Moltó y Díaz Berrio, Remigio. Valencia, 1.X.1816 – Madrid, 5.XII.1893. Teniente general de Infantería.
Ingresó como cadete el 25 de enero de 1829 en el Regimiento de Infantería Córdoba.
Entre 1833 y 1839 participó en la Guerra Carlista, sirviendo en los Regimientos 4.º de la Guardia Real, Extremadura, Saboya y Almansa. Participó el 26 de octubre de 1833 en la toma del puente de Logroño, obteniendo por su valeroso comportamiento la Cruz de San Fernando de 1.ª Clase, y, ese mismo año, el 29 de diciembre, el empleo de subteniente en las acciones de Nazar y Asarta. En 1835 se hallaba en la batalla de Mendigorría y en la de Orbizu, alcanzando en esta última, donde fue herido, el grado de teniente con antigüedad de 24 de agosto. En la batalla de Virzá, el 19 de marzo de 1836, obtuvo el grado de capitán; en las acciones de la Serranía de Ronda, los días 23, 24 y 25 de mayo, la Cruz de Caballero de la Real Orden Americana de Isabel la Católica; y, en la acción del 1 de junio de 1837, en Lecumberri, el empleo de capitán.
A continuación, durante la Campaña de Aragón y Valencia, en marzo de 1840, se distinguió en el sitio y toma de Segura, alcanzando el grado de teniente coronel.
En 1847, formando parte de la expedición de Portugal para su pacificación, al mando de tres batallones de cazadores, se le concedió el empