; Trovas a la Reina Nuestra Señora por la salud recuperada de nuestro amado monarca su augusto esposo el Señor D. Fernando VII, y en celebridad de sus benéficos decretos, Madrid, Imprenta de E. Aguado, 1832 [reprod. en Memorias de la Academia Española, I, II (1870), págs. 631-637]; Romancero general, o Colección de romances castellanos anteriores al siglo xviii, Madrid, Imprenta Rivadeneyra, 1849-1851; Este es un romance e unos polidos cantares fechos [...] a guisa de los que joglares e ciegos cantaran en el tiempo viejo. Contiénense aquí las aventuras e amores del buen Cavallero Don Flores de Trepisonda, et la muy verdadera, sabrosa y galante historia que se dize de las toronjas del Vergel d’Amor, Madrid, Eusebio Aguado, 1856.
Bibl.: J. E. Hartzenbusch, “Don Agustín Durán. Discurso leído en la Biblioteca Nacional el día 11 de enero de 1863”, en Gaceta Literaria, 7, 21 de enero de 1826, págs. 50-52; N. Pastor Díaz y F. de Cárdenas, Galería de españoles célebres contemporáneos, o biografías y retratos de todos los personajes distinguidos de nuestros días en ciencias, en la política, en las armas, en las letras y en las artes, vol. VII, Madrid, Rivadeneyra, 1845, págs. 225-228; F. J. Wolf, “Durán”, en Conversations- Lexicon, 5 (1852), págs. 305-306; M. Ovilo y Otero, “Necrología. Don Agustín Durán”, en Museo Universal, 6 (1862), págs. 398-399; F. Cutanda, “Breves frases a la memoria del Excm. Sr. D. Agustín Durán, que falleció en 1º de Diciembre de 1862”, en Memorias de la Academia Española, I (1870), págs. 583-584; J. Simón Díaz, “Los papeles de Durán”, en Revista de Bibliografía Nacional, 6 (1945), págs. 111-113; M. López Serrano, “Don Agustín Durán, encuadernador”, en Revista Bibliográfica y Documental, 1 (1947), págs. 91-95; A. Ruiz Cabriada, Bio-bibliografía del Cuerpo Facultativo de Archiveros, Bibliotecarios y Arqueólogos: 1858-1958, Madrid, Junta Técnica de Archivos, Bibliotecas y Museos, 1958, págs. 270-272; E. Caldera, Primi manifesti del romanticismo spagnolo, Pisa, Istituto di Litteratura Spagnola e Hispano-Americana dell’Università, 1962, págs. 79-90; J. García Morales, “Los empleados de la Biblioteca Real (1712-1836)”, en Revista de Archivos, Bibliotecas y Museos, 73, 1 (1966), pág. 42; D. T. Gries, Agustín Durán. A biography and literary appreciation, London, Tamesis Books, 1975; J. L. Alborg, Historia de la Literatura Española. El romanticismo, Madrid, Gredos, 1980, págs. 127-150; P. Sáinz Rodríguez, Historia de la Crítica Literaria en España, Madrid, Taurus, 1989, págs. 179- 195; M. Sánchez Mariana, Bibliófilos españoles desde sus orígenes hasta los albores del siglo xx, Madrid, Biblioteca Nacional, 1993, págs. 80-81; L. Romero Tobar, Panorama crítico del romanticismo español, Madrid, Castalia, 1994; L. García Ejarque, “La Biblioteca Nacional de España”, en VV. AA., Historia de las Bibliotecas Nacionales de Iberoamérica: pasado y presente, México, Universidad Nacional Autónoma de México, 1995, págs. 266-267; L. García Ejarque, La Real Biblioteca de S. M. y su personal (1712-1836), Madrid, Asociación de Amigos de la Biblioteca de Alejandría, 1997, págs. 266-267; J. M. Martín Abad, Manuscritos de interés bibliográfico de la Biblioteca Nacional de España, Madrid, Arco Libros, 2004.
Julián Martín Abad