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Martín de León y Cárdenas

Biografía

León y Cárdenas, Martín de. Archidona (Málaga), 1584 – Palermo (Italia), 16.XI.1655. Religioso agustino (OSA), obispo de Trivento y de Pozzuoli, arzobispo de Palermo, presidente y capitán general del reino de Sicilia.

Nació en Archidona a finales de 1584, en el seno de una familia de hidalgos acomodados. Realizó el noviciado en el convento de San Agustín de Sevilla, perteneciente a la provincia de Andalucía de la Orden de San Agustín, y en esa casa emitió la profesión el 13 de noviembre de 1601. Los estudios eclesiásticos los comenzó en Sevilla, quizá en el colegio agustiniano de San Acacio, y terminó los estudios teológicos en la Universidad de Salamanca. Ordenado sacerdote en 1610 o 1611, fue enviado a Perú poco después, donde residió en el convento de San Agustín de Lima y frecuentó al entonces virrey Juan de Mendoza y Luna, marqués de Montesclaros, del que en 1628 sería albacea testamentario, y a su confesor, el agustino Pedro Ramírez. Durante su estancia peruana participó en los funerales que el virrey organizó en 1612 por el fallecimiento de la reina Margarita de Austria. Martín de León publicó entonces un volumen en el que se recogía el relato de las honras fúnebres y diversas composiciones poéticas. En Lima permaneció hasta finales de 1616, cuando regresó a España junto con el marqués de Montesclaros y el padre Pedro Ramírez.

En el Capítulo Provincial celebrado en Sevilla en abril de 1617 fue elegido prior provincial su compañero peruano el padre Pedro Ramírez. Martín de León fue nombrado secretario del provincial y designado definidor para el Capítulo General que debía celebrarse en Roma en 1620. De camino para Roma se detuvo unos días en Ávila, donde el 26 de febrero de 1620 obtuvo el magisterio en Sagrada Teología. En Roma permaneció desde finales de mayo de ese año hasta abril de 1621. El 15 de julio de 1620 el prior general, padre Fulgencio Galluci, le concedió el magisterio en Teología por la Orden. De regreso a España residió en el convento de Sevilla, y participó en todos los Capítulos Provinciales de su provincia y adquirió fama de predicador. Allí se encontraba cuando en 1627 Felipe IV manifestó la intención de presentarlo para obispo de Trivento en el virreinato de Nápoles.

La Cédula Real de presentación está fechada a 7 de enero de 1629 y en abril de 1630 Martín de León se encontraba ya en Roma y allí se realizó el proceso de la dataría, que se abrió el 21 de abril. El 13 de mayo de 1630 Urbano VIII lo nombró obispo de Trivento y pocos días después, el 20 de mayo, fue consagrado obispo por el cardenal Laudivio Zacchia en la iglesia de San Agustín de Roma. El 29 se le concedió el título de asistente pontificio. No llegó a desplazarse a su diócesis, pues desde la embajada de Roma se gestionaba su traslado al obispado de Pozzuoli para el que, el 11 de enero de 1631, era presentado por el Monarca, y fue nombrado por Urbano VIII el 7 de abril.

Se iniciaba así su episcopado puzzeolano, caracterizado constantemente por su preocupación pastoral y social y la promoción de la ciudad, en la que construyó una nueva catedral, levantó el convento carmelitano de San Jenaro, ensanchó la plaza de la catedral, restauró el acueducto que llevaba agua a la ciudad, acondicionó el palacio episcopal, construyó fuentes públicas y otras obras de urbanización pública. La magnitud de su obra lo ha convertido en la figura central de la historia puzzeolana del siglo XVII. Muestra evidente de ello es el que a finales de 1650, cuando Martín de León ya había sido trasladado de diócesis, la ciudad de Pozzuoli le erigiera un monumento que todavía se conserva.

Además de su obra como pastor, cabe destacar su labor política y su amistad con varios de los virreyes de la época, especialmente con Manuel de Guzmán Zúñiga y Fonseca, conde de Monterrey (1631-1637), y con Juan Alfonso Enríquez, almirante de Castilla (1644-1646). Influyó notablemente en el gobierno del virreinato, y por ello fue nombrado consejero real y miembro del Consejo de Estado de Nápoles, también conocido como Consejo Colateral “de capa corta”. Fidelísimo a la Monarquía española y a la Iglesia, trabajo siempre para unir los criterios de la Corte española y la sede romana. Los virreyes se sirvieron de él para facilitar las relaciones entre Roma y Nápoles, en las que actuó Martín de León como punto de enlace con los diversos nuncios en Nápoles y, durante el pontificado de Urbano VIII (1643), con el cardenal nepote, Francisco Barberini, con el que se carteó frecuentemente.

