Aprendiz en el taller imaginero de Vicente Gerique, ingresó (1926) en la Escuela de San Carlos de Valencia. Activista de la Fundación Universitaria Española (FUE), entabló amistad con Antonio y Manuela Ballester, José Re­nau, Francisco Badía y Francisco Carreño. En 1927 se le concedió la Pensión de Escultura del Estado, viajando a Madrid, donde conocería a Alberto Sánchez, de quien recibió un intenso magisterio. En sus primeras esculturas –Autorretrato (1927-1928), Mariposa (1928), Ciego callejero (1928), Bailarina (1928)–, se aprecia ya su permanente interés por el diálogo entre la masa y el vacío, el hueco y el volumen. Expuso colectivamente (1931) en la Agrupación Valencianista Republicana, en “Arte de Vanguardia” (Sala Blava –donde expondría individualmente–), y en “Arte Novecentista” (Ateneo Mercantil de Valencia). Obtuvo la Pensión de Escultura de la Diputación de Valencia para la ampliación de estudios en Madrid (1934), donde trabajaría en las Misiones Pedagógicas, a la vez que fue miembro de la Unión de Escritores y Aristas Proletarios (UEAP) y de la Asociación de Escritores y Artistas Revolucionarios (AEAR). De regreso a Valencia, con su escultura Desnudo Femenino obtuvo una prórroga de su pensión por un año en el extranjero. En 1935 fue cofundador, encargado de maquetación y miembro del Consejo de Redacción de la revista Nueva Cultura (de la que sería corresponsal en París), aportando gran cantidad de dibujos. Viajó a Bruselas con motivo de la Exposición Universal. De este período es su escultura El martillo neumático. Retornó a Valencia (1936), incorporándose como profesor de dibujo en el Instituto de Enseñanza Media de Alzira, e impartiendo clases (1937) en el Instituto Obrero de Valencia. Envió dos esculturas al Pabellón de la República Española (París, 1937). Colaboró como dibujante en el libro Canciones de lucha, de Carlos Palacio. Maquetó el libro El hombre acecha, de Miguel Hernández. Preso en la Cárcel Modelo de Valencia (1939) crearía con otros artistas un taller de Artes Plásticas. En 1942 trabajó como ceramista y escultor de imágenes religiosas. Participó en las exposiciones IV y V del Grupo Z (1948). Representó a Valencia en la Primera Bienal de Arte Hispano-Americano de Madrid (1951), año en que recibiría Mención de Honor en la Primera –y medalla en la Segunda- Exposición Bienal de Arte del Reino de Valencia. Catedrático de Dibujo (1955) en el Instituto José de Ribera de Xàtiva –del que sería director–, años después sería Vicedirector del Instituto San Vicente Ferrer de Valencia. Tras haberle sido otorgada la Tercera Medalla de Pintura en el IX Salón de Marzo de Valencia, expuso individualmente en la Galería Nike de Valencia (1979 y 1980), y finalmente (1981) en Torrent (Valencia). El IVAM custodia en la actualidad el legado de un valioso conjunto de sus esculturas, dibujos y pinturas. [...]