Viscasillas Bernal, Manuel. Zaragoza, 6.IV.1882 – Barcelona, 6.V.1963. Violinista y profesor.
Hijo del compositor y diplomático Eduardo Viscasillas Blanque, secretario que había sido de la Academia de Bellas Artes de Roma, y rector del Real Colegio de San Clemente, en Bolonia; comenzó los estudios de solfeo bajo la dirección de su madre; a los 4 años su padre le instruyó en los estudios de violín, y a la edad de 5 años, en octubre de 1887, previa dispensa de edad, ingresó en el Conservatorio de Música y Declamación de Isabel II de Barcelona; en la clase de solfeo del maestro Balaguer y en la de violín del maestro Teodoro Güel, hizo tan rápidos progresos, que a los diez meses ya había terminado los estudios de la 1ª clase y en la de violín entraba en el 4º año del método Atard; cursó allí hasta abril de 1889, en que, por circunstancias especiales de familia, se trasladó con ésta a la corte, y obtuvo ya notables laudos; prosiguió sus estudios en el Conservatorio de Madrid con Jesús Monasterio, y en varios salones se escuchó con agrado al precoz artista, que fue objeto de toda clase de atenciones. En la noche del 19 de mayo de 1889 tuvo el honor de ser oído en Palacio por la Real familia, que apreció sus extraordinarias aptitudes. En aquel mismo año, en las solemnes funciones religiosas celebradas el día 12 de octubre en la basílica del Pilar de Zaragoza, ejecutó en el ofertorio de la misa, y acompañado por la orquesta, la meditación Le Calme del maestro Gounod, autor de Fausto. Aún no tenía ocho años, y conocía á fondo y ejecutaba romanzas de Mendelsshon, Chopin, Thomas, Gounod, Geng, Brag, Botsoni, y otros maestros.
Ttrasladado a Italia en 1890, ingresó en el Real Conservatorio de Bolonia, donde fue discípulo de Massarenti, sobrino de la célebre Alboni, y en los exámenes de fin de curso ganó el primer premio con el Gran Concierto en sí bemol mayor de Mozart, obra de serias dificultades, que sería el primero en abordarlas a la edad de 9 años. En la tarde del 17 de mayo, quinto cumpleaños del rey Alfonso XIII, se celebraba en el Real Colegio de San Clemente de Bolonia, por disposición del rector, Eduardo Viscasillas “distinguido cultore di musica y compositor”, una matinée musical, en la que fue aplaudido el niño Manuel, ejecutando el Prelude du Deluge (Saint Säens), Le Calme y Ave María (Gounod), y Adiós a la Alhambra (Monasterio), acompañándole al piano el maestro Minguzzi, y formando la orquesta (cuatro violines, un violoncello y un contrabajo) los jóvenes Nanissi, Stiassi, Bassoli, Sturani, Sofritti, Gualdi y Magagnoli, alumnos del Real Conservatorio de Bolonia. El periódico de Bolonia la Gazzeta dell` Emilia nos dejó constancia de esta celebración: “El concierto se efectuó en el piso principal del Real Colegio, en la Galleria dei quadri, soberbio salón enriquecido con magistrales obras de artistas célebres y primorosamente adornado con flores. El hijo del rector, Manuel Viscasillas, que se presentaba por primera vez al aplauso de las damas boloñesas, después de haber ganado los del ilustrado público de varias ciudades españolas, y también el de S. M. la Reina Regente de España, obtuvo un éxito clamoroso. Pocas veces habíamos oído a un violinista tan valiente (y es un niño de nueve años), ni tan notable por la seguridad, el brío y la finezza de interpretación, el cual tuvo que repetir el Adiós á la Alhambra del célebre Monasterio y el Ave María de Gounod, entre los aplausos calurosos y prolongados del selecto auditorio, agradablemente emocionado por el infantil artista”. Il Resto del Carlino (La Patria), afirmaba que ”il bambino Manuel Viscasillas demuestra ya, en la técnica del violín, dominar las dificultades y ejecutar con precisión”, y le pronosticaba “ser en breve un eximio concertista, porque es sorprendente su forza di cavata, esatteza ritmica e sicurezza de arcata”. Poco después pasó a la patria del divino Maestro (Saltzburg) en ocasión del centenario, y allí en la sala del Mozarteum de Viena, acompañado al piano por Hummel, confirmó el éxito obtenido en Bolonia, reconfirmándolo después con el insigne Bretón y la orquesta de la Sociedad de Conciertos de Madrid, en