Alcalá-Galiano y López, Pelayo. Barcelona, 8.V.1840 – Madrid, 28.I.1935. Marino y escritor.
Hijo de Agustín Alcalá Galiano y de María López de la Peña, y sobrino-nieto del brigadier de la Armada, fallecido en la famosa batalla de Trafalgar, Dionisio Alcalá-Galiano y Alcalá-Galiano. Su abuelo, José Alcalá Galiano falleció también en el Rosellón, el 1 de mayo de 1794, en acto de servicio. La elección, por tanto, de su actividad profesional vendrá marcada por la tradición familiar en el campo de las armas. Su vida militar se inicia el 30 de junio de 1853 como aspirante en el Colegio Naval Militar. Tres años después ya es guardiamarina y, en 1859, asciende a guardiamarina de primera clase.
Entre 1856 y 1869, formó parte de la dotación de varios buques, con los que navegó por el Mediterráneo y mares cercanos a la Península; accedió a puertos de las posesiones coloniales españolas, como La Habana o Fernando Poo; y participó en la Guerra de África (1859-1860), en uno de los buques que bombardearon los fuertes de Tetuán. En este período, sufrió una caída estando de guardia en el vapor León, que le obligaría a pedir el pase a la reserva al quedar inútil, el 31 de diciembre de 1873. Cuatro años antes, el 3 de abril de 1869 había contraído matrimonio con María Ruiz y Merelo.
Entre 1863 y 1869, estuvo destinado en el Observatorio de San Fernando, en el que estudió Astronomía.
De la época posterior a su pase a la reserva, data la mayor parte de su producción como escritor, empezando por la redacción, en 1871, del Código internacional de señales, en colaboración con el delineador- constructor de cartas del Depósito Hidrográfico, Martín Ferreiro. Posteriormente, y con la introducción de los semáforos marítimos, escribió el folleto El código internacional de señales y semáforos (1873), lo que tuvo una repercusión en su actividad profesional, participando como vocal de la Comisión de Gobernación, Marina y Ultramar para elaborar los reglamentos del servicio semafórico del litoral y, más adelante, ocupando el cargo de jefe de negociado de semáforos del Almirantazgo.
De su actividad en la Dirección de Hidrografía, de la que fue director interino en varias ocasiones, 2.º jefe y, finalmente, director numerario (1990), data su debate con Cesáreo Fernández Duro, acerca de la ubicación exacta de Santa Cruz de Mar Pequeña. La ocupación de esta plaza, en la que se había erigido una torre española en 1476, era una de las concesiones del Tratado de Uad-Ras, que puso fin a la Guerra de África, entre España y Marruecos, en 1860. Tres posturas encontradas parecían coexistir en 1879 sobre dicha posición: Francisco Coello y Martín Ferreiro la fijan en la orilla izquierda del Draa, postura que fue apoyada por la Dirección de Hidrografía, hasta que se adhiriera a la de Alcalá Galiano; Cesáreo Fernández Duro, que participó en la comisión de reconocimiento de la costa del noroeste africano llevada a cabo por el Blasco de Garay en 1878, la sitúa en Ifni; Pelayo Alcalá Galiano, por encargo del Ministerio de Marina, estudió los mapas y escritos que aludían al tema y situó el emplazamiento del antiguo fuerte en la desembocadura del río Chibica. La polémica se extendió a lo largo del siguiente quinquenio en las reuniones de la Sociedad Geográfica, de la que llegó a ser presidente Fernández Duro, y su órgano el Boletín de la Sociedad Geográfica de Madrid, y el diario La Época, en el que colaboraba habitualmente en asuntos técnicos Pelayo Alcalá Galiano. La discusión osciló constantemente entre la exactitud geográfica y la idoneidad política y comercial del punto a ocupar. Con todo, Alcalá Galiano se mostró favorable a aceptar el sitio que se cediese por parte del Gobierno marroquí, siempre que fuera cedido a perpetuidad.
La rivalidad con Fernández Duro continuó en años posteriores en temas tan diferentes como la categoría de nao o carabela de la Santa María, que acompañó a la Pinta y la Niña en el primer viaje de Cristóbal Colón a las Indias Occidentales, o la condición de marino de Cervantes. En el primer caso, Alcalá Galiano manifestó su disentimiento con Fernández Duro, que había sostenido que la nave era una carabela en sus Disquisiciones náuticas (1877) y en Pinzón en el descubrimiento de las Indias (1892), en un folleto que dio a la imprenta en 1892, La carabela gallega o Santa María o la nao capitana de Colón. Sobre la condición de marino de Cervantes, Alcalá Galiano polemiza con el socio de la Geográfica en su obra Servicios militares y cautiverio de Cervantes, publicada en 1905, en la Revista General de Marina, negando la categoría de marino, o siquiera la de soldado de marina, al ilustre escritor español, que Fernández Duro le concediera en su obra de 1869, Cervantes marino.
El estilo de Alcalá Galiano como escritor está basado en la descripción minuciosa y la abundante documentación referenciada que impera en todas sus obras. Entre los temas de su producción literaria, que alcanza una veintena de títulos e innumerables artículos publicados en prensa diaria (La Época) y especializada (Revista General de Marina o Mundo Naval Ilustrado), predominan los relacionados con su trayectoria profesional.
Su obra más voluminosa fue El combate de Trafalgar, escrita en su longeva senectud, y publicada en varias entregas en la Revista General de Marina, desde 1905, hasta casi 1930, cuando el general de brigada de Infantería de Marina, contaba con noventa años.
La obra se publicó, asimismo, en dos volúmenes, saliendo a la luz el primero de ellos en 1909 y el segundo, en 1930. En 1931, aún daría para su publicación en la Revista General de Marina, órgano de la Dirección de Hidrografía, un artículo sobre Gravina y Escaño en el que continúa con la temática que le ocupara en sus últimos años.
Obras de ~: Con M. Ferreiro y Peralta, Código internacional de señales, Madrid, Fortanet, 1871; El código internacional de señales y los semáforos, Madrid, Imprenta Nacional, 1873; Memoria sobre la situación de Santa Cruz de Mar Pequeña en la costa noroeste de África, Madrid, Imprenta de los Señores de Rojas, 1878; Memoria sobre Santa Cruz de Mar Pequeña y las pesquerías en la costa noroeste de África, Madrid, Imprenta Fortanet, 1879; Más consideraciones sobre Santa Cruz de Mar Pequeña, Madrid, Imprenta Rojas, 1879; Palacio del Marqués de Santa Cruz en el Viso, Madrid, Establecimiento Tipográfico Fortanet, 1888; Botadura: colección de artículos de varios ingenios, Madrid, Fortanet, 1890; La carabela Gallega o Santa María o la nao capitana de Colón, Madrid, Tipografía Ricardo Álvarez, 1892; Nuevas consideraciones sobre las carabelas de Colón, Madrid, Tipografía Ricardo Álvarez, 1893; Santa Cruz de Mar Pequeña: pesquería y comercio en la costa noroeste de África, Madrid, Imprenta del Ministerio de Marina, 1900; Noticia de las competencias de la Infantería de Marina y de los privilegios del Cuerpo General de la Armada, Madrid, Imprenta de la Revista General de Marina, 1902; El combate de Trafalgar, Madrid, 1905 y 1930, 2 vols. (est. introductorio de E. Martínez Ruiz, Madrid, Instituto de Historia y Cultura Naval, 2003).
Bibl.: A. Pedraz Marcos, “La discusión sobre Santa Cruz de Mar Pequeña y la presencia de España en África”, en Quimeras de África. La Sociedad Española de Africanistas y Colonistas: el colonialismo español de finales del siglo xix, Madrid, Polifemo, 2000, págs, 110-127; V. Herrero Mediavilla (ed.), “Alcalá Galiano, Pelayo”, en Índice Biográfico de España, Portugal e Iberoamérica, München, Saur, 2000; E. Martínez Ruiz, “Estudio introductorio”, a P. Alcalá Galiano, El combate de Trafalgar, Madrid, Instituto de Historia y Cultura Naval, 2003.
Azucena Pedraz Marcos