Vega Díaz, Francisco. Sevilla, 25.VIII.1907 – Madrid, 4.VIII.1995. Médico, cardiólogo.
Realizó sus estudios de Medicina en la Facultad de Medicina de Madrid. En 1934 fue pensionado para trabajar en Colonia sobre fisiología y patología del seno carotídeo, así como sobre farmacodinamia de la estrofantina con H. E. Hering y Bruno Kisch. Mas tarde profundizó en estos estudios en la Clínica Cardiológica de la Universidad de Boston con Soma Weiss y Paul Dudley White. Aunque recibió importantes influencias de ellos, sus maestros fundamentales fueron Carlos Jiménez Díaz y Juan López Brenes. En 1950 obtuvo el grado de doctor con la tesis Obnubilaciones y síncopes tusígenos con consideraciones sobre el vértigo laríngeo de Charcot. Tras trabajar con Jiménez Díaz durante muchos años, fue jefe del Departamento de Geriatría y de Investigaciones de Cardiología Endocrina en el Instituto de Patología Médica (1943-1944) que dirigía Gregorio Marañón Posadillo, donde realizó estudios sobre cardiología endocrina experimental. Fue jefe del Departamento de Cardiología del Instituto Nacional de Medicina del Trabajo (1948-1957) y del Departamento de Cardiología de la Residencia Sanitaria La Paz (1964-1967)
De gran formación y personalidad, batalló por introducir una cardiología científica en España realizando importantes conexiones con la cardiología internacional. Su papel en la creación de la Sociedad Española de Cardiología fue realmente excepcional trabajando incansablemente por su fundación junto a Antonio Azpitarte Rubio, Carlos Jiménez Díaz, Manuel Díaz Rubio, Juan Andreu Urra, Luis Trías de Bes, José Antonio Lamelas González, Juan Codina Altés y Fernando Rodríguez Fornos. Cuando fue presidente de dicha Sociedad luchó por separar la especialidad de pulmón y corazón y por la intervención de ella en el nombramiento de especialistas. Fundó la Fundación Hispana de Cardiología.
De sus aportaciones destacan sus estudios sobre electrocardiografía y en particular sus contribuciones sobre la onda Q. Estudió con detenimiento los beneficios de la quinidina en las arritmias y comunicó resultados superiores con la radioterapia de las cápsulas suprarrenales en los pacientes con arterioesclerosis periférica que los conseguidos en el angor pectoris. Partidario de una cardiología antropográfica, realizó intentos clasificatorios de las cardiopatías basándose en la edad de presentación. Contempló al enfermo cardiovascular como un hombre en su totalidad y no como un corazón enfermo. Defendió la nosología individual de toda enfermedad al margen de su carácter orgánico, funcional o psíquico. Entre sus discípulos destacan entre otros Feliciano Pérez Casar, Adolfo Navarrete Pelous, Fernando Gómez de la Granda, Fernando Valdés y Alonso Montero.
Gran publicista, sus artículos en revistas fueron numerosos sobre todos los temas cardiológicos. Entre sus libros es de destacar Síncopes cardiovasculares, Algunos problemas clínicos de la cardiopatía senil, Cuatro lecciones de Cardiología Clínica y El hombre y su corazón: introducción a una cardiopatía antropobiográfica. Entre 1963 y 1971 fue presidente de la Sociedad Española de Cardiología y posteriormente presidente de honor. Lo fue también de la Fundación Hispana de Cardiología. Miembro de honor de diversas Sociedades de Cardiología y entre ellas de Italia, Argentina, Costa Rica y Venezuela. Fue vicepresidente de la Sociedad Europea de Cardiología. Donó su biblioteca privada a la Real Academia Nacional de Medicina
Obras de ~: La quinidinterapia en clínica cardiológico, 1933; Síndromes cardiovasculares, 1953; Síncopes cardiovasculares, Sevilla, 1953; Algunos problemas clínicos de la cardiopatía senil, Valencia, 1954; Cuatro lecciones de Cardiología Clínica, Tenerife, 1961; Sobre el concepto clínico de hipertensión arterial, 1968; El hombre y su corazón: introducción a una cardiopatía antropobiográfica, Madrid, 1973; La rehabilitación y la ergonomía en las enfermedades cardiovasculares, 1973.
Bibl.: M. Torner Soler, “Francisco Vega Díaz”, en Revista Española de Cardiología, 49, (1996), pág. 236; M. de Fuentes Sagaz, Historia de la Sociedad Española de Cardiología, Barcelona, Fundación Uriach, 1994.
Manuel Díaz-Rubio García