el Teatro Circo de Zaragoza, el día 27 de agosto de 1893. De la actuación del niño Manuel en este último concierto decía la prensa de la época que “realmente maravilla ver a un niño de diez años ejecutar con maestría obras que a los mas notables profesores presentan innumerables dificultades. Ayer le oímos el nocturno de Chopin, (op 9) de Sarasate y el primer tiempo del Gran Concierto en sí bemol de Mozart, con acompañamiento de orquesta. Tocó primorosamente, fue muy aplaudido y al acabar recibió una preciosa corona”. En las obras de estilo español consiguió grandes aplausos en Londres, y sus conciertos en Suiza, Italia y Francia, sobre todo en París, en las salas Geografía y Pleyel, le dieron patente de concertista notable. En el Palacio de Cristal de la Aclimatación, con la orquesta de Pister, el día 23 de abril de 1893 –con tan sólo 11 años–, obtuvo uno de los triunfos mas ruidosos ante seis mil personas. En otro concierto celebrado en París en la gran Sala Pleyel el 30 de mayo de 1894, los críticos franceses lo compararon con Camilo Sivori –discípulo de Paganini-. El programa estaba formado por composiciones de Mozart, Beethoven, Chopin, Schubert, Beriot, Pfeiffer, Liszt, Simón, Sarasate y Monasterio, y la interpretación de La Fée d´Amour de Raff fue calificado por la prensa francesa como de “una intensidad de expresión extraordinaria”. En este concierto de la Sala Pleyel fue su compañera Adeline Bailet, niña de 14 años que en julio de 1893 ganó en París el primer premio del Conservatorio, y que, en su campaña artística por Italia, Francia y especialmente en Nápoles y Niza, donde fue oída por el emperador de Brasil, alcanzó gloria y dinero. Por estos tiempos El Liberal vaticinaba del niño Manuel que “dentro de muy pocos años la capital de Aragón tendrá como la de Navarra, su correspondiente Sarasate”. Manolito fue aplaudido y obsequiado en el Teatro de Ginebra (Suiza) y en el Casino de Biarritz (Francia) bajo la dirección del maestro Arthur Steck. Fue agasajado con una rica y elegante botonadura de brillantes y ópalos por S. M. la Reina Regente en un concierto celebrado en la Plaza de Oriente en junio de 1900. El 13 de diciembre de 1900 obtuvo un triunfo mas en la tercera matinée celebrada La Princesa. El Liberal describe el acontecimiento diciendo que “Viscasillas, desde su presentación en la escena, fue constantemente ovacionado. Así, en el Nocturno de Chopin, que interpretó magistralmente, como en los Aires Bohemios y demás obras de Sarasate, el eminente violinista aragonés rayó a gran altura, y vio su labor premiada con frenéticos y prolongados aplausos”; El Imparcial señaló que “el público le colmó de aplausos, y le llamó repetidas veces al palco escénico en la interpretación de las obras del insigne Sarasate”. En 25 de febrero de 1902, la reina Isabel y la infanta Eulalia, dieron una fiesta en sus salones de la Avenida Kleber de París. El programa de la soireé era muy notable, sobresaliendo joven Manuel, quién con Godefroid, compartió los elogios de Isabel II en el palacio de Castilla.
Durante su juventud compaginó el ejercicio de la música con el estudio del derecho, licenciándose en la Universidad de Zaragoza. En su madurez se dedicó por completo al ejercicio del profesorado y fue nombrado, previo concurso, profesor de violín y viola de la Escuela Municipal de Música de Barcelona –actual Conservatorio Superior–, ganando más tarde la cátedra de música. Fue concertista y primer violinista en el Liceo de Barcelona. Estuvo casado con doña Concepción García Juliá.
Bibl: La Correspondencia de España; Diario de Avisos (Zaragoza), 28 de agosto 1893; España Ilustrada, 30 de junio de 1894; El Imparcial, 21 de junio de 1900; La Ilustración Española y Americana, n.º XXII, 30 de junio de 1900; El Liberal, 15 de diciembre de 1900; El Imparcial, 16 de diciembre de 1900; El Liberal, 3 de marzo de 1902; La Época, 16 de mayo de 1902; Diario de Barcelona, 8 de junio de 1963; F. Cortés i Mir, “Viscasillas Bernal, Manuel”, en E. Casares Rodicio (dir y coor.), Diccionario de la Música Española e Iberoamericana, vol. 10, Madrid. SGAE, 2002, pág. 971-972.
Carlos Viscasillas Vázquez.
