García del Castillo, Juan Antonio. Valencia, 18.X.1862 – 31.I.1937. Fotógrafo y miniaturista.
Estudió Bellas Artes en la Escuela Superior de San Carlos de Valencia, donde tuvo como condiscípulo a Joaquín Sorolla. Esta circunstancia fue el origen de una especial relación de amistad que se convirtió en familiar con el paso de los años, al casarse su hermana Clotilde con Sorolla.
Juan Antonio García aprendió la técnica fotográfica con su padre, el afamado retratista Antonio García Peris.
En 1882 tuvo que hacerse cargo del gabinete de su padre en ausencia de éste y realizó su primer trabajo importante, consistente en retratar un caso de osteosarcoma por encargo de los médicos del Hospital General de Valencia y con destino a su archivo de enfermedades raras.
A comienzos de 1884 fue enviado por su padre a aprender en los más importantes estudios fotográficos de Alemania, Inglaterra y Francia, regresando a Valencia en el mes de julio de 1886.
En 1887, Juan Antonio García puso en práctica en el gabinete de su padre la técnica de la platinotipia, del carbón y de la porcelana, que había aprendido en Inglaterra, alcanzando notable éxito; si bien, ante la ausencia de firmas individuales no se pueden diferenciar los retratos hechos por Antonio García de los realizados por su hijo Juan Antonio. No obstante, lo que sí debe considerarse es que los retratos realizados en el gabinete de Antonio García que correspondan al período 1886-1900 deberán ser atribuidos no solamente al padre como hasta ahora, sino también a su hijo Juan Antonio García del Castillo, quien estaba al frente del laboratorio.
Entre 1891 y 1900, Juan Antonio García realizó diferentes viajes anuales de perfeccionamiento técnico a Francia, Bélgica e Inglaterra para ponerse al corriente de las últimas novedades técnicas. En esa época, según se especifica en el testamento otorgado por Antonio García el 21 de julio de 1914, Juan Antonio era el empleado principal del gabinete de su padre y disfrutaba del 30 por ciento de los beneficios en su calidad de socio.
En 1900, Juan Antonio García se independizó, abandonó el gabinete de su padre y se trasladó a Madrid para ejercer la profesión de miniaturista y especialista en la técnica del esmalte.
En la Exposición Nacional de Bellas Artes celebrada en 1901, Joaquín Sorolla fue galardonado con la medalla de honor por el cuadro titulado Triste herencia. En ese certamen se dio la feliz casualidad de que su cuñado Juan Antonio García del Castillo obtuvo medalla de primera clase en la sección Arte Decorativo, precisamente por sus “esmaltes miniatura retratos coloreados”, según consta en el acta, extremo éste que hasta ahora ha pasado inadvertido para los diferentes expertos que han escrito sobre las Exposiciones Nacionales de Bellas Artes.
Bibl.: J. R. Cancer Matinero, Retratistas fotógrafos en Valencia (1840-1900), Valencia, Diputación, 2006.
José Ramón Cancer Matinero
