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Agustín Bueno Ortiz

Biografía

Bueno Ortiz, Agustín. Alburquerque (Badajoz), 27.I.1749 – Murcia, 30.VIII.1811. Militar, coronel de Ingenieros y mariscal de campo del Ejército.

El 13 de abril de 1768, ingresaba como cadete del Regimiento de Córdoba, en el que sirvió durante más de cinco años, estudiando, a partir de 1769, en la Academia de Matemáticas de Barcelona. Con fecha 30 de septiembre de 1773, una vez terminados los estudios y aprobados los exámenes reglamentarios, ingresaba en el Cuerpo de Ingenieros con el grado de ayudante y con destino al principado de Cataluña. Un año después se encontraba trabajando en el castillo de San Fernando de Figueras, en Gerona.

En 1776, con 27 años de edad, era nombrado primer ayudante del director de la Academia de Matemáticas de Orán, ascendiendo a teniente e ingeniero extraordinario el 23 de junio de 1778. En 1784, se le designaba como profesor de la Real Academia de Matemáticas de Barcelona, siendo promovido a capitán e ingeniero ordinario el 29 de diciembre de 1786. En 1794, sin pérdida de destino, se integraba en el Ejército del Rosellón, en el marco de la Guerra de la Convención contra la Francia revolucionaria, recibiendo el ascenso a teniente coronel del Cuerpo, con fecha de 16 de octubre de ese año. También en 1795 pasaba de nuevo destinado a la plaza de Figueras como jefe de la Comandancia de Ingenieros de dicha ciudad, de la que pasaba a la de Rosas, continuando con los trabajos de fortificación. Además, en el repetidamente citado año de 1795, era nombrado defensor de los encausados por la pérdida de Figueras durante la Guerra de la Convención y, tres años más tarde, igualmente defensor del brigadier Juan Nepomuceno Quiroga, encausado por la pérdida de Menorca. En 1796, remitía al general López Sopeña unas “Apuntaciones… de los caminos de Belver a Seo de Urgell y particularmente de aquél por donde pudiera conducirse la artillería gruesa” y, en 1799, realizaba un proyecto para un edificio para el Estado Mayor de la Artillería en la plaza de Figueras, así como planos de edificios para pabellones en la misma ciudad.

En 1802, era promovido a coronel de Ingenieros y destinado como director de la Academia de Matemáticas de Zamora hasta su cierre al comienzo de la Guerra de la Independencia. Los estudios en la citada Academia servían como preparación para aquellos que deseasen ingresar en la de Ingenieros, posteriormente abierta (1803) en Alcalá de Henares. Además, Bueno (ascendido a brigadier el 12 de octubre de 1804) sería, más tarde, consultado sobre los posibles y más idóneos profesores, así como respecto al nombramiento de su futuro jefe de estudios, cargo para el que señalaría a Carlos Cabrer. Cerrado a su vez este centro último, al igual que el de Zamora, en 1808 con ocasión de la guerra contra los franceses (Guerra de Independencia), quedaba el Cuerpo de Ingenieros sin una institución donde preparar a los oficiales necesarios en tal contienda. Para remediarlo en lo posible, en 1809 se convocaban exámenes (a los que solo se presentaron tres oficiales y un cadete) a la antigua usanza para admitir a futuros ingenieros entre aquellos miembros del Ejército que demostrasen ser entendidos en ciencias matemáticas. Para ese efecto se nombraba una comisión que cumpliera con esa misión, nombrándose al brigadier Bueno para presidirla. Con anterioridad, en noviembre de 1808, fue comisionado por la Junta Central, para pasar, junto con el capitán general Ventura Escalante, al cuartel general de sir John Moore, para coordinar sus operaciones en España. 

En el desarrollo de la contienda, ante el rápido avance de las tropas napoleónicas, la necesidad de fortificar la zona de Cádiz se hacía cada vez era más urgente. Desde el 14 de febrero de 1809 hasta la entrada del ejército del duque de Alburquerque en febrero de 1810, estuvo dirigiendo las obras de fortificación de Cádiz el ingeniero Antonio Prat, bajo la inspección de la Junta de Fortificaciones, encabezada por Agustín Bueno (ascendido a mariscal de campo de los reales ejércitos y director de Plazas y Fortificaciones), ejecutando, entre otras obras, las cortaduras del arrecife y voladura del arco central del puente de Suazo, construcción de puentes provisionales para el paso por ellas, espaldones de tierra de las baterías de San Pablo y San Pedro y las baterías de la cerca del real y de la embocadura del sur del canal de Sancti-Petri.

En septiembre de 1810 se le designaba como comandante general de Ingenieros del Ejército del Centro y, posteriormente, con el mismo cargo, en el 3.er ejército. Finalmente, en 1811, estaba destinado como director subinspector de Ingenieros en Murcia, donde fallecía en ese mismo año, víctima de la epidemia de “fiebre amarilla”.

 

Fuentes y bibl.: Archivo de Simancas, Exps. Personales.

VV. AA., Estudio Histórico del Cuerpo de Ingenieros del Ejército, Madrid, Establecimiento Tipográfico Sucesores de Rivadeneyra, 1911, 2 vols.; H. Capel et al., Los Ingenieros Militares en España. Siglo XVIII. Repertorio biográfico e inventario de su labor científica y espacial, Barcelona, Publicaciones y ediciones de la Universidad de Barcelona, 1983; H. Capel, De Palas a Minerva, La formación científica y la estructura institucional de los Ingenieros Militares en el siglo XVIII, Madrid, Serbal-Consejo Superior de Investigaciones Científicas, 1988; L. F. Martínez Montiel, “La fase gaditana del ingeniero Antonio Prat”, en Espacio, Tiempo y Forma, 5, 1992, págs. 375-384; R. Gutiérrez y C. Esteras, Arquitectura y Fortificación. De la Ilustración a la Independencia Americana, Madrid, Ediciones Tuero, 1993; M. G. Cano Révora, Cádiz y el Real Cuerpo de Ingenieros Militares (1697-1847). Utilidad y Firmeza, Cádiz, Servicio de Publicaciones de la Universidad, 1994; C. Díaz Capmani, “Els enginyers de la fortalesa de Sant Ferran de Figueres”, en AIEE, 38 (2005), págs. 279-302; A. Martín-Lanuza Martínez, Diccionario Biográfico del Generalato Español. Reinados de Carlos IV y Fernando VII (1788-1833), Madrid, Foro para el Estudio de la Historia Militar de España, 2012.

 

Juan Carrillo de Albornoz y Galbeño