Navarro Aliguer, Felipe Benicio. El Grao (Valencia), 24.I.1774 – Valencia, 1832. Jurista y político.
Nacido en El Grao de Valencia, fueron sus padres Lorenzo Navarro Carles, que ejercía la medicina en dicha localidad, y Vicenta Aliguer Cervero. Estuvo casado con Rosa Marau y Cabanes. Su hijo Felipe Benicio siguió la carrera militar y, fruto de los años de exilio, tenía un buen conocimiento de idiomas que le posibilitó ser intérprete de la legación inglesa en la plaza de Bilbao (1835); en 1869 alcanzó el grado de brigadier por méritos en el alzamiento de 1868.
El hermano de Felipe Benicio Navarro Aliguer, Francisco Javier, heredó la carrera y la clientela de su padre, mientras Felipe estudiaba Jurisprudencia. El 7 de junio de 1794 obtuvo el grado de bachiller en Leyes y dos años más tarde el de doctor (6 de junio de 1796) en la Universidad de Valencia. Finalizados sus estudios trabajó en un bufete, a fin de poder acceder al examen para poder ejercer la abogacía ante el Real Acuerdo de Valencia, lo que consiguió el 25 de febrero de 1799.
Ante la saturación de abogados en toda España, el Consejo de Castilla había decidido (1794) limitar el número de licencias para ejercer la profesión, por lo que Navarro no pudo entrar en el Colegio de Abogados valenciano. Durante el curso 1798-1799 figuró por primera vez en los horarios de clases de la Universidad valenciana, en calidad de encargado de tercer curso de Leyes, y unos años más tarde (1803- 1804) estaba impartiendo Derecho Romano. Durante ese curso opositó a una cátedra temporal (enero de 1804). Dos años más tarde, tras el fallecimiento de Juan Sala, se realizó una oposición en la que Navarro no logró apoyos suficientes frente a Nicolás María Garrelly Battifora.
Dos años más tarde (1807-1808) se le encomendó la Cátedra de Economía Política, recién creada. Tras la convocatoria de la oposición de dicha cátedra, surgieron diversos problemas, el último de los cuales (la sublevación contra los franceses en 1808), estuvo a punto de anular el proceso, que se retrasó hasta noviembre de 1808. El 19 de dicho mes, Felipe Navarro obtuvo la cátedra perpetua de Economía Política. En esa época ya había ingresado en el Colegio de Abogados, en el que se mantuvo hasta 1822.
Al iniciarse la Guerra de la Independencia, la Universidad formó un batallón de Artillería del que Navarro fue uno de los capitanes (17 de abril de 1809). Dicha tropa tomó parte muy activa en la defensa de la plaza frente al asedio francés. Tras la ocupación francesa de Valencia debió de retirarse hacia el sur, ya que su hijo nació (1 de junio de 1813) en Alicante.
Navarro no tuvo inicialmente problemas con las autoridades absolutistas, pero en 1817 se vio obligado a huir. Un grupo de liberales, bajo la dirección de Manuel Bertrán de Lis, Ascensio Nebot y Felipe Benicio Navarro, había proyectado asesinar al general Elío el 17 de enero de 1817. Descubierta la conjura, fueron ahorcadas cuatro personas, y los tres cabecillas se vieron obligados a huir a Gibraltar. Por presiones de las autoridades españolas, hubo de trasladarse a Liorna (Italia), desde donde viajó a París (1819) para reunirse con Espoz y Mina. Su regreso a Valencia se produjo tras la proclamación de la Constitución de 1812.
Resultó elegido diputado por Valencia en las elecciones de 1820, y se convirtió en el miembro más exaltado de la representación valenciana. Intervino en diversas ocasiones, siendo necesario destacar sus discursos en el debate sobre la ley de señoríos, defendiendo que debían ser los señores quienes presentasen los títulos de propiedad, o en el de encausamiento de los firmantes del Manifiesto de los Persas.
Tras la sublevación moderada del 7 de julio de 1822, se encargó la formación de un gobierno a Evaristo San Miguel, quien confió la cartera de Gracia y Justicia a Felipe Benicio Navarro (del 5 de agosto de 1822 al 28 de febrero de 1823). La principal preocupación del Ministerio fue la de enfrentarse a la oposición tanto interior como exterior, que se había incrementado en los últimos tiempos. En su departamento, uno de los problemas fundamentales fueron las relaciones con el Vaticano, que en enero de 1823 acabó retirando al nuncio.
La presión de las sociedades secretas forzó un cambio de gobierno, que se materializaría cuando los salientes hubiesen leído ante las Cortes la memoria de su gestión. Desde ese momento quedaría en situación de interino (del 28 de marzo de 1823 al 12 de mayo de 1823). Durante este período ocupó también de forma interina la cartera de Gobernación hasta la llegada de su titular (5 de mayo de 1823).
Ante el avance de las tropas francesas se retiró a Cartagena, de donde pasó nuevamente a Gibraltar. Posteriormente huyó a Inglaterra y se instaló en Jersey (finales de 1824), hasta que, obligado por el deterioro de la salud de su esposa, optó por trasladarse a Francia.
Su solicitud fue analizada cuidadosamente por la policía francesa, que aconsejó que se solicitase información del Gobierno español a través del Ministerio de Asuntos Exteriores. A finales de junio de 1829 desembarcó en Granville, acompañado por su mujer, sus cuatro hijos y una criada.
Desde entonces elevó varias solicitudes para trasladarse a la región parisina. El Gobierno español solicitó que no se le permitiese residir en los departamentos del sur. El 9 de octubre de 1829 llegó a París, donde pensaba poder negociar un permiso para trasladarse a la zona de Montpellier, con el fin de lograr una mejora en la salud de su esposa. Tras varias dilaciones se le concedió (26 de enero de 1830) permiso para trasladarse a Marsella con la advertencia de que, al menor problema, se revocaría la licencia.
Se sabe que el 17 de marzo de 1830 llegó a Marsella y que, dos años más tarde, falleció en Valencia.
Fuentes y bibl.: Archives Nationales (Paris), F7 12.071; Archivo General Militar (Segovia), Sección 1ª, división 3.ª, legs. 72 y 389, exp. 21; Archivo Histórico Nacional (Madrid), Fondos Contemporáneos, Ministerio de Hacienda, legs 527 exp. 31; 2051 exp. 28; Archivo del Ministerio de Asuntos Exteriores (Madrid), Condecoraciones, leg. 233 exp. 11.
M. Ardit Lucas, Revolución liberal y revuelta campesina, Barcelona, Ariel, 1977; J. F. Lasso Gaite, El Ministerio de Justicia: su imagen histórica (1714-1981), Madrid, J. F. Lasso, 1984; A. Gil Novales (dir.), Diccionario biográfico del Trienio Liberal, Madrid, El Museo Universal, 1991; C. Tormo Camallonga, “Felipe Benicio Navarro y Aliguer, y la primera Cátedra de Economía Política en la Universidad de Valencia”, en L. Pérez Puente y E. González González, Permanencia y Cambio II. Universidades Hispánicas 1551-2001, México, Universidad Nacional Autónoma, 2006, págs. 305-324.
José Ramón Urquijo Goitia