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Simón de Berrieza

Biografía

Berrieza, Simón de. Berrieza (Cantabria), c. 1545 – Burgos, 1614. Ensamblador y arquitecto.

Berrieza pudo formarse en Burgos, tal vez en el obrador de su paisano Simón de Bueras que dirigía el taller de ensamblaje de la catedral burgalesa, aunque muy pronto empezó a colaborar con Rodrigo de la Haya que dirigía el taller de escultura de la catedral. La obra de Simón de Berrieza como retablista comenzó el 15 de enero de 1573 al contratar el retablo de la iglesia de San Salvador de Peñafiel (Valladolid), junto con el escultor Rodrigo de la Haya. En los años siguientes realizó retablos o tabernáculos para diversos pueblos burgaleses: un retablo para una ermita de Royuela de Riofranco (1575); un retablo mayor monumental para Palazuelos de Muñó (1576) en colaboración con Martín Ruiz de Zubiate; otro retablo mayor en Cubillo del Campo por cesión de Ruiz de Zubiate y Antonio de Elejalde; el retablo mayor de Cabia (1581), que había comenzado Hernando Rodríguez de Riaño; un retablo lateral en Sasamón (1583) con el ensamblador Miguel de Quevedo y el escultor toledano Pedro de Porres; otro retablo lateral en Pedrosa del Páramo (1586) con la colaboración del escultor Domingo de Bérriz.

Una de las colaboraciones más interesantes es la que vincula a Berrieza con los italianos Ángelo Bagut, Bartolomé Carlone, Baltasar Corono y Giulio Sormano. Juntos contrataron, el 11 de marzo de 1577, la realización de una capilla funeraria, arco, altar y retablo en el lado del Evangelio de la capilla mayor del monasterio de San Francisco de Burgos.

Un acontecimiento luctuoso truncó su carrera en 1588: en una riña causó heridas de muerte al pintor Lorenzo de Puga. Berrieza fue condenado a muerte en rebeldía y huyó a Arcos de la Frontera (Cádiz) mientras su esposa negociaba el perdón con la familia de la víctima mediante una compensación de mil doscientos ducados. De regreso en Burgos, Berrieza realizó el retablo mayor de Villorejo (Burgos), en 1609, y un retablo en una capilla del monasterio de San Ildefonso de Burgos que contrató, junto con el escultor sevillano Francisco de Villegas, en febrero de 1612. Todos sus retablos responden a los planteamientos del romanismo. Él personalmente se encargaba del ensamblaje y es probable que realizara la talla de la arquitectura, pero para la escultura de bulto y los relieves figurativos se asoció a lo largo de su vida con distintos imagineros: Rodrigo y Martín de la Haya, Domingo de Bérriz, García de Arredondo, Pedro de Torres, Domingo de Iriarte y Francisco de Villegas. Estos escultores marcan las diferencias entre las diversas obras que contrató.

Además de las obras de ensamblaje y talla de retablos que fueron su actividad principal, realizó algunos trabajos propios de canteros. En 1579 se presentó al remate del sobreclaustro y escaleras del monasterio de Santa María la Real de Nájera (La Rioja). En el mismo año pretendió tomar, junto con el cantero montañés Pedro Vélez de Herrada, la obra de la capilla de los Reyes en el monasterio de la Merced de Burgos. En 1584 firmó un contrato de compañía con Domingo de Hazas, maestro de cantería, para pujar por la obra del puente de Santa María en Burgos. En 1605 firmó una traza para la portada de la Casa de la Moneda de Burgos; en 1607 presentó traza y diseño para construir una nueva sacristía en la capilla de Santiago de la catedral burgalesa; en 1608 trabajó en la sacristía y tejados del convento de San Francisco en Santo Domingo de la Calzada (La Rioja); y en 1613 hizo traza y comenzó las obras del trascoro de la catedral de Burgos, aunque poco después se siguió un proyecto de Juan de Naveda.

 

Obras de ~: Retablo, iglesia de San Salvador de Peñafiel (Valladolid), 1573; Retablo, ermita de Royuela de Riofranco (Burgos), 1575; Retablo mayor, Palazuelos de Muñó (Burgos), 1576; Capilla funeraria, arco, altar y retablo en el lado del Evangelio de la capilla mayor, monasterio de San Francisco de Burgos, 1577; Remate del sobreclaustro y escaleras, monasterio de Santa María la Real de Nájera (La Rioja), 1579; Capilla de los Reyes, monasterio de la Merced de Burgos, 1579; Retablo mayor, Cabia (Burgos), 1581; Retablo lateral, Sasamón (Burgos), 1583; Retablo lateral, Pedrosa del Páramo (Burgos), 1586; Portada de la Casa de la Moneda, Burgos, 1607; Sacristía y tejados, convento de San Francisco en Santo Domingo de la Calzada (La Rioja), 1608; Retablo mayor, Villorejo (Burgos), 1609; Retablo en una capilla, monasterio de San Ildefonso de Burgos, 1612.

 

Bibl.: M. Martínez Burgos, En torno a la catedral de Burgos. El coro y sus andanzas, Burgos, Aldecoa, 1956, págs. 112113; E. Valdivieso, Catálogo Monumental de la Provincia de Valladolid. Antiguo partido judicial de Peñafiel, Valladolid, Diputación Provincial, 1975, págs. 155163; A. A. Barrón García, “Fantasía y clasicismo. Debate sobre un retablo para el monasterio de la Merced de Burgos”, en Actas del X Congreso del Comité Español de Historia del Arte (CEHA). Los Clasicismos en el Arte Español, Madrid, UNED, 1994, pág. 211; A. A. Barrón García, “Los escultores Rodrigo y Martín de la Haya”, en Boletín del Museo e Instituto Camón Aznar, LXVI (1996), págs. 5-66; “El ensamblador Simón de Berrieza, 1573-1612”, en Boletín del Museo e Instituto Camón Aznar, LXXIV (1998), págs. 33-83; “El retablo de Santa Clara de Briviesca en el romanismo norteño”, en Boletín del Museo e Instituto Camón Aznar, LXXVIII-LXXIX (1999), pág. 263; A. C. Ibáñez Pérez, “Arquitectura, escultura, pintura y artes menores del siglo xvi”, en Historia de Burgos. III. Edad Moderna, Burgos, Caja de Burgos, 1999, págs. 126-127; J. Matesanz, Actividad artística en la catedral de Burgos, Burgos, Caja de Burgos, 2001, págs. 164-165, 173, 406 y 412.

 

Aurelio A. Barrón García