Excepcional fue la posición adoptada por Martín de León durante la sublevación napolitana de 1647-1648, la conocida como “revuelta de Masaniello”. Nombrado por Juan José de Austria gobernador de la ciudad y vicario para la administración de la guerra, supo mantenerla para la Monarquía, y rechazó los diversos ataques que le infligieron los rebeldes, y el acoso de la armada francesa que les apoyaba. Felipe IV le felicitó personalmente por carta fechada el 24 de julio de 1648, y tanto Juan José de Austria como el virrey conde de Oñate suplicaron al Monarca que solicitara para Martín de León el capelo cardenalicio.

La recompensa no fue el cardenalato, pero se le ofreció primero el traslado a la diócesis de Catania y después a la española de Zamora, pero ambas fueron rechazadas por Martín de León, que se sentía muy unido a Pozzuoli. Finalmente aceptó el Arzobispado de Palermo, para el que fue presentado el 14 de enero de 1650 y nombrado por Inocencio X el 22 de agosto de ese año. Antes incluso de que le llegara la bula papal de nombramiento, Martín de León se trasladó a Sicilia, cumpliendo las órdenes que, en nombre de Felipe IV, le transmitió Juan José de Austria. Se embarcó en Nápoles el 4 de junio y desembarcó en Palermo tres días después. Tomó posesión de la archidiócesis el 31 de agosto y el 16 de octubre hacía su entrada solemne en Palermo. Reunido el Parlamento de Sicilia en junio de 1651, le correspondió presidir el brazo eclesiástico y participar en el mismo, pues al título arzobispal iba unido el antiguo de gran canciller del reino y, poco después, el 10 de julio, por muerte de Antonio Ronquillo, que presidía el virreinato por nombramiento de Felipe IV, recaía en Martín de León el gobierno de Sicilia con el título de presidente y capitán general del reino de Sicilia, cargo en el que se mantuvo hasta la llegada del nuevo virrey, Rodrigo de Mendoza y Sandoval, duque del Infantado, el 28 de diciembre de 1651.

La relación con el duque del Infantado fue de extrema tensión, y en algunas ocasiones llegaron a tener que recurrir ambas partes a la Corte madrileña.

Como arzobispo y pastor, sin embargo, dejó también en Palermo un grato recuerdo, tanto por sus disposiciones eclesiásticas de promoción y formación del clero y de asistencia a los necesitados, como por sus obras de renovación y embellecimiento de la catedral, de la que estucó sus paredes y amplió las ventanas de la nave central; del palacio episcopal y de la plaza que se encuentra entre ellos, en la que instaló ocho estatuas de santos palermitanos esculpidos por los maestros Carlo D’Aprile y Gaspare Guercio. Todavía se conserva, considerada como una obra notable, el tabernáculo para la capilla del Santísimo Sacramento, de cuatro metros y medio de alto y dos y cuarto de ancho, financiado por Martín de León y diseñado por Cosimo Fonzago en lapislázuli, pórfido y bronce dorado.

Realizó la visita pastoral en 1652 y ese mismo año convocó Sínodo Diocesano, que se celebró en junio y julio de ese año, y se imprimieron las constituciones sinodales en Palermo en 1653.

Tanto durante su gobierno siciliano como durante el resto de su permanencia en Palermo, continuó su servicio en favor de la Monarquía y de la Santa Sede, en el que destacaron las gestiones realizadas para abastecer de trigo la anona pontificia y remediar la carestía que sufría el Estado pontificio.

Al final de sus días le cupo la alegría de ver sustituido en el virreinato de Sicilia al duque del Infantado por Juan Téllez de Girón, duque de Osuna, que se hizo cargo del gobierno el 11 de noviembre de 1655.

Pero poco pudo disfrutar del cambio, pues, inesperadamente, después de una fiesta celebrada en el palacio virreinal el 15 de noviembre en ocasión del cumpleaños del duque de Osuna, falleció en la madrugada del 16, probablemente por un ataque agudo de gota que desembocó en un episodio coronario o cerebral. Todos los cronistas de la época recogen el inmenso pesar que embargó a los palermitanos al conocer la noticia, y su sepelio y funerales se convirtieron en una inmensa manifestación de duelo. Sus restos fueron enterrados el 18 de noviembre de 1655, en un sepulcro, obra del artista Gaspare Guercio y hoy desaparecido, situado en la que actualmente se conoce como “capilla de las Reliquias” de la catedral de Palermo. Martín de León se constituye, con su vida y obra, en el más relevante de los obispos agustinos españoles que regentaron sedes italianas durante el siglo XVII, y se le considera modelo de obispo religioso, pastor y político.

