Setién Flórez Huidobro, Antonio. Antonio de San Joaquín. Villadiego (Burgos) 1694 – Madrid, XII.1775. Carmelita descalzo (OCD), gran teresianista y escritor espiritual.
Hijo de Pedro, corregidor, y Josefa, hermano del famoso historiador Enrique Flórez, el conocido por el P. Flórez, agustino, autor de la España Sagrada.
No tuvo Antonio tantos estudios como su hermano en Barco de Ávila, Piedrahita, Salamanca, Valladolid, etc., Antonio fue educado “con mucho esmero y muy cristianamente”. Llamado a la vida religiosa del Carmen descalzo tomó el hábito el 23 de septiembre de 1722 en San Hermenegildo de Madrid, pasando enseguida a hacer el noviciado en San Pedro de Pastrana donde profesó al año siguiente: el 24 de septiembre de 1723. La profesión tuvo lugar entre diez y once de la mañana En el Acta de su profesión se consignan, como de costumbre, los datos del profesando “en el siglo don Antonio, hijo de don Pedro Setién de Flores y de doña Josepha Huydobro Velasco [...] Tiene de edad veinte y nueve años”. También otros detalles como los nombres del general de la Orden, del provincial, del prior, “en cuyas manos profesó”, del maestro de novicios “el padre fray Juan de Jesús”, de los testigos. La profesión hace el número 1959 del noviciado de Pastrana.
Terminados sus estudios eclesiásticos, fue profesor de Teología y de Sagrada Escritura en el Colegio de San Cirilo de Alcalá de Henares y rector del mismo centro carmelitano.
Admirador de Santa Teresa y gran estudioso de la vida y de la obra de la santa, escribió el Año Teresiano, en doce tomos, uno por cada mes del año. Bastará transcribir el título completo del tomo primero para darse cuenta de cómo será la obra Año Teresiano, Diario histórico, Panegírico moral, en que se descriven las virtudes, sucesos y maravillas de la Seraphica y mýstica Doctora de la Iglesia santa teresa de jesús, assignadas a todos los días de los meses en que sucedieron. Propónense con varia exornación de todo género de Letras divinas, y humanas, Historiales, Símbolos, Sentencias de Santos Padres, y Philósophos antiguos, dedícale al excelentísimo Señor Almirante Duque de Berbick, y Veragua, etc., su autor el padre fray antonio de san joach in, Carmelita descalzo, Lector de Teología en su Colegio de San Cyrrilo de Alcalá. con privilegio, en madrid, en la Imprenta de Manuel Fernández, Año de 1733.
Como se ve el autor aparece como “Lector de Teología”.
Desde el tomo segundo al quinto, ambos inclusive se dice: “Lector que ha sido [...]”. Y desde el sexto al doce, ambos incluidos, aparece como “Rector, y Lector de Teología que ha sido [...]”. Entre los censores de la obra se encuentra la Censura del Real Colegio de San Agustín de la Universidad de Alcalá y allí aparece la firma del hermano del autor: “Fr. Enrique Flórez, Lector de Teología y Doctor de la Universidad”.
“El juicio general que formamos de este Año es que será utilísimo para toda suerte de personas, y para todo estado; pues para todos ha trabajado el vigilante zelo del autor”.
En el prólogo y advertencias generales para todos los tomos de esta obra explica sus intentos, su estilo, el porqué de tantas cosas, las fuentes de donde toma las noticias teresianas, etc., y dice cómo el ejemplar de la Vida de la Santa escrita por el P. Francisco de Rivera, de que se sirve, es el anotado por el P. Jerónimo Gracián. Este libro era entonces propiedad del Colegio de Descalzos de Alcalá.
Confiesa que escribe sólo con el propósito de ayudar a los lectores en la reflexión de sus doctrinas sobre los hechos de Santa Teresa; escribirá con gran veracidad y habiendo averiguado bien todas las noticias acerca de la Santa. Se dará por bien pagado en sus fatigas si quien le leyere se excitare, siquiera una vez, a alabar al Señor en los prodigios de Teresa.
Quien recorre los diversos tomos se ve agobiado por tanta erudición sacra y profana, por tantas citas, alegaciones, etc., Para darse cuenta del arsenal de noticias y consideraciones sobre santa Teresa que acumula en cada día del mes, no hay más que ir recorriendo el Índice de las cosas notables bajo la voz Santa Teresa de Jesús. Entonces se ve que los doce tomos resultan ser una especie de enciclopedia teresiana. Hay temas tratados con gran amplitud y claridad, v. Gr. El voto seráfico o voto de hacer lo más perfecto (t. III, págs. 37-83), y el tema del patronato de Santa Teresa sobre España que suscitó tanta polémica erigiéndose en abanderado de los santiaguistas nada menos que Francisco de Quevedo (t. II, págs. 147-241).
