Zubiaurre Aguirrezábal, Ramón de. Garay (Vizcaya), 1.IX.1882 – Madrid, 9.VI.1969. Pintor.
Hermano menor de Valentín Zubiaurre Aguirrezábal, vivió los cuatro primeros años de su vida en Garay, localidad natal suya y de su padre, al cuidado de un ama de cría. Un accidente que sufrió en su infancia pudo haber sido la causa de su sordera; gracias a una enseñanza especial, aprendió a hablar, a pesar de lo cual perteneció a la Asociación de Sordomudos de Madrid, en la que llegó a ocupar el cargo de vicepresidente.
A los cuatro años de edad, pasó a vivir en Madrid con su familia. Desarrolló una temprana vocación por el dibujo, así como una notable afición por el teatro. En 1893 comenzó a asistir a la Escuela Central de Artes y Oficios de Madrid y tres años después ingresó en la Escuela Especial de Pintura, Escultura y Grabado, donde en la clase de Paisaje fue discípulo de Carlos de Haes y luego de Jaime Morera y Antonio Muñoz Degrain, que le influyó en mayor medida. También fueron profesores suyos Luis de Madrazo, Luis Álvarez Catalá, Luis Menéndez Pidal, Dióscoro Teófilo de la Puebla y José Moreno Carbonero. Entre todas las asignaturas destacó en la de Paisaje, en la que obtuvo accésits en 1898, 1899 y 1902, y medalla en 1900. Ello orientó hacia ese género su primera producción. Así, en 1899 concurrió a la Exposición Nacional de Bellas Artes de Madrid con las obras Puesta de sol en Garay (Vizcaya), Paisaje de Mañaria (Vizcaya) y Paisaje de Garay, y dos años después lo hizo con seis paisajes vascos.
En 1903 obtuvo una pensión de la Diputación de Vizcaya por tres años para el estudio de la pintura en Madrid. Sus envíos del tercer año de pensionado obtuvieron la calificación de mención honorífica. En la Exposición Nacional de Bellas Artes de 1904 presentó su Autorretrato, dos retratos más dos paisajes y dos cuadros de motivos marineros, Observando el regreso de los pescadores y Esperando la barca (éste de grandes dimensiones) con los que el artista iniciaba una dedicación continuada a los asuntos de costumbres, en los que sobresalió en seguida.
Durante los veranos pintaba en Vizcaya, donde solía estar en Garay y en Ondárroa y en Guipúzcoa, donde acudía a Fuenterrabía, pero también recorrió las provincias castellanas de Segovia, Ávila, Salamanca y Toledo. Como su hermano Valentín, se inspiraba así en las nuevas ideas que defendían el espíritu del 98 y que se difundían en la tertulia del Nuevo Café de Levante de Madrid, a la que acudían, entre otros, Ramón María del Valle-Inclán, Anselmo Miguel Nieto, Ignacio Zuloaga, Julio Romero de Torres, Ricardo Baroja, José Gutiérrez Solana.
En 1905, con su hermano Valentín y con su madre, viajó a París, donde estudió en la Académie Julian. Desde París hicieron ambos artistas sus envíos a la Exposición Nacional de Bellas Artes de Madrid de 1906 que, en el caso de Ramón, se limitaron a la obra Amor y Juventud. Con su padre visitaron luego distintos países europeos, entre ellos Italia y Austria.
