Nicolás de la Purificación. ?, p. s. XVII – s. m. s. XVII. Carmelita descalzo (OCD), arquitecto, tracista, tasador.
Apenas se conoce nada de su vida, salvo que se documenta entre los años 1631 y 1654 en las actuales comunidades de La Rioja (Calahorra, Logroño, Alfaro), Navarra (Pamplona, Lapoblación, Meano, Muniaín de la Solana) y Castilla (Cuenca, Ávila), en las que trabaja en el seno de la Orden y fuera de ella. En 1634 se le denomina “trazador de la Orden y muy entendido en su arte” y en 1637 es trazador mayor de la Orden.
Fue muy conocido y respetado en su época, hasta el punto de que el Cabildo catedralicio calagurritano decidió “que no se de por recibida ni se pague obra que no haya sido previamente aprobada por el referido hermano Nicolas”. Dentro de la austeridad y sencillez carmelitana, se sitúa en una línea más barroca y ornamental, iniciada por fray Alonso de San José, cuyas obras en el Convento de Santa Teresa, en Ávila, avaló fray Nicolás cuando fue requerido, en compañía del arquitecto madrileño Alonso Carbonel, por sus superiores. Su actividad conocida está relacionada más con la proyección de edificios y la peritación que con la dirección de obras.
Obras de ~: Trazas para la colegial de San Miguel, Alfaro (La Rioja), 1627 (atrib.); Trazas para la torre de Santa María, Meano (Navarra), 1631; Trazas de la torre de la parroquial, Lapoblación (Navarra), 1631; Trazas del Palacio Episcopal, Calahorra (La Rioja), 1634; Tasación de las obras de Juan de Urruela en la catedral, Calahorra (La Rioja), 1634; Trazas del Convento de carmelitas descalzos, Logroño, 1634; Trazas de la iglesia del Convento de San José, Calahorra (La Rioja), 1635; Informe sobre los solares para la construcción del Convento de Santa Ana, Pamplona, 1637; Traza de la ampliación de la parroquia, Muniaín de la Solana (Navarra), 1646; Informe sobre la capilla de la Virgen del Sagrario de la catedral, Cuenca, 1649; Informe acerca de la reforma del Convento de Santa Teresa, Ávila, 1654.
Bibl.: F. B. San José y F. E. Sagrada Familia, “Arquitectura Hispano-Carmelitana”, en Monte Carmelo, XLIX (1948), págs. 144-145; P. Echeverría Goñi y R. Fernández Gracia, “Aportación de los Carmelitas Descalzos a la Historia del Arte Navarro”, en Santa Teresa en Navarra. IV Centenario de su muerte, Pamplona, Fundaciones del Carmen Descalzo en Navarra, 1982, págs. 207-208; E. Calatayud Fernández, Arquitectura religiosa en La Rioja Baja: Calahorra y su entorno (1500-1650), vol. I, Logroño, Colegio Oficial de Aparejadores y Arquitectos Técnicos de La Rioja, 1991, págs. 578-579; A. J. Mateos Gil, Arte Barroco en La Rioja: Arquitectura en Calahorra (1600-1800). Sus circunstancias y artífices, Logroño, Instituto de Estudios Riojanos, 2001, págs. 89-90 y 165-166.
Ana Jesús Mateos Gil
