Córdova y de Vila, Alberto de. Barcelona, 1764 – Manila (Filipinas), 16.X.1806. Sargento mayor de brigada de Ingenieros, con grado de teniente coronel de Ejército.
En 1783 era cadete del Regimiento de América, en el que ascendió a subteniente en diciembre de 1786. En junio de 1787 era nombrado ayudante de ingeniero con destino en Navarra. Cinco años después, estaba trabajando aún como ayudante de ingeniero en las fortificaciones de Cádiz, siendo destinado a Caracas, aunque no llegó a embarcarse.
En enero de 1793 era promovido a teniente e ingeniero extraordinario, siendo, en ese mismo año, destinado a las islas Filipinas, aunque nuevamente siguió en su destino anterior en Cádiz. El 3 julio había recibido un oficio del gobernador de la plaza de Cádiz comunicando una real orden por la que Córdova, destinado en las islas Filipinas, debía embarcar en este puerto, el de Cádiz, para el de Veracruz a fin de emprender viaje a dicho destino por la ruta de Acapulco en la primera ocasión, si antes no surgía otra para embarcarse y navegar hacia dichas islas.
En 1794 se encontraba como ingeniero en Ciudad de México y, en abril de ese año, realizó, junto con el también ingeniero Pedro Ponce, un reconocimiento de las obras del Real Desagüe de Huehuetoca. Para ello elaboró tres planos del Perfil cortado por latitud taxo abierto por el Real Tribunal del Consulado… En septiembre de 1795 conseguía, gracias a una real orden, que de nuevo se le excusara de marchar a Filipinas y permanecer en Nueva España.
En 1795 se le destinó a California, llegando al presidio de San Diego en diciembre de ese año. En 1796, estaba encargado del reparo de la pequeña fortaleza de San Joaquín en San Francisco, destruida por una tormenta, e, igualmente, del reparo del almacén de pólvora y del presidio. También en ese año, escribió un informe sobre el estado de los fuertes de California y realizaba un Plano de una porción de costa que comprende el Puerto de San Francisco y Ensenada de Monterrey. Siguiendo en 1796, redactó varios proyectos en San Francisco y San Diego que no pudo realizar, ante la falta de respuesta desde el virreinato a sus peticiones e informes.
En junio de 1797 se le ordenó la búsqueda de un buen sitio para la fundación de un nuevo pueblo. Córdova proponía uno cercano a la misión de Santa Cruz, a treinta leguas de San Francisco y veinticinco de Monterrey, elaborando un informe acerca del sitio de Branciforte, acompañado de un plano que manifestaba el proyecto de una nueva población en la Nueva California (la Villa de Branciforte). En ese año, Córdova redactó proyectos para la fundación de la citada villa, detallando planos de edificios, presupuestos, etc. Además, en el año últimamente citado, estaba construyendo la batería de Yerba Buena, en la bahía de San Francisco y, en julio de ese año, regresaba a Santa Cruz para dirigirse al nuevo sitio de Branciforte con el fin de preparar nuevos mapas y planos de los edificios propuestos, sitio en el que construía una presa. Finalmente, y siguiendo en 1797, recibió la orden de regresar a San Francisco, donde se le ordenó trasladarse a México. En el tiempo que transcurrió hasta su embarco en abril de 1798, realizó reconocimientos de las costas entre Santa Cruz y San Francisco. Una vez en México capital, quedó encargado de las obras de la fábrica de azufre, ya que la antigua fábrica de Chapultepec solo se utilizaba para el refino del azufre y hubo necesidad de ampliación.