En 1910 ilustró Las inquietudes de Shanti Andía, novela de Pío Baroja. Participó en la Exposición Nacional de Bellas Artes de ese año con la obra Las Autoridades de mi aldea. Su pintura Pícaros y mendigos participó en 1911 en la Exposición Internacional de Bellas Artes de Roma, donde fue adquirida por el Estado italiano con destino a la Galería Nacional de Arte Moderno de Roma. Al año siguiente, concurrió a la Exposición Internacional de Arte Contemporáneo que se celebró en Ámsterdam con la obra El amo de la casa, que regaló al Ayuntamiento de dicha ciudad (Stedelijk Museum). En estas obras aparecían ya los rasgos de estilo que serían característicos de su obra. Las composiciones, ordenadas con claridad algo arcaizante, a menudo en forma de friso, muestran figuras monumentales, de tipos campesinos o marineros de fuerte carácter racial. Esos tipos suelen ser vascos, pero también holandeses, por ejemplo, los marineros de Volendam, localidad en la que pintó en 1912. Aparecen casi siempre en actitudes estáticas y sus perfiles, bien marcados por el dibujo de contorno, se recortan sobre paisajes o interiores tratados con minucioso detallismo y tonos brillantes y atrevidos, con calidades de esmalte o de vidriera, que destacan sobre los blancos, ligeramente azulados. En el artista era importante la influencia de los pintores de los siglos XV y XVI, entre ellos El Greco, pero los interpretaba en relación con los ideales estéticos defendidos por la generación del 98.
Después de su estancia en Holanda en 1912-1913, expuso varios de los cuadros allí pintados en la XXII exposición de la Société des Peintres Orientalistes Français, celebrada en París en 1914. En ese año, con su hermano Valentín, expuso en el Rotterdamsche Kunstkring. Al año siguiente su obra Los remeros vencedores de Ondárroa (París, Musée d’Art Moderne) figuró en la Exposición Nacional de Bellas Artes de 1915. Con su hermano Valentín, expuso en Bilbao en la Asociación de Artistas Vascos. Entre las dieciocho obras de Ramón, aparte de cuatro obras de motivo holandés, predominaban los temas vascos.
En 1917 se casó con Isolina Gallego Llausás, de su misma edad —había nacido en Guadalajara en 1882—, hija del ingeniero militar Lorenzo Gallego Carranza y de Rosa Llausás Recaséns, chilena. Persona culta, había sido modelo de Julio Romero de Torres, amigo de los Zubiaurre. Durante su luna de miel, que pasaron en Galicia, pintó el cuadro El gaitero de Cambados.
En 1918 fue nombrado miembro correspondiente de The Hispanic Society of America, institución que le haría miembro de número seis años después y que atesora varias pinturas suyas. Al año siguiente presentó en la Exposición Internacional de Bilbao de 1919 las obras Retrato del Ilmo. Sr. Obispo de Segovia, don Remigio de Gandásegui, y Viejos de Ondárroa. En 1920 participó en la Exposición Nacional de Bellas Artes de Madrid con La partida (Buenos Aires, Museo Nacional) y Las encajeras de Lagartera (El Escorial, Madrid, col. Enrich). Su preterición en la concesión de las primeras medallas por el Jurado, que dejó una desierta, fue muy denostada por críticos relevantes, como Juan de la Encina y Gil Fillol.
En el verano de 1920 Zubiaurre se embarcó con su mujer a la Argentina. Llevaba veinticuatro cuadros, la mayoría de tema vasco, para exponer en el Salón Witcomb de Buenos Aires. En la ciudad el artista recibió varios encargos, entre ellos el retrato de Victoria Ocampo, a quien pintó en dos ocasiones. Diversas instituciones, entre ellas el Museo Nacional, adquirieron obras del pintor, que fue invitado a realizar otra exposición en una sucursal de Witcomb en Rosario de Santa Fe, en cuyo Museo Municipal de Bellas Artes se halla la obra Shanti el atalayero, adquirida por el director de El Círculo. Ya en 1921 expuso cuadros propios con otros de su hermano Valentín, en Montevideo, en el salón Moretti, Catelli y Mazzuchelli. Allí hizo amistad con el poeta Zorrilla San Martín. Al término de la exposición volvió a Buenos Aires y de ahí, regresó a España.
En 1923, Pilar de Zubiaurre, casada con Ricardo Gutiérrez Abascal —el crítico “Juan de la Encina”— organizó una exposición de sus hermanos Valentín y Ramón en la galería Georges Petit de París. Ramón participó con trece obras. Meses más tarde, fue nombrado caballero de la Legión de Honor a instancias de Léonce Bénédite, reputado crítico de arte que había admirado su pintura y escrito sobre ella. En el mismo año, participó en la Exposición del Carnegie Institute de Pittsburgh con dieciocho obras.
