Nieto Asensio, Ponciano. Valverde de Campos (Valladolid), 9.III.1875 – Madrid, 29.X.1936. Fraile paúl (CM), mártir y escritor.
Nacido en el seno de una familia profundamente cristiana, fue bautizado y confirmado en la iglesia parroquial de su pueblo natal. De aquí se trasladó a Medina de Rioseco (Valladolid) para cursar los estudios de Latín y Humanidades. Cumplidos los quince años, ingresó en la Congregación de la Misión (1890) y fue ordenado sacerdote en Huesca (1899).
Su clara inteligencia y su disposición literaria le llevaron a centros de formación y educación, circunstancia que favoreció su aptitudes ante el estudio y la investigación histórica. Comenzó impartiendo cursos en el Colegio de Alcorisa (Teruel), aun antes de ser ordenado sacerdote, para continuar en los colegios de Limpias (Cantabria) y Andújar (Jaén) en 1897-1905. Hacía hincapié ante sus alumnos en la necesidad de dejarse formar humanística y literariamente, con lo cual estaba subrayando su vocación y máximo interés por las letras.
La necesidad de personal preparado para dirigir seminarios en Cuba le obligó a embarcarse hacia América, donde desarrolló una intensa labor, aunque de corta duración, concretamente en Santiago de Cuba y en el colegio-Seminario de Matanzas (1905-1908). Creó círculos de estudio y transmitió a los estudiantes cubanos los métodos elementales de una seria investigación que él había aprendido en España.
Como el clima tropical afectaba seriamente su salud, volvió a Madrid y fue enviado a La Laguna (Tenerife) (1908-1910). Repuesto de su debilidad, saltó a México, primero a la Casa de Ejercicios y poco más tarde a la Escuela Apostólica de San Juanico (1910- 1914): cuatro años de intensa actividad intelectual y de búsqueda de documentos en archivos y bibliotecas; era la base sobre la que construiría la biblioteca vicenciana y sobre la que reforzaría sus argumentos históricos y teológicos espirituales. Si la voz no le permitía pronunciar discursos, con la pluma dejaba constancia de su vasta erudición.
En el corto espacio de tiempo vivido en México había, en efecto, acumulado documentación suficiente para su primera obra de envergadura: Historia de la Congregación de la Misión en México, publicada, años más tarde, en España. Había recibido la aprobación del superior general, padre Antonio Fiat, para realizar el proyecto de una Biblioteca de San Vicente de Paúl sin que llegara a efectuarla en México, pero sí en su país natal.
De México salió obligado a Cuba (1914-1920) a consecuencia del régimen revolucionario implantado por el presidente Venustiano Carranza, hostil a la Iglesia, a la que privó de libertad de culto y regó con sangre el suelo mexicano. El padre Nieto no entró en discusiones sobre la Revolución mexicana; prefirió embarcarse de nuevo a Cuba y proseguir su obra iniciada en la etapa anterior, ordenando esquemas y periodizando la historia, pero sin llegar a publicarla; le faltaban aún detalles que su escrupulosidad y rigor mental no le permitían pasar por alto.
A finales de 1920 regresó de nuevo a España y se consagró de lleno a la atención espiritual de las Hijas de la Caridad. En años distintos dirigió tres revistas: La Inmaculada de la Medalla Milagrosa (1921-1923), Anales de la Congregación de la Misión y de las Hijas de la Caridad (1922-1928) y La caridad en el mundo (1931-1933), que le sirvieron de medio de comunicación ante la situación política y social de España. Cada una de aquellas revistas delatan las inquietudes vividas por su director: deseo de formar a los laicos para la defensa de la Iglesia en situación persecutoria y legar a la posteridad una historia documentada de las Hijas de la Caridad.
Un incidente inesperado le trasladó a Canarias (1928), y, después a la Península en 1930. Con más tesón que nunca reanudó la escritura de otras obras, además de la Historia de las Hijas de la Caridad desde sus orígenes hasta el siglo XX.
Hasta entonces no se había concebido en España una obra de tales dimensiones y de tanta responsabilidad. En ella las representaciones de cuadros artísticos que acompañan al texto avalan los argumentos con que trata de probar el proceso histórico.
En sus artículos periodísticos se filtraba su temor ante la promulgación de la Segunda República (1931) en la que él mismo podría verse envuelto y el peligro de una guerra civil ante el cariz anticlerical que iban tomando los acontecimientos.
Fue sorprendido mientras trataba de refugiarse en un lugar seguro y conducido a prisión junto con el padre Maurilio Tobar. El 29 de octubre de 1936 fueron fusilados. Hasta ese momento había logrado publicar el primer tomo de su gran proyecto sobre la historia de España que quedó por tanto incompleta.
Obras de ~: Vida de la Venerable Luisa de Marillac, Madrid, A. C. Villar, 1914; Historia de la Congregación de la Misión en México (1844-1884), Madrid, PP. Paúles, 1920; La gran cuestión. Mi modo de pensar sobre ella. Júzgala por ti mismo, Madrid, Regina, 1931; Historia de las Hijas de la Caridad desde sus orígenes hasta el siglo XX, Madrid, Regina, 1932; La Beata Catalina Labouré y la Medalla Milagrosa, Madrid, Regina, 1933; Introducción al estudio de la Sagrada Escritura, Madrid, Regina, 1934; Santa Teresa de Jesús, confirmación de la verdad del cristianismo, Madrid, Regina, 1935.
Bibl.: E. Fuente, “El Padre Ponciano Nieto”, en Paúles e Hijas de la Caridad mártires, 1936, Madrid, La Milagrosa, 1942, págs. 57-63.
Antonino Orcajo Orcajo, CM