Flores Ruiz, María de los Dolores. Lola Flores, Lola de España, La Faraona. Jerez de la Frontera (Cádiz), 21.I.1923 – Madrid, 16.V.1995. Cantante, bailaora y actriz.
Hija de Rosario Ruiz, una costurera hija de un vendedor ambulante, y de Pedro Flores, Perico el Comino, un tabernero que había fracasado en el mundo del toro. Lola Flores comenzó sus estudios en un colegio de monjas, pero pronto se sintió atraída por el cante y el baile. Desde temprana edad cantaba y bailaba flamenco en la taberna de El Pavo Real que regentaba su padre en el barrio de San Miguel, en Jerez de la Frontera, al tiempo que asistía a la academia del maestro Realito, donde memorizaba los pasos enseñados, para después adaptarlos a su propio estilo. La descubrió el bodeguero Manuel Becerra en una fiesta que se celebró en su casa, bautizándola artísticamente con el nombre de “Lolita de Jerez”, y se acompañaba por el guitarrista jerezano Sebastián Núñez.
Debutó profesionalmente con quince años en el teatro Villamarta de Jerez de la Frontera en el espectáculo “Luces de España”, que encabezaba la pareja de baile formada por Rafael Ortega y Custodia Marchena. El guitarrista Melchor de Marchena la acompañaba en el espectáculo, mientras Lola Flores canta Bautizá con manzanilla. Fue entonces cuando Lola Flores se presentó en el camerino de Manolo Caracol, quien le dio la oportunidad de que le acompañara en la gira, no permitiéndolo, sin embargo, su padre, por lo que continuó cantando por pueblos cercanos a Jerez.
Por estos años, el director de cine Fernando Mignoni buscaba una gitanilla para su película Martingala, que se estrenaría en 1940. Lola le recitó Morena Clara y la contrataron, pagándole 8.000 pesetas en su primera actuación cinematográfica. Entonces Pedro Flores lo vendió todo y la familia se trasladó a Madrid, donde conoció al maestro López Quiroga, que le gestiona un contrato con el director artístico Juan Carcellé para los cafés-cantante del norte de España. A pesar de que la gira norteña resultó un fracaso económico, Carcellé le proporcionó otra oportunidad como telonera en el teatro de la Zarzuela. Después, se le ofreció un papel en la película Un alto en el camino (1941) de Julián Torremocha. El 6 de junio de 1942 se estrenó en el teatro Fontalba un espectáculo titulado Cabalgata, de Quintero, León y Quiroga, que dirigía Dionisio Caro, en el que Lola Flores era una secundaria, siendo protagonizado por Mary Paz. Consiguió darse a conocer en la función de gala a beneficio de la Asociación de la Prensa, cantando El Lerele, una canción que parecía de relleno en su gira norteña. Inmediatamente, grabó su primer disco, que contenía El pescaero, El Lerele, Bautizá con manzanilla y las sevillanas Me casé con un enano, Tengo un canario y La tiré al pozo. Al año siguiente, el empresario Adolfo Arezana le financió el espectáculo Zambra, compartiendo cartel con Manolo Caracol. La pareja formó compañía a partir de 1944, manteniéndose varias temporadas seguidas con este espectáculo, con tanto éxito de público y crítica que, en 1946, Carlos Serrano de Osma les ofreció protagonizar Embrujo, quizás la película más representativa de Lola Flores, y un tanto autobiográfica, donde consiguió aflorar su arte, sobre todo en los números musicales. Tras ocho años de unión artística, la pareja que llevó el flamenco a los teatros, rompe su relación artística en 1951, después de representar el espectáculo La maravilla errante y participar en la película Jack el Negro, que fue la primera coproducción que se realizó en España.
La artista emprendió una ovacionada trayectoria en solitario, que la erigía en la estrella folclórica más destacada a lo largo de las décadas de 1950 y 1960.
Como otras figuras de la copla, interpretó en estos años canciones compuestas por Quiroga, del que estrenó La Zarzamora, La ventolera, La niña de la venta, La niña de fuego y La Salvaora, y hace popular una serie de canciones con letra y música del original trío Quintero, León y Quiroga, como Cautiva de amores o ¡Dolores, ay mi Dolores!, las bulerías y coplas del Kikirikí, pero en especial el pasodoble de tono desgarrado y tradicional de La Zarzamora. Canciones que formarían parte de una discografía con más cincuenta títulos en los que interpretó rumbas, rancheras, coplas, números flamencos, etc. Destaca en estas décadas un disco que graba con el acompañamiento del maestro Torroba cuyo título es Ecos de España. En la contraportada de este disco reza Reina de la canción popular española, y en él se encuentran temas como Soy morena clara de Sanz-Zagra, Échale guindas al pavo de Perelló, Mostazo y Cantabrana, y ¡Ay España! España mía, pasodoble de Quintero, León y Quiroga, El Lerele de Montreal, y por último, El gran César, pasodoble de Gómez.
