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José de Aguilera

Biografía

Aguilera, José de. Salamanca, c. 1678 – 1.II.1739. Religioso agustino (OSA), filósofo, catedrático.

Hijo del conde de Casasola, Antonio de Aguilera. Profesó en el convento salmantino de San Agustín el 12 de febrero de 1694. Dotado de una inusual constancia y capacidad de raciocinio, estudió Filosofía y Teología bajo la guía de Pedro Manso, distinguiéndose por su aplicación al descubrimiento de la verdad. “Fue no sólo amantísimo de esta virtud [escribió Vidal] sino su defensor. En lo grande, en lo pequeño; en lo especulativo, en lo práctico, nada respiraba que no juzgase verdad. Por ella peleaba a todas horas, sin poder vencerse a oír con disimulo lo que juzgaba mentira.” Como buen escolástico se entusiasmó por la doctrina de santo Tomás de Aquino, empleando cuanto tiempo podía al estudio de sus obras, cuyos principios filosóficos descubrió con facilidad. Dice el mismo autor y biógrafo de Aguilera, el historiador Manuel Vidal, que “todos eran subsidios para su aprovechamiento, i de todo se valió este joven.

Por lo que toca a las letras, si no ganó a su Lector (Pedro Manso), no fue inferior a él. Ya se advierte en los escritos de uno, i otro, i le vimos con admiración en las domésticas disputas, donde nada menos teníamos que aprender de la solidez, i profundidad del discípulo, que de la ingeniosidad i penetración del maestro”.

Una vez concluidos los estudios eclesiásticos enseñó Filosofía en la Universidad de Salamanca, luego en la Universidad de Alcalá de Henares (Madrid), desde donde pasó al convento de San Felipe el Real de Madrid. Su vida fue una constante manifestación apasionada de amor a la verdad y a la sabiduría. Recibió el grado de maestro por la orden agustiniana, y tras los ejercicios realizados ante el tribunal examinador, le otorgaron el grado de maestro en Sagrada Teología.

Fue prior del convento de Ciudad Rodrigo, visitador de la Provincia de Castilla y prior de San Felipe el Real, de Madrid. A ambos prioratos renunció y el cargo de visitador no lo ejerció, de suerte que se quedó sólo con el título. A su jubilación como profesor regresó al convento de San Agustín de Salamanca, para entregarse “los días y las noches” a la oración y al estudio de las obras de santo Tomás de Aquino.

Escribió “por obediencia” un curso de Filosofía completo, en tres tomos, publicados en Madrid los años 1719, 1720 y 1721, que sirvió de manual de Filosofía para los estudiantes de la Provincia agustiniana de Castilla. Este curso de Filosofía recibió elogiosas críticas por sus coetáneos. En efecto, el curso de Filosofía de Aguilera fue el texto escolar durante el siglo xviii en los centros de estudios de los agustinos de Castilla (conventos de Toledo y Salamanca; colegios de Alcalá y San Gabriel). Los jóvenes antes de comenzar a estudiar Teología debían defender públicamente, con la asistencia de los maestros doctores, lectores y claustro de profesores, una conclusión filosófica según los comentarios de Aristóteles y santo Tomás de Aquino escritos por el citado maestro José de Aguilera. También escribió un tomo de Metafísica que no se llegó a publicar, y estaba preparando otro volumen sobre la gracia cuando le sorprendió la muerte.

Los escritos filosóficos de Aguilera con el paso del tiempo quedaron anticuados y fuera del contexto cultural propio de la filosofía, dado que la doctrina escolástica comenzó su decadencia y postración, cuyas disquisiciones filosóficas, en general, resultaban innecesarias e inútiles, aburridas y estériles.

Un cambio de mentalidad ocasionado por la crisis de los principios y valores anteriores se fue introduciendo lentamente entre intelectuales y mundo universitario.

La cosmovisión escolástica propuesta por Aguilera, en efecto, también fue objeto de crítica. El continuador de la Historia Sagrada del padre Flórez, José de la Canal (1768-1845), cuando menciona los estudios cursados por Manuel Risco (1735-1801), sostiene que “las filosofías de [Luis de] Losada y de Aguilera no eran del gusto del joven Risco. Aquellas cuestiones inútiles, aquel latín medio bárbaro, le hacían caer de las manos el libro; pero la obediencia obligaba a estudiar por ellos, y Risco sobresalió aun en lo que aprendía contra su voluntad”. Aun así, el curso de Filosofía de Aguilera siguió impartiéndose durante varias generaciones más, aferradas a la enseñanza de la Filosofía y la Teología, entendidas en sentido puramente aristotélico-escolástico.

Posteriormente, el jesuita y profesor Luis de Losada (1681-1748), a la hora de escribir su Curso filosófico (Salamanca, 1724-1735), también en tres tomos, dará continuidad a algunos planteamientos filosóficos de Aguilera.

 

Obras de ~: Cursus philosophicus, in tres tomos divisus. Tomus primus. Dialecticam parvam et magnam complectens, Dilectissimis junioribus fratribus ejusdem Provinciae dictatus, Matriti, Tipografía Francisci de Hierro, 1719; Cursus philosophicus. Tomus segundus. Quaestiones in octo libros Phisicorum continens, Matriti, Tipografía Heraedum Emmanuelis Ruiz de Murga, 1720; Cursus philosophicus. Tomus tertius. Continens tractatus de Generatione et Anima. Additur de mundo et coelo, Matriti, Tipografía Nicolai Rodríguez Franco, 1722; Tractatus summularum, pro commodiori tyrorum studio extractus de philosophico tomistico cursu, Matriti, 1720; A. de Orozco, “Tratado de la corona de Nuestra Señora”, trad. al lat de ~, en A. Orozco, Obras, vol. IV, Madrid, Imprenta del Ven. siervo de Dios Fr. Alonso de Orozco, 1736, págs. 120-183.

 

Bibl.: M. Vidal, Agustinos de Salamanca. Historia del observantíssimo convento de San Augustín N. P. de dicha ciudad, t. II, Madrid, imprenta Eugenio García de Honorato, Madrid 1751, págs. 174, 259-264; J. Lanteri, Postrema Saecula sex religionis augustinianae in quibus breviter recensentur illustriores viri augustinenses qui sanctitate et doctrina floruerunt post magnam Ordinis unionem peractam anno MCCLVI ab Alexandro IV usque ad haec tempora, Roma, Typografia Bernardi Morini, 1860, pág. 220; G. de Santiago Vela, Ensayo de una Biblioteca Ibero-Americana de la Orden de San Agustín, Madrid, Imprenta Asilo de Huérfanos S. C. de Jesús, 1913, págs. 53-55; T. López Bardón, Monastici Augustiniani R. P. Fr. Nicolai Crusenii continuatio atque ad illud additamenta sive Bibliotheca Manualis Augustiniana in qua breviter recensentur Augustinenses utriusque sexus virtute, litteris, dignitate ac meritis insignes ab anno 1700 usque ad 1800, Operis volumen tertium, Valladolid, Typografia J. E. de la Cuesta, 1916, págs. 402-403; G. Díaz Díaz, Hombres y Documentos de la Filosofía Española, vol. I, Madrid, Consejo Superior de Investigaciones Científicas, 1980, pág. 96.

 

Rafael Lazcano González

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