Sempere Fernández de Mesa, Francisco. Messa. Albaida (Valencia), 1915 – Valencia, 1996. Pintor.
Desarrolló su trayectoria pictórica alejado de nuestra geografía, pero sin desligarse nunca por completo.
En su ciudad natal estudió pintura en una escuela de dibujo y después de la Guerra Civil continuó su formación con Segrelles. En 1956 se trasladó a Mollet del Vallés (Barcelona) para trabajar en una empresa como representante de sus productos. Desde 1959 residió en Barcelona, aunque pasó largas temporadas en Albaida.
Se inició en el campo de la pintura como seguidor de Segrelles, pero a raíz de sus contactos con Monjalés fue evolucionando hacia el impresionismo, expresionismo, cubismo hasta llegar a la abstracción en 1961.
Su entrada en este movimiento fue fruto de su amistad con el arquitecto catalán Luis Bonet Armengol, que pertenecía a un grupo de seguidores de Le Corbusier.
Luis Bonet empezó a interesarse por la obra de Messa. Le presentó a Alexandre Cirici Pellicer y a raíz de este contacto el autor va accediendo al conocimiento del arte abstracto y se decide a incorporar dicho lenguaje a su estética.
Sus primeras pinturas no figurativas se inician en 1961. Las composiciones de este período abordan una geometría cuadrangular que ordena toda la obra.
Estas producciones simulan ventanas a través de las cuales pasa la luz. El interés por la luz se debe posiblemente a reminiscencias del sorollismo valenciano.
Messa emplea la geometría como un pretexto para encuadrar la obra, pero sus preocupaciones principales se recrean más en la luz, los fenómenos de veladura y el tratamiento de la superficie brillante para conseguir representar todos aquellos efectos que la intensidad lumínica llega a producir.
Durante el mismo año de 1961, Messa asume el lenguaje de la materia en conexión con los ambientes de Barcelona y en especial bajo la influencia tan enérgica que Antoni Tàpies ejercería sobre esta generación de pintores. Las composiciones todavía recuerdan cierta geometría del período anterior. Messa trata de reproducir el aspecto que tienen las ruinas arqueológicas a vista de pájaro. El conjunto ofrece muchas calidades táctiles. En 1962 la materia se suaviza para dar paso a una especie de tachismo muy vigoroso. Posiblemente sea de los pocos artistas valencianos que ha trabajado en esta vertiente del informalismo. Las composiciones están formadas por manchas irregulares sobre fondos blancos. En 1962 —paralelamente a las obras anteriores— Messa inicia un proceso de reflexión en torno a su existencia. Fiel a la ideología del informalismo, sus preocupaciones se dirigen a contemplar con tristeza su obligado “ser en el mundo”.
A partir del año 1964 la problemática informalista cede paso definitivamente a obras de talante más figurativo que ya detectamos desde 1962. Se retoma la geometría pero al servicio de claras alusiones sexuales.
Sin embargo Messa adapta soluciones matéricas anteriores y elabora mixturas de serrín, yeso, cola y polvo de escombros hasta conseguir espesores que profundizan la obra por planos consecutivos. Son obras todavía ambiguas, donde la figuración se adivina entre los materiales extrapictóricos. Pero el camino está ya trazado y el lenguaje pop emergerá con decisión al año siguiente.
Obras de ~: Abstracción, 1961; Arqueología, 1962; Organum núm. 3, 1962; Home, 1962; Construcción. Artefacto absurdo, 1963.
Bibl.: VV. AA., Messa, Valencia, Diputación Provincial, 1984; VV. AA., Messa, Valencia, Ayuntamiento, 1996; P. Patuel Chust, Informalismo matérico en la Pintura Valenciana, Castellón, Diputación Provincial de Castellón, Col·lecció Universitària, Geografia i Història, 1997; VV. AA., Messa 1945-1996. Exposició retrospectiva: ¿instants abans de la seva destrucció...?, Tarragona, Ayuntamiento y Diputación Provincial, 2000.
Pascual Patuel Chust