Tenía Antonio de San Joaquín treinta y nueve años cuando salió el primer tomo y setenta y cinco cuando apareció el último del Año Teresiano, aunque había dado por terminada la obra en 1767, a sus setenta y tres años. Al final del último tomo se dirige a la Santa y le dice entre otras cosas: “[...] larga ha sido mi vida, y ya naturalmente no será mucho lo que puedo vivir [...] No será dable el gozar yo más tiempo con salud expedita y libre la cabeza del achaque decrépito, que suele acometer a los ancianos, sin dedicarme nuevamente a segunda Obra, en que mi pobre pluma pueda comerciar en tus escritos, para instruir a las almas en las verdades que tú enseñas”.
El tiempo que le quede de vida lo quiere emplear en “formar otra obra, que saldrá de lo que escribió tu pluma celestial en el principio del capítulo 28 del Camino de Perfección, a la que pienso dar este título: Instrucción Teresiana que enseña al alma, adónde y cómo ha de buscar a Dios” (t. XII, pág. 672). Trabajador infatigable acometió esta obra y publicó el primer tomo en 1769, llevando como hilo conductor el señalado de la búsqueda de Dios, siendo esto un oficio y obligación de todo cristiano, especialmente los hijos e hijas de Santa Teresa. Enseña a buscar a Dios a través de todo, del ejercicio de todas las virtudes, que va recorriendo una por una. El ritmo de la búsqueda del Señor lo señala de una manera densa y comprometedora: “Sin pausa, sin demora, sin intermisión, en todas las edades, en todos los años, en todos los meses, en todas las semanas, en todos los días, en todas las horas, y en todos los instantes, debemos caminar en busca de este Divino Dueño” (t. I, pág. 13). La obra quedó en gran parte inédita. Al llegar al capítulo 10 de la parte octava del tomo tercero (inéd.), escribe con melancolía: “Hasta aquí llegó mi débil pluma con la Instrucción Teresiana, sin poder proseguir con una enfermedad que me dio, y aunque su Majestad no me acabó de sacar de este mundo, he quedado casi imposibilitado para poder continuar esta obren esta obra. Su Majestad disponga la concluya otro autor con más espíritu que el que yo llevaba en ella. Fr. Antonio de San Joaquín” (Ms 4452, BN-Madrid, fol. 161r.). Cuando cuelga la pluma estaba escribiendo sobre la búsqueda de Dios a través de la virtud de la apacibilidad. Al año de escritas estas líneas, murió en Madrid en diciembre de 1775, cuando tenía ochenta y un años de edad y cincuenta y dos de vida religiosa en el Carmen Descalzo.
Obras de ~: Año Teresiano [...], t. I, Madrid, Impr. de Manuel Fernández, 1733; t. II, Madrid, Impr. de Manuel Fernández., 1735; t. III, Madrid, Impr. y Librería de Manuel Fernández, 1738; t. IV, Madrid, Impr. y Librería de Manuel Fernández, 1741; t. V, Madrid, Impr. de Manuel Fernández, 1749; t. VI, Madrid, En la Oficina de Joseph de Orga, Impresor, 1755; t. VII, Madrid, en la Oficina de la viuda de Joseph de Orga, 1757; t. VIII, Madrid, Impr. de la viuda de Joseph de Orga, 1758; t. IX, Madrid, Impr. de Antonio Pérez de Soto, 1762; t. X, Madrid, Impr. de Andrés Ramírez, 1766; t. XI, Madrid, Impr. de Andrés Ramírez, 1768; t. XII, Impr. de Pantaleón Aznar, 1769; Instrucción Teresiana, que enseña al alma adónde y cómo ha de buscar a Dios, dirigida a todos los fieles de la Iglesia y especialmente a las religiosas y religiosos carmelitas descalzos, hijos de Santa Teresa de Jesús. Tomo primero, Madrid, Impr. de Pantaleón Aznar, 1769, 596 págs. (en la Biblioteca Nacional de Madrid se encuentran inéditos los otros dos tomos: mss. 9313 y 4452, respect.); Guía espiritual de la carmelita descalza de Malagón, la Ven. María Josefa de San Felipe, hija de los Condes de Valparaíso, s. l, s. f. (inéd.).
Bibl.: S. de Santa Teresa, en Historia del Carmen Descalzo en España, Portugal y América, XII, Burgos, Monte Carmelo, 1944, págs. 519-526; S. Della S. Famiglia, OCD, Panorama storico-bibliografico degli autori spirituali teresiani, en Archivum bibliographicum carmelitanum, n.º 12, Roma, Teresianum, 1970, págs. 38-39; A. de la Virgen del Carmen, “Antonio de San Joaquín”, en Q. Aldea Vaquero, T. Marín Martínez y J. Vives Gatell (dirs.), Diccionario de Historia Eclesiástica de España, vol. I, Madrid, Consejo Superior de Investigaciones Científicas, Instituto Enrique Flórez, 1972, pág. 72.
José Vicente Rodríguez, OCD