Aunque su cante era ligero, pues se quedaba en los estilos más livianos como los tanguillos, las sevillanas, las zambras, las rumbas, destacando sobre todo en la copla andaluza, desarrolló un estilo temperamental y de gran personalidad, al margen de tendencias y de escuelas. Será recordada por su particular personalidad, que la llevó a triunfar en los teatros, siendo célebres numerosos espectáculos, entre los que destacan títulos como La copla morena, Luna guitarra, La guapa de Cádiz, La copla ha vuelto, Candela y La Lola de ayer, de hoy y de siempre, y ello motivó su participación en el séptimo arte, sobresaliendo entre las estrellas del cine folclórico español, por lo que fue contratada en exclusiva por Cesáreo González, empresario- productor de Suevia Films, productora cinematográfica de las más importantes de este período.
Intervino primero en la película La niña de la Venta, obteniendo nuevos triunfos, sobre todo al cantar las bulerías, para después protagonizar títulos rescatados de antiguas películas de éxito, como Morena clara o María de la O. Y, a mediados de la década de 1950 amplía su campo de actividades profesionales a países latinoamericanos —Argentina, Cuba o México—.
En el país azteca alternó sus actuaciones en diversas salas con el rodaje de Pena, penita, junto a Luis Aguilar, y con Miguel Aceves Mejía trabajó en la película La gitana y el charro, mientras que con Agustín Lara protagonizó Los tres amores de Lola/Lola Torbellino y La Faraona, apodo por el cual sería conocida a partir de entonces. Al mismo tiempo, el 9 de abril de 1955, en el teatro Cervantes de Sevilla obtuvo un rotundo éxito con Copla y Bandera. Dos años después se casó con el cantaor y guitarrista Antonio González Batista, El Pescaílla, tras rodar dos películas y presentar su espectáculo Luna y guitarra en el teatro Calderón de Madrid, el mismo con el que continuó al año siguiente, año en el que interpretó otras dos películas y nació su primogénita Lolita, a la que seguirían Antonio, en 1961, y Rosario, en 1963.
Comenzada la década de 1960 actuó en el Olympia de París y comenzó en el teatro Calderón otro espectáculo titulado La copla morena, para después volver a la gran pantalla con la película El balcón de la luna, junto a sus rivales folclóricas Carmen Sevilla y Paquita Rico.
En 1963, de manos del ministro de Trabajo José Solís, recibió el lazo de Isabel la Católica; ese año estrenó Espectáculo español en el Calderón y rodó la película De color moreno, última que produjo Cesáreo González, pues al año siguiente protagonizó las películas La gitana y el charco y Sinfonía española, que produjo Samuel Bronston.
Tras presentar en el Calderón uno de sus mejores espectáculos, La guapa de Cádiz, uno de los últimos del trío Quintero, León y Quiroga, recibió en 1967 la Medalla de Oro del Círculo de Bellas Artes, a la vez que obtenía el Premio a la Mejor Actriz del Sindicato Nacional del Espectáculo por su actuación en la película Una señora estupenda. Así continuó Lola Flores, que lo mismo bailaba y cantaba, que hacía la función de presentadora en galas o programas de televisión, llegando a encabezar más de treinta espectáculos, mientras que en su filmografía se contabilizan más de veinte películas, si bien en la década de 1970 su carrera artística disminuyó, dejando incluso el cine en 1973 para centrarse en el mundo del espectáculo, destacando en 1974 en el Monumental de Madrid con Ella, la de ayer, la de hoy, la de siempre, de León, Solano y Quiroga, y otra vez en el Calderón en 1977 con Candelas, que le montó Antonio Ruiz Soler, el Bailarín. Fue además la artista española más internacional de estas décadas, recordándose su actuación en el Madison Square Garden de Nueva York, en 1979, y una crítica que, tras el estreno, afirmaba “No sabe cantar, no sabe bailar, no se la pierdan”.
Esta infatigable mujer volvió al cine en 1983 con Juana la Loca...de vez en cuando y Truhanes, al tiempo que aumentaron sus intervenciones en televisión y apariciones en la prensa del corazón, cuyos ingresos le reclamó en 1989 el erario público, poco después del fallecimiento de su madre. A través de una entrevista que concedió a la revista Semana, a principios de la década de 1990, comunicó que padecía cáncer, siendo hospitalizada en varias ocasiones hasta que falleció en su casa de Madrid, el 16 de mayo de 1995. Resultó un último quinquenio plagado de homenajes en que el propio gobierno que la condenó fiscalmente reconoció toda su carrera artística con la Medalla de Oro al trabajo. Realizó su última intervención cinematográfica en la película de Carlos Saura, Sevillanas, donde en solitario derrochó el temperamento y el arte de siempre, por el que intelectuales como José María Pemán se habían inspirado para escribir los versos: “Torbellino de colores / no hay en el mundo una flor / que el viento mueva mejor / que se mueve Lola Flores”.
Obras de ~: con T. Medina, Lola, en carne viva, memorias de Lola Flores, Madrid, Temas de Hoy, 1990 (col. Mujeres de hoy, n.º 19).