En 1799 Córdova quedó encargado de la construcción de varios molinos de pólvora. Miguel Constanzó había proyectado en 1778, en el valle de Santa Fe y a tres leguas de distancia de Ciudad de México, varios molinos de pólvora que no llegaron ejecutarse. En 1798 se encargó al director de Arquitectura de la Academia de San Carlos, Antonio Velázquez, de formar plano y presupuesto, que lo presentaba rodeado de una cerca de seis varas de altura, con importe de 12.000 pesos. El virrey pidió informe reglamentario al ingeniero militar Constanzó, a la sazón en Veracruz y tras detenido examen, el ingeniero citado demostró graves errores, pues el plano carecía de detalles y estaba equivocado en dimensiones y en el presupuesto al ser doble de la realidad. En vista del fracaso de Velázquez, Constanzó formó nuevo plano y presupuesto con bastantes detalles constructivos, señalando por ejemplo que: “los cimientos y el rodapié de la cerca se harían de mampostería ordinaria y el resto de tepetate, los estribos tendrían media vara de frente y una tercia de desplante”. Como su presupuesto era solo de 8.000 pesos, el virrey ordenó su ejecución inmediata, quedando encargado de la obra, como se ha señalado, el teniente de Ingenieros Alberto de Córdova.
En mayo de 1800, llegó destinado finalmente a las islas Filipinas, donde elaboró un plano y perfiles de un cuerpo de guardia y veinte tinglados para lanchas cañoneras en la orilla del río Pasig, en Manila y el proyecto del Consulado, con hermosos planos en color. Su primer plano de ese edificio es un alzado y sección, más otros dos que correspondían a las plantas del edificio, que estaba construido de piedra con balcones de hierro y aspecto europeo.
En 1802 dibujó un perfil de la batería de Carlos IV en la ciudad de Manila y, con fecha de 28 de enero de 1803, enviaba una carta al ministro de Estado, comunicando que había “entregado al gobernador de la plaza de Manila cinco relaciones del adelantamiento y gastos causados en las obras de fortificación y edificios militares de esta plaza y la de Cavite”. Al respecto, en 1804, seguía encargado de poner en estado de defensa Manila y Cavite y solicitaba el ascenso a teniente coronel. En ese año también realizaba un Plano que demuestra los tres castillos construidos en Guaján, capital de las Islas Marianas.
Fallecía en Manila en 1806, después de recibir una real orden para regresar a España. En ese año era sargento mayor de brigada de Ingenieros, con grado de teniente coronel de Ejército (los oficiales de Ingenieros podían ascender en dos escalas distintas: una, la del Ejército, por elección, y otra, en el Cuerpo, por antigüedad).
Obras de ~: Expediente sobre la obra ejecutada para el desagüe de la laguna de Huehuetoca en virtud de la contrata con el Consulado de México, 1789-1797; Relación que expresa los gastos causados en las obras provisionales y reparos de la fortificación y edificios militares de la plaza de Cavite desde 10 de junio hasta fin de diciembre de 1801, Cavite, 5 de enero de 1802, ms.; Relación del adelantamiento y gastos causados en las obras y reparación de fortificación y edificios militares de esta plaza, Manila, 10 de febrero de 1804, ms.
Fuente y bibl.: W. E. Retana, Breve Diccionario Biográfico de los Ingenieros Militares que han estado en las Islas Filipinas, Madrid, Memorial de Ingenieros, 1923; H. Capel et al., Los Ingenieros Militares en España. Siglo XVIII. Repertorio biográfico e inventario de su labor científica y espacial, Barcelona, Publicaciones y ediciones de la Universidad de Barcelona, 1983; J. O. Moncada Maya, Ingenieros Militares en Nueva España. Inventario de su Labor Científica y Espacial. Siglos XVI-XVIII, México D.F., Universidad Autónoma de México, 1993; M. G. Cano Révora, Cádiz y el Real Cuerpo de Ingenieros Militares (1697-1847). Utilidad y Firmeza, Cádiz, Servicio de Publicaciones de la Universidad de Cádiz, 1994; C. Laorden Ramos, Obra Civil en Ultramar del Real Cuerpo de Ingenieros, Madrid, Ministerio de Defensa, 2008, 2 vols.
Juan Carrillo de Albornoz y Galbeño