Su envío a la Exposición Nacional de Bellas Artes de Madrid de 1924 Shanti Andía, el Temerario (Madrid, Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía) obtuvo una medalla de primera clase. Participó, con Valentín de Zubiaurre, Eugenio Hermoso y Anselmo Miguel Nieto en la exposición inaugural del Salón Vilches de Madrid. Ese mismo año expuso sus cuadros, con los de su hermano Valentín, en las Dudensing Galleries de Nueva York. Dos años después ambos expusieron en The Casson Galleries, en Boston. Entre las trece obras de Ramón estaban La carrera, Fiesta en Salamanca y Un hogar vasco.
En ese mismo año de 1926, el pintor con su esposa, con Miguel de Maeztu, el caricaturista Luis Bagaría y el pintor Ángel Cabanas Oteiza viajaron a Buenos Aires. Allí expuso en el Salón Witcomb treinta y un cuadros, siete de los cuales era una serie de Mujeres vascas. Pasó después a Santiago de Chile, donde expuso quince obras, todas de tema vasco, en el Palacio de Bellas Artes. Su exposición tuvo una excelente acogida tanto entre las instancias oficiales como entre la crítica. Se adquirió para el Museo de Bellas Artes de Santiago de Chile la obra La abuela y se le encargaron varios retratos, entre los cuales destaca el de Monseñor Crescente Errázuriz. Partió a Buenos Aires el 5 de noviembre de 1927 y de allí embarcó a España.
En 1928 participó con tres obras en la Exposición de arte español 1828-1928 celebrada en el Stedelijk Museum de Ámsterdam y en La Haya. Con su hermano Valentín celebró una nueva exposición en 1929 en Charlottenbourg (Dinamarca), en la que Ramón expuso diecisiete obras.
En 1930 realizó el retrato de su hermano Valentín y el suyo propio por encargo de The Hispanic Society. En ese mismo año viajó, con su esposa, a Perú. Expuso catorce obras en el Hotel Bolívar de Lima. Durante su estancia tuvo lugar un golpe de Estado. El nuevo Gobierno le encargó la efigie del célebre Inca Pachacutec, que realizó a partir de los rasgos quechuas de un inca contemporáneo. Con otras seis imágenes incas que había pintado el artista, se realizó en el Museo Arqueológico una exposición a la que asistió todo el Gobierno. De Perú se dirigieron a Chile, donde pasaron nueve meses, buena parte de ese tiempo invitados en la quinta que tenía Blanca Vergara de Errázuriz en Viña del Mar, en cuyos jardines pintó el artista. En mayo de 1931 expuso en Santiago de Chile en la fábrica de muebles finos de Luis Valdés Freire. Allí figuraron los retratos del propietario del local y de su mujer, junto a otros, como el de la Señora de Vilmorin, que el artista había realizado recientemente y algunos más pintados en su anterior estancia en la ciudad. Pintó entonces para la iconoteca de la Sociedad Chilena de Historia y Geografía, el retrato del historiador José Toribio Medina.
En mayo de 1931 la Kunstforeningen (Asociación de Arte) de Oslo organizó una Exposición de Arte Español. En ella estuvo representado Ramón de Zubiaurre por la obra Jugando al julepe, que fue adquirida por la Galería Nacional de Oslo. Volvió el artista de América con su esposa en julio de 1931. Al año siguiente, los dos hermanos Zubiaurre realizaron una importante exposición individual en la Kunstforeningen de Oslo, con un catálogo cuyo prefacio escribió el destacado hispanista Magnus Gronvold. Ramón expuso veintitrés obras.
