Aguirre, Miguel de. Chuquisaca, Sucre (Bolivia), c. 1598 – Madrid, 12.XI.1664. Agustino (OSA), escritor.
Hijo de Miguel de Aguirre, contador del Tribunal de Cuentas, y María de Flores, estudia Gramática en el Colegio de San Martín de Lima, ingresando en la Orden de San Agustín en 1619.
Maestro de Filosofía, Teología, Sagrada Escritura y Derecho Canónico, fue elegido prior del convento de la Plata en 1637 y luego, en el mismo cargo, en los de Copacabana y Lima, donde además se desempeña como vicario provincial; asume luego las cátedras de Teología y Sagrada Escritura en la Universidad de San Marcos; calificador del Santo Oficio, desde 1641 es además confesor del virrey marqués de Mancera.
En abril de 1650 se dirige a Madrid, donde es requerido para miembro del tribunal de la Inquisición, eligiéndolo el nuncio apostólico, monseñor Gaetano, como su confesor; en 1655 le toca asistir al Capítulo General de su Orden en Roma, y se le nombra, cinco años después, visitador de las provincias de México y Perú, cargo al que renunció.
En 1644 había debido acompañar a Antonio Sebastián de Toledo, hijo del virrey, a la expedición repobladora de Valdivia, en el sur de Chile, donde funda el convento de su Orden, titulado de Nuestra Señora de Copacabana, en la isla de Mancera.
A su regreso al Perú publica su importante Población de Valdivia, estimada versión oficial de aquella empresa, con interesante información.
Habiendo sido atacado injustamente el marqués de Mancera, al final de su mandato, por Juan de Medina Ávila, el padre Aguirre estimó de justicia salir en su defensa, produciendo una contundente apología del virrey; un trabajo análogo le merecieron los ataques dirigidos contra Francisco de Ávila, canónigo de la iglesia metropolitana de Lima; ambos escritos resultan ser valiosos por los datos que arrojan sobre la actuación de ambos personajes.
Varias veces había sido propuesto para algún obispado en Indias, honor que rechazó con humildad.
Obras de ~: La Población de Valdivia, motivos y medios para aquella fundación, Defensas del Reyno del Perú, para resistir las invasiones enemigas en mar y tierra. Paces pedidas por los indios rebeldes de Chile, aceptadas y capituladas por el Gobernador, y estado que tienen hasta nueve de Abril del año de 1647, Lima, Casa de Julián Santos de Saldaña, 1647; Apologético en defensa del valeroso y prudente marqués de Mancera, s. l., c. 1651 (inéd.); Apologético en favor del Dr. Don Francisco de Ávila, s. l., c. 1652 (inéd.).
Bibl.: J. T. Medina, “Fray Miguel de Aguirre”, en Estudios sobre la literatura colonial de Chile, vol. I, Santiago de Chile, Fondo Histórico y Bibliográfico José Toribio Medina, págs. 335-340.
Gabriel Guarda Geywitz