 

Obras de ~: Relación de las exequias que el excmo. Sr. D. Juan de Mendoça y Luna, marqués de Montesclaros, Virrei del Piru, hizo en la muerte de la Reina Nuestra S. Doña Margarita, Lima, 1612 [1613]; Pro liminibus visitandis relatio D. Fr. Martini de Leon, et Cardenas, [...] Episcopi Puteolani, [...] anno MDCXXXV [...], 1635; Epitaphios que el Illmo. y Revermo. Señor Monseñor D. Fray Martín de León y Cárdenas, Obispo de Puzol, [...] ha puesto en la Iglesia Cathedral, que ha hecho a fundamentis en aquella Ciudad, por caerse la que havía [1635]; Pro Sacris Liminibus SS. Apostolorum visitandis relatio D. Fr.

Martini de Leon, et Cardenas, [...] Episcopi Puteolani, [...] anno MDCXL [...], 1640; Pro Sacris Liminibus SS. Apostolorum visitandis relatio, Romae, Francisum Monetam, 1646; Pro Sacris Liminibus SS. Apostolorum visitandis relatio, D. F. Martini de Leon, et Cardenas [...] Episcopi Puteolani, anno MDCXLIX, 1649; Constitutiones dioecesanae synodi [...] celebratae anno Domini MDCLII, Panormi, Petri Isola, 1653; Enarratio pastoralis officii, et status Ecclesiae, et Dioecesis Panormitana [...] pro visitatione liminum apostolorum [...] ad Beatiss. Pontif. Innoc. X missa et oblata [...], Panormi, Petri de Isola, 1653.

 

Bibl.: P. Elssius (OSA), Encomiasticon Augustinianum, Bruxelles, 1654, pág. 471; F. Rodríguez de Medina y Barillas, Oración Panegyrica funeral, en las honras del Ilustr. Revmo. y Exmo. Sr. D. Fr. Martín de León y Cárdenas, Obispo de Ugento y de Puzol, electo de Catania, y de Zamora, Arzobispo de Palermo, Assistente de su Santidad, Virrey, y Capitán General del Reyno de Sicilia, Málaga, 1657; G. Perdicaro, Panegirico XXX. Nell’essequie Dell’Illustrissimo, e Reverendisimo Fra Don Martino de Leon, e Cardines, Arcivescovo di Palermo, detto nel Duomo della medesima Città. 19 Decembre 1654, en Panegirici Sacri, Roma, 1665, págs. 457-473; F. Ughelli, Italia Sacra sive de episcopis italiae et insularum adjacentium, vols. I y VI, Venetiis, 1717-1720, cols. 269, 286-289; A. Mongitore, Siciliae Sacrae celeberrimi abbatis Netini D. Rocchi additiones et correctiones, Panormi, 1735, págs. 33-35; B. Attardi (OSA), Il monachismo in Sicilia discifrato dell’Ordine del P. S. Agostino, Palermo, Antonino Gramignani, 1741, págs. 117-118; G. Moroni Romano, Dizionario di erudizione storico-eclesiastica, vol. 55, Venezia, 1852, págs. 21 y 25; vol. 81, Venezia, 1856, pág. 80; V. Maturana (OSA), Historia general de los Ermitaños de San Agustín, vol. IV, Santiago de Chile, 1913, págs. 260- 262; A. Llordén (OSA), Biografía del P. Fray Martín de León y Cárdenas, religioso agustino y arzobispo de Palermo, Málaga, Diputación Provincial, 1947; “Biografía del Excmo. P. Fray Martín de León y Cárdenas Arzobispo de Palermo”, en Archivo Agustiniano (AA), 51 (1957), págs. 207-222, y 52 (1958), págs. 27-51 y 173-200; “Una nota erudita sobre el P. Fr. Martín de León y Cárdenas”, en AA, 52 (1958), págs. 387-388; A. Manrique (OSA), “León Martín de OSA”, en Q. Aldea Vaquero, T. Marín Martínez y J. Vives Gatell (dirs.), Diccionario de historia eclesiástica de España, vol. II, Madrid, Consejo Superior de Investigaciones Científicas, Instituto Enrique Flórez, 1972, pág. 1288; A. D’Ambrosio, Il Duomo di Pozzuoli. Storia e documenti inediti, Pozzuoli, 1973; “León, Martín de”, en Enciclopedia universal ilustrada europeo-americana, vol. 29, Madrid, Espasa Calpe, 1976, págs. 1680-1681; D. Ambrasi y A. D’Ambrosio, La Diocesi e i Vescovi di Pozzuoli. “Ecclesia sancti Proculi puteolani episcopatus” (= Puteoli Resurgentes 2), Napoli, 1990; A. Mauro, “Un documento inedito sul vescovo Martino de Leon y Cardenas”, en Proculus, 69 (1994), págs. 445-452; R. Annecchino, Storia di Pozzuoli e della zona Flegrea, Napoli, 1996; J. J. Vallejo Penedo (OSA), Fray Martín de León y Cárdenas, OSA. Obispo de Pozzuoli y Arzobispo de Palermo (1584-1655), Madrid, Revista Agustiniana, 2001.

 

Juan José Vallejo Penedo, OSA