En 1933, el Museo Municipal de Buenos Aires le encargó un óleo con la casa de Juan de Garay, que en seguida realizó tras haberle sido aprobado el boceto. Durante la Guerra Civil española el artista estuvo en Madrid. En 1938 participó en la Exposición Internacional organizada por el Carnegie Institute de Pittsburg con el cuadro El carpintero. Dos años después viajó con su esposa a Montevideo, donde expuso en la Casa Caviglia dieciocho óleos y catorce acuarelas y dibujos. De allí se trasladó a Santiago de Chile, donde expuso en la casa Rivas y Eyzaguirre en 1940 y 1942. En estos años el artista realizó dibujos a lápiz muy fino coloreados a la acuarela en tonos suaves que tuvieron, por su delicadeza, fortuna entre el público. Recuerdan la estética simbolista de hacia 1900, impregnada de espiritualidad, pero con motivos costumbristas. También realizó, por encargo de una sociedad hindú, cuyas creencias compartía su esposa, algunas pinturas con tema budista.
El artista permaneció en Chile hasta 1951. En ese año, expuso dieciséis obras en la galería Fernando Fe de Madrid. Al año siguiente lo hizo en el Salón Alonso de Bilbao. Participó en la Exposición Nacional de Bellas Artes de 1952 con dos obras, Indios del Cuzco y Apoteosis de la pelota vasca. En ese mismo año realizó otra exposición de dieciocho obras en La Pinacoteca, en Barcelona. Dos años después lo hizo en el Salón de Arte de Vitoria.
Concurrió a la Exposición Nacional de Bellas Artes de 1957 con una obra, Antiguo Madrid. En 1958 realizó una exposición de pinturas recientes en la Sala Toisón de Madrid. Eran veintiuna obras entre las que se hallaba su Autorretrato con la paleta de pintor ante el lienzo.
En el prefacio al catálogo Rafael Zarco recordaba una visita a su estudio de la calle Lope de Vega y, en él, junto al artista, una copia de Holbein realizada en su juventud, una tabla primitiva española, acuarelas chinas sobre papel de arroz, finas cerámicas, barros populares. Todo ello traslucía las mismas preferencias estéticas que el artista tenía en las primeras décadas del siglo. También su pintura continuaba fiel a su trayectoria anterior, si bien en esos años su estilo se había hecho más decorativo y amable.
A la muerte de su hermano Valentín, acaecida en 1963, la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando le ofreció que heredase la medalla que, como miembro de número, había tenido su hermano, pero el artista rehusó el nombramiento. En ese año realizó una exposición de cuarenta obras en la Sala Quixote de Madrid. En 1964 participó en la exposición XXV años de Arte Español, que se celebró en el Palacio de Cristal del Retiro de Madrid.
En 1966 la Asociación Guerediaga de Amigos de la Merindad de Durango organizó en Garay, bajo el patrocinio de la Diputación de Vizcaya y el Ayuntamiento de aquella localidad, una exposición titulada El homenaje a los Zubiaurre, en la que figuraban siete obras de Ramón que, debido a su estado de salud, no pudo asistir.
Dos años después, realizó la que sería su última exposición en la Galería Quixote de Madrid, en la que expuso dieciséis obras.
Obras de ~: Iperkalea, 1906; Autoridades de mi aldea, 1910; La ofrenda, 1911; Los intelectuales de mi aldea, c. 1912-1913; Los remeros vencedores de Ondárroa, 1915; Vendedoras de manzanas, 1917; La partida, 1920; Victoria Ocampo con libro, c. 1920-1921; El marino vasco Shanti Andía, el Temerario, c. 1923; Juego de cartas, c. 1929; Autorretrato, 1930; Retrato de Valentín Zubiaurre, 1930.
Bibl.: M. Gronvold, Valentin og Ramon de Zubiaurre, Oslo, Sven Winger & Co., 1932; VV. AA., Los Zubiaurre, Valentín y Ramón, catálogo de exposición, Bilbao, Banco de Bilbao, 1978; T. Mochizuki, Ramón de Zubiaurre. El pintor y el hombre, pról. del marqués de Lozoya, Bilbao, Publicaciones de la Diputación Foral de Vizcaya, 1980.
Javier Barón Thaidigsmann
