González-Besada Vidal, Rafael. Tuy (Pontevedra), 9. IX 1822 – ? c. 1893. Militar.
Era el segundo hijo del intendente general de Filipinas Juan González-Besada y de Eulalia Vidal. En 1839 empezó a servir en el Ejército, como subteniente de Milicias, quedando de guarnición en San Sebastián, Tolosa, Vergara y otros puntos declarados en estado de guerra —Primera Guerra Carlista (1833-1840)—.
Con motivo de los acontecimientos de Pamplona de 1841, salió con su batallón para dicha plaza y Corella (Navarra), y después de sofocada la insurrección, se trasladó al distrito de Galicia, siéndole concedida la Medalla de distinción. Teniente de Infantería en 1843, marchó con su Regimiento a Pamplona, en donde prestó servicio ordinario, hasta que por no haber querido adherirse al alzamiento nacional, quedó en situación de reemplazo. Poco después fue destinado al Regimiento de Infantería de Castilla, encontrándose en las operaciones contra la plaza de Vigo. En 1847 pasó a Leganés (Madrid) para la organización del batallón de Cazadores de Chiclana n.º 7, con el que formó parte del Ejército Expedicionario a Portugal, a las órdenes del capitán general Manuel de la Concha, con quien se encontró en la operación de la plaza de Oporto, siéndole concedida la Medalla de Cristo de Portugal. Vuelto a España con dirección a Cataluña, entró en operaciones de campaña en la Segunda Guerra Carlista (1846-1849): acciones de Llanela (13 de diciembre de 1847) y de Ibarra (el día 14), a las órdenes del teniente general Manuel Pavía Lacy, y en 1848 a las órdenes del general Fernando Fernández de Córdoba, por la provincia de Gerona; en 1849 por la de Tarragona, siendo general en jefe el capitán general Manuel de la Concha, encontrándose en la acción de Hortal de la Serna (20 de febrero de 1849), y fue recompensado por su comportamiento con el grado de capitán, continuando en operaciones hasta el 14 de mayo de 1849, en que se dio por terminada la guerra de Cataluña. Intervino en la Revolución de 1854 (o Vicalvarada), adhiriéndose al alzamiento nacional el 28 de junio de 1854 y al ejército que mandaba el teniente general Leopoldo O’Donnell, por lo que obtuvo el empleo de capitán. Habiéndose encontrado en la batalla de Vicálvaro (Madrid) a las órdenes de dicho general, fue recompensado con el grado de comandante, siguiendo los movimientos de dicho ejército hasta su entrada en Sevilla. Participó también en la Guerra de África (1859-1860), formando parte del ejército de observación sobre las costas de África. El 28 de noviembre de 1859 se embarcó para Ceuta y el 19 quedó acampado en el Serrallo (Ceuta). El 22, 24, 25 y 30 de dicho mes se encontró en las acciones sostenidas contra los moros, en las alturas que formaban la línea avanzada del ejército, a las órdenes del general Rafael Echagüe. Por el mérito que contrajo en la tercera fue recompensado con la Cruz de San Fernando de 1.ª Clase. En la última recibió una contusión de bala, habiéndose hecho acreedor a que se hiciese mención honorífica de su nombre en la Orden General del Ejército. El 1 de enero de 1860 concurrió a la acción de los Castillejos, a las órdenes del general en jefe del Ejército Leopoldo O’Donnell, y el 2 de febrero de 1860 asistió al arriesgado reconocimiento avanzado y paso del boquete de Ausera. Terminada la guerra (25 de marzo de 1860), formó parte del ejército de ocupación, quedando en el Serrallo y Ceuta hasta el 7 de septiembre de 1860, en que regresó a España, siéndole concedida la Medalla de distinción y la calificación de Benemérito de la patria. De guarnición en Granada y en Jaén con el carácter de fiscal militar (1868), se incorporó a su batallón al paso por aquella plaza con dirección a Montoro (Córdoba), en donde se hallaba con sus tropas el teniente general Manuel Pavía Lacy (1814-1896), marqués de Novaliches, para combatir los sucesos políticos —Revolución de 1868— iniciados en la bahía de Cádiz por la escuadra, habiendo seguido la suerte de aquel ejército y obtenido el empleo de comandante por su comportamiento en la acción del puente de Alcolea. El 20 de junio de 1869 prestó juramento a la Constitución, y el 5 de febrero de 1871 de fidelidad y obediencia al rey Amadeo I.
Ascendido a teniente coronel, y a consecuencia de la nueva organización dada a los provinciales en 1872, fue destinado a mandar el batallón de Palencia. En 1872 le fue concedido el grado de coronel, en recompensa de los servicios extraordinarios que había prestado combatiendo la insurrección carlista ocurrida en abril —Tercera Guerra Carlista (1872-1876)—. En 1873 pasó a Vitoria a incorporase al Regimiento de Infantería de Cartagena, poniéndose al frente del 2.º batallón, con el cual salió a operaciones por las provincias Vascongadas y Navarra, siéndole concedida la Medalla de distinción de Bilbao. Se encontró en las acciones sostenidas con los carlistas los días 10 y 12 de septiembre de 1873 en el puente de Alegría y Tolosa (Guipúzcoa) respectivamente, a las órdenes del general en jefe interino José de Santa Pau y Bayona, siendo recompensado con la Cruz Roja de 2.ª Clase del Mérito Militar. El 2 y 3 de octubre de 1873 se halló en el ataque y toma de Dicastillo (Navarra), y el 6 del mismo en la batalla sostenida en las posiciones de Santa Bárbara y monte Guirguillano (Navarra), a las órdenes del teniente general Domingo Moriones, habiendo merecido la calificación de distinguido en este último hecho de armas y otra Cruz Roja de 2.ª Clase del Mérito Militar. El 7, 8 y 9 de septiembre de 1873 se encontró en la batalla de Monte-Jurra, en el tiroteo para conservar las posiciones tomadas en Urquiola (Vizcaya), Luquin (Navarra) y Barbarin (Navarra), y en la retirada emprendida el último de los citados días, a las órdenes de dicho general Domingo Moriones, habiendo merecido nuevamente figurar de distinguido y el empleo de coronel. El 9 de diciembre de 1873 asistió a la batalla de Velavieta, continuando las operaciones hasta que, con motivo de su ascenso, pasó al cuadro eventual de jefes y oficiales de Logroño. En 1874 tomó el mando de la columna de operaciones en las orillas del Miño por orden telegráfica del capitán general de Galicia, y por otra del poder ejecutivo, fue nombrado comandante militar de Tuy con la dirección de las fuerzas de operaciones. Al organizarse los batallones provinciales fue destinado a mandar la 3.ª ½ brigada de los de Galicia y por efecto de la reorganización de estos cuerpos se le confirió el mando de la 1.ª ½ brigada.
Destinado al ejército del norte, dejó en Portugalete el batallón de Lugo, siguiendo con el de Mondoñedo a San Sebastián y Rentería (Guipúzcoa), punto fortificado de la línea avanzada, en donde prestó servicio de campaña, desempeñando el mando militar de la plaza y sus fuertes. Rechazó los ataques dados por los carlistas al fuerte de Arramendi (Guipúzcoa) el 27 de diciembre de 1874 y los días 4 y 24 de enero, 2, 23 y 25 de febrero y 3 de marzo de 1875, sosteniendo diariamente el tiroteo con las avanzadas enemigas. A final de marzo quedó de reemplazo por disolución de las brigadas provinciales y marchó a fijar su residencia a la ciudad de Tuy. En 1876 fue nuevamente distinguido como Benemérito de la patria, y en 1883 el rey Alfonso XII le concedió el retiro como coronel de Infantería. En 1884 fue nombrado diputado provincial.
Fuentes y bibl.: Archivo General Militar (Segovia), secc. 1ª, leg. 6-3620.
C. Viscasillas Vázquez y E. Viscasillas Rodríguez- Toubes, “El aventurero gallego don Francisco Rodríguez Toubes. Un quirogués en el Álamo”, en Boletín de Estudios de Genealogía, Heráldica y Nobiliaria de Galicia, 4 (2005), pág. 242; R. Vallejo Pousada, Cobián, González Besada e Bugallal, tres ministros galegos na crise da Restauración, Pontevedra, Deputación Provincial, 2005; C. Viscasillas Vázquez, "El coronel Don Rafael González-Besada y Vidal. Apuntes biográficos", en Pontenova, n.º 12 (2007).
Carlos Viscasillas Vázquez