Poto [Pottò] y Noguero, Valerio. Graus (Huesca), 30.III.1724 – Roma (Italia), c. 1800. Jesuita (SI) expulso, misionero e historiador.
Según los catálogos, se pueden encontrar variantes en los apellidos: Poto de Noguero, Valerio (Sommervogel) o Valerio Noguera (Lorenzo García).
Ingresó el 3 de febrero de 1740 en la Compañía de Jesús (provincia de Aragón), en la que estudió Retórica, Filosofía y parte de la Teología, que concluyó en México, desde donde pasó a las islas Filipinas en 1750. Profesó solemnemente de cuarto voto el 5 de marzo de 1758. Fue misionero apostólico en las islas Bisayas, y en la mayor de ellas, Mindanao, donde fundó el pueblo que nombró Jesús del Monte, sobre el río Bayo (Hervás). También estuvo en la misión de la isla de Marinduque, sita al sur de Luzón. Conocida la orden de expulsión de Carlos III, embarcó en la fragata San Carlos el 29 de julio de 1768, pero este primer viaje fracasó a causa de un temporal, por lo que retornó a Manila el 22 de octubre de ese año.
Finalmente partió del puerto de Cavite a bordo de la fragata Santa Rosa de Lima el 23 de enero de 1770 con destino a Cádiz, adonde llegaron a principios de agosto de ese año.
En Italia fue a parar a Bagnacavallo, legación de Ferrara, donde se sabe que permaneció al menos hasta 1774. Entre 1781 y 1789 se hallaba viviendo en Roma y Hervás dice en 1794 que “reside en Roma”.
Hervás, a quien le pasaron desapercibidos varios escritores expulsos de la provincia de Filipinas, como el notable helenista Manuel Rodríguez Aponte, compañero de Poto, sin embargo, reseña con cierto detalle, sin duda por conocerse ambos en Roma, tres manuscritos inéditos del aragonés, aunque hubo intentos serios de publicarlos. Ya en 1788 Hervás había escrito: “Poto escribe actualmente una historia completa de las Islas Filipinas, en cinco tomos en cuarto, con el título de Historia política, natural y cristiana de las Islas Filipinas; y me ha dicho que ha enviado tres tomos a Madrid para que se impriman” (Idea dell’Universo, t. II, pág. 248). En efecto, su obra principal son los tres tomos de la Historia política, natural y cristiana de las Islas Filipinas, de la cual dice Hervás en la Biblioteca jesuítico-española (1793) que “el autor el 1786 envió los dos primeros tomos al señor marqués de la Sonora, Secretario de Indias; y a su sucesor, el señor marqués de Bajamar, envió el tomo tercero, el año 1788. Habiendo deseado el señor marqués de Bajamar que la dicha obra se recopilase algo, el autor la redujo a dos tomos y envió el compendio a dicho señor marqués el año 1791, dedicándolo a los señores directores N. N. de la Compañía de Comercio de las Islas Filipinas”. Aunque no consta que se llegase a publicar esta obra, sin embargo, parece que le supuso a su autor la concesión de un socorro extraordinario de 100 doblones, a principios de 1790, según una incompleta noticia del padre Luengo: “En Roma se ha dado a uno de la provincia de Filipinas un socorro extraordinario mucho más abundante. Este ha escrito una Historia de aquellas Islas Filipinas y sin llegar a estamparla han logrado el premio extraordinario de cien doblones [...]” (Diario, t. XXIV, año 1790: 256).
Otro motivo de afinidad de Poto con Hervás era la misma postura crítica sobre las tesis del dominico Spedalieri, quien había mostrado cierta comprensión hacia la Declaración de los Derechos del Hombre de los revolucionarios franceses. Poto escribió unos Reparos sobre la obra de “Los derechos del hombre”, publicada por Nicolás Spedalieri, siciliano, doctor y, antes, lector de teolojía, un tomo, enviado a Madrid en 1793, cuando la opinión pública española estaba en abierta oposición y en guerra contra la Convención francesa.
Ese mismo año, según Hervás, envió a Madrid “algunos discursos y memorias sobre objetos interesantes al público” para su publicación.
En conclusión, el aragonés Poto dedicó el tiempo del destierro italiano, durante más de quince años, a componer una “historia completa” sobre las islas Filipinas, obra importante, a juzgar por el interés de los sucesivos secretarios de Estado de Indias españoles y por la concesión de la pensión doble.
Obras de ~: Historia política, natural y cristiana de las Islas Filipinas, s. l., 1780-1788, 3 ts. (inéd.); Reparos sobre la obra de “Los derechos del hombre”, publicada por Nicolás Spedalieri, siciliano, doctor y, antes, lector de teolojía, s. l., 1793 (inéd.); Discursos y memorias, s. l., 1793 (inéd.).
Bibl.: C. Sommervogel, Bibliothèque de la Compagnie de Jesus, vol. VI, Bruxelles-Paris, O. Schepens y A. Picard, 1890, col. 1112; S. Lorenzo García, La expulsión de los jesuitas de Filipinas, Alicante, Universidad, 1999, pág. 107; L. Hervás y Panduro, Biblioteca jesuítico-española, ed. de A. Astorgano, Madrid, Libris Asociación de Libreros de Viejo, 2007, págs. 653-654.
Antonio Astorgano Abajo