Filmografía: J. Gyenes (dir.), Lola Flores, 1940; F. Mignoni (dir.), Martingala, 1940; J. Torremocha (dir.), Un alto en el camino, 1941; Cl. de la Torre (dir.), Misterio en la marisma, 1943; J. Rey, Alegrías, 1943 (cortometraje); M. Pereyra (dir.), Una herencia en París, 1945; C. Serrano de Osma (dir.), Embrujo, 1946; J. Duvivier (dir.), Jack el Negro, 1950; R. Torrado (dir.), La niña de la venta, 1951; R. Torrado (dir.), La estrella de Sierra Morena, 1952; E. Fernández (dir.), Reportaje, 1953; M. Morayta (dir.), Penita pena, 1953; L. Lucia (dir.), Morena Clara, 1954; F. Rey (dir.), La danza de los deseos, 1954; L. Lucia (dir.), La hermana Alegrías, 1954; R. Cardona (dir.), Los tres amores de Lola, 1955; M. Morayta (dir.), Tú y las nubes, 1955; R. Cardona (dir.), La Faraona, 1955; M. Zacarías (dir.), El gran espectáculo, 1956; M. Zacarías (dir.), Sueños de oro, 1956; R. Torrado (dir.), María de la O, 1957; A. Momplet (dir.), Las de Caín, 1957; E. Cahen Salaberry (dir.), Venta de Vargas, 1958; F. Cortés (dir.), Échame la culpa, 1958; L. Saslavsky (dir.), El balcón de la luna, 1962; G. Martínez Solares (dir.), De color moreno, 1963; G. Martínez Solares (dir.), La gitana y el charro, 1963; J. Prades (dir.), Sinfonía española, 1964; E. Martín (dir.), Una señora estupenda, 1967; D. Tinayre (dir.), Kuma Ching, 1968; J. L. Sáenz de Heredia y M. Ozores (dirs.), El taxi de los conflictos, 1969; R. Fernández (dir.), Casa Flora, 1972; J. García de Dueñas (dir.), El asesino no está solo, 1973; M. Hermoso (dir.), Truhanes, 1983; J. R. Larraz (dir.), Juana la loca... de vez en cuando, 1983; V. Barrera (dir.), Los invitados, 1986; C. Saura (dir.), Sevillanas, 1992; E. Guevara (dir. y guión), Lola Flores: el último mito, Barcelona, Egten Producciones, 1995.
Discografía: ¡Olé! Lola Flores, el encanto de España, Madrid, Telefunken, 1958; Lola Flores y Antonio González, Barcelona- Madrid, Belter, 1967; Éxitos de Lola Flores, Barcelona, Belter, 1973; Mano a mano: Lola Flores y Juanita Reina, Barcelona, Belter, 1973; Los grandes éxitos de Lola Flores, Barcelona, Ediciones Fonográficas, 1974; con J. Reina y P. Rico, Estrellas de la canción española, Barcelona, Ediciones Fonográficas, 1975; Lola Flores, mis canciones de oro, Barcelona, Belter, 1975; La fabulosa Lola Flores, Madrid, Palobal, 1975; Rumbas y bulerías, Barcelona, Flyson, 1975; Pena, penita, pena, Barcelona, Belter, 1976; La voz de Lola Flores, Barcelona, EMI-Odeón, 1977; Los cantares de Lola Flores, Barcelona, Belter, 1978; Lo mejor de Lola Flores, Barcelona, Ediciones Fonográficas, 1979; Éxitos de Lola Flores, Barcelona, Galax Records, 1979; Lola Flores y Juanito Valderrama, Barcelona, Discophon, 1979; Diferente Lola, Madrid, CBS, 1980; Lola Flores, Barcelona, DCD, 1985; Lola Flores, sus grandes éxitos, Barcelona, Divucsa, 1987; Lola de España, Madrid, Dial Discos, 1988; Lola Flores, 20 éxitos de oro, Barcelona, Divucsa, 1990; Lo mejor de Antoñita Moreno y Lola Flores, Madrid, Ediciones del Prado, 1990; La inimitable Lola Flores, Barcelona, Divucsa, 1991; El temperamento de Lola Flores, Barcelona, Divucsa, 1991; Lola Flores, sus canciones más populares, Madrid, EMI-Odeón, 1991; Con sabor a Lolas, Madrid, Sony Music, 1992; Sabor a Lola Flores, Barcelona, Divucsa, 1993; Lola Flores, todos sus éxitos, Barcelona, Divucsa, 1994; La zarzamora, Madrid, EMI-Odeón, 1994; Para siempre Lola, Madrid, Sony Music, 1994; Raíces de la canción española, vols. 15, 30 y 39, Sevilla, Efen Records, 1994-1997; Lola Flores: homenaje, Madrid, Serdisco, 1995; Eternamente Lola, Barcelona, Divucsa, 1995; Villancicos para la Nochebuena, Barcelona, Divucsa, 1995; Manolo Caracol y Lola Flores en el cine, Madrid, EMI-Odeón, 1996; Los éxitos de Lola Flores, Barcelona, Knife Music, 1999; Lola Flores: versiones originales, Barcelona, Creativos Independientes, 2001.
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Carmen Rodríguez Fuentes