Zorita, Alonso de. Zorita de los Canes (Guadalajara), s. m. s. XV – ?, 1542. Último provincial vitalicio mercedario (OdeM) de Castilla y obispo electo de Astorga.
Nació en la segunda mitad del siglo XV en Zorita de los Canes, villa castellana de Guadalajara, con castillo árabe, y en cuyas cercanías existen restos de una ciudad visigoda.
Bastante joven, ingresó en la Merced de Guadalajara, donde profesó cumplido el año de noviciado. Hizo estudios probablemente en los conventos de la Orden, y tuvo los señalados cursos de enseñanza, hasta alcanzar el grado de maestro de número. Amigo de Macías de Monterrey, también en Segovia convivió con el padre Olmedo, capellán luego de Hernán Cortés, de quien era comendador Zorita el año 1511 (Archivo Histórico Nacional, Clero, leg. 285). En el capítulo de 1519, en Lérida, salió elegido definidor por la provincia de Castilla, siendo ya vicario.
En el capítulo de Segovia, en el que fray Martín de Samunde, hijo del Convento de Burceña, fue elegido definidor, fray Alonso de Zorita lo fue de provincial (1523). Fue el decimoctavo provincial de Castilla, y el último con carácter vitalicio. Ciertamente destaca, en diversos documentos, como uno de los más famosos e ilustres de su época. Había sido vicario del precedente, del maestro fray Juan de Baena, en cuyo gobierno se fundó el Colegio de Alcalá y la primera casa de Santo Domingo.
El padre Zorita, durante su provincialato, aumentó las rentas y beneficios del convento de Guadalajara, y se edificaron en Andalucía las iglesias de Cazorla, Baza, Granada, Málaga y Ronda. También reparó y amplió la de Écija. Sirvió a los Reyes de España, siendo muy apreciado por el emperador Carlos I, aunque lejano siempre de la Corte. Se dice que, como hubiese pedido al Emperador que ayudase al Convento de Huete (Cuenca), éste le dio como respuesta: “Nunca os veo sino cuando os mando llamar, o venís a pedirme alguna cosa”. Fraile, pues, de prestigio, y muy observante de la vida conventual conforme a las constituciones y el carisma redentor.
También se fundaron muchos conventos en el Nuevo Mundo durante su provincialato. Impulsó los estudios y él mismo editó obras de interés. El capítulo de Guadalajara de 1539 decidió reducir el provincialato a seis años, “después de los días del Maestro Zorita”. Electo obispo de Astorga, ya no pudo tomar posesión, pues falleció el año de su elección, 1542.
Obras de ~: Privillegios imperiales y reales de la religión de la beatísima nuestra señora Santa María de la Merced y de la santa redempción de los cristianos captivos [última fecha de Aprobaciones en Ávila], 1518; Pro Castellana sui Ordinis Provincia, porque sua a Praefecto Generali exemptione, Vallisoleti, 1531; Speculum fratrum sacri Ordinis sanctae Maria de Mercede redmptionis captivorum, Valioleti, 1533; Ordinarium Officii divini ex more fratrum Ordinis Beatae Mariae de Mercede, redemptionis captivorum, Valeoleti, 1533; Martirologio de la Orden de la Merced, Valladolid, por Nicolás Thierry, 1534; Speculum fratrum [sin portada, Regla de S. Agustín, Constituciones Concordia de Guadajara de 1467], Actas del Capítulo General de Guadalajara, ms. s. l., s. f., Biblioteca Nacional de España (BNE), sign. 2284.
Fuentes y bibl.: A. A. Hardá, biblioteca Scriptorum Ordinis B. Mariae de Mercede, ms. en Real Academia de la Historia (Madrid); copia manuscrita de A. de Arques y Jover, ms. en Archivo Curia Provincial de la Merced de Madrid, fols. 719r.- 720v.
J. A. Garí y Siumell, Biblioteca Mercedaria, o sea Escritores de la Celestial, Real y Militar Orden de la Merced Redención de Cautivos, Barcelona, Imprenta de los Herederos de la Viuda Plá, 1875, págs. 333-334; G. Vázquez, “Los Provinciales de la Merced de Castilla”, en Boletín de la Orden de la Merced, año X (octubre-diciembre de 1923), pág. 116; G. Placer, Bibliografía Mercedaria, t. II, Madrid, Revista Estudios, 1968, págs. 1062-1064.
Luis Vázquez Fernández, OdeM
