Alaiz de Pablo, Felipe. Bellver de Cinca (Huesca), 23.V.1887 – París (Francia), 8.IV.1959. Militante y periodista anarquista.
Hijo de una familia aragonesa que tenía propiedades en Lérida (el padre era militar y había luchado en la Guerra de Cuba y la madre destacaba por su cultura), pasó su adolescencia en esta ciudad catalana y luego fue a Madrid para seguir estudios de Marina Mercante. Abandonó los estudios antes de finalizarlos e inició su dedicación al periodismo colaborando con El Sol (1912-1914) y, tras regresar a Aragón, con las dos publicaciones aragonesistas, La Revista de Aragón y Aragón. En un momento incierto entre 1915 y 1920 se decantó por el activismo político junto con los aragoneses Gil Bel y Joaquin Maurín, Ángel Samblancat y Ramón Acín, que ya era anarquista y con el que Alaiz hizo en 1919-1920 Floreal. A continuación, vino el paso a la colaboración en diferentes iniciativas periodísticas libertarias: en 1920, Fructidor de Tarragona; en 1921, Claridad con Acín y de nuevo en Zaragoza; en 1922, Voluntad, también de la capital aragonesa. En 1922-1923, pasó a Barcelona y de allí a Valencia y después a Sevilla, donde dirigió Solidaridad Obrera de la Confederación Nacional de Trabajadores (CNT) andaluza. De regreso a Barcelona, se incorporó al grupo de acción específica Los Solidarios entre otros de Durruti y Ascaso o García Oliver y, con ellos, hizo en 1923 Crisol (en especial, con Liberto Callejas, otro periodista militante anarquista).
En 1924-1925, tras salir de la prisión, trabajó como co-director de la Revista Nueva de Barcelona, en este caso con el libertario Antonio Garcia Birlán, “Dyonisios”.
Y, durante todo lo que restaba del período “primoriverista” estuvo en la redacción de El Día Gráfico, un periódico de empresa para el que escribía un cuento semanal, actividad que compaginó, a fin de obtener lo necesario para vivir, con la de traductor.
En 1930, dirigió Tierra y Libertad, el semanario anarquista de la FAI, y, en el verano de 1931, pasó a Solidaridad Obrera de Barcelona y tras la crisis que creó la dimisión de Joan Peiró, su anterior director, Alaiz se encargó de este periódico de la CNT catalana entre octubre de 1931 y enero de 1932 y, tras su paso por la Modelo de Barcelona, regresó entre abril y septiembre de 1932. En estos años también colaboró en las publicaciones que la familia Montseny editaba en Barcelona, en especial La Revista Blanca y las populares colecciones La Novela Ideal y La Novela Libre. Durante la Guerra Civil, volvió a Tierra y Libertad de la FAI y, a continuación, dirigió Acracia de Lérida, destacándose en la oposición al “gubernamentalismo anarquista” de los principales comités y dirigentes anarquistas. En los años de la ocupación alemana estuvo internado en un campo de castigo del Midi francés y, tras el fin de la conflagración mundial, se aposentó para siempre ya en Francia.
La muerte le sorprendió en París, donde en 1948 había dirigido el periódico CNT. Su perfil militante había estado siempre directamente unido al del periodismo militante anarquista, al que aportó un estilo bohemio y temperamental directamente emparentado con la tradición modernista que los libertarios que escribían habían manifestado siempre y no abandonarían ya hasta la Guerra Civil española. Alaiz también destacó por ser el anarquista que más abiertamente planteó cuestiones relativas a lo que hoy recibe el nombre de “periodística”. La monografía Cómo se hace un diario (1933) era, por un lado, una respuesta al periodista catalanista Josep Morató Grau, redactor jefe de La veu de Catalunya, el periódico de la Lliga.
Por otro, constituía una reflexión a favor de la modernización de los periódicos anarquistas para los que Alaiz reclamaba los más modernos medios periodísticos y, en concreto, la introducción de los reportajes políticos que debía asemejarlos a los muckrakers americanos de principios del siglo xx, en especial a Upton Sinclair, a quien había traducido. Siguiendo estos antecedentes y el amplio conocimiento del periodismo internacional que le caracterizaba, Alaiz proponía que se dedicaran a “remover la inmundicia” de la política y favorecer así el desencanto con la política republicana y el advenimiento de la revolución anarquista.
Obras de ~: Quinet, Barcelona, Hoy, 1924; Para que la propaganda sea eficaz, Barcelona, Comité Regional de Juventudes Libertarias de Cataluña, 193-?; Un club de mujeres fatales, Barcelona, publicaciones de “La Revista Blanca”, 1931, y Barcelona, La Novela Ideal, n.º 241, 1932; María se me fuga de la novela, Barcelona, publicaciones de “La Revista Blanca”, 1932, y Barcelona, La Novela Ideal, n.º 303, s. f.; Los Aparecidos, Barcelona, publicaciones de “La Revista Blanca”, s. f., y Barcelona, La Novela Ideal, n.º 381, 1933; Vida y Muerte de Ramón Acín, Barcelona, Oficinas de Propaganda CNT-FAI, Comité Regional de Cataluña, 1937?; Hacia una Federación de Autonomías Ibéricas (colección de 17 fascículos), Bordeaux, Tierra y Libertad, 1945-1948; Arte de escribir sin arte, Toulouse, Edic. F.I.J.L., 1946; Tipos Españoles (2 vols.), París, Editorial Umbral, 1962-1965.
Bibl.: J. Peirats, De mi paso por la vida (ined.), 1974; Anónimo, “Felipe Alaiz, anarquista heterodoxo”, en Ruta, Año IX, 2.ª época, n.º 35 (1.VI.1978); F. Carrasquer, Felipe Alaiz. Estudio y antologia por ~ del primer anarquista español, Madrid, Júcar, 1981; S. Tavera, Solidaridad Obrera. El fer-se i desfer-se d‘un diari anarco-sindicalista (1915-1939), Barcelona, Diputació- Col·legi de Periodistes de Catalunya, 1992.
Susanna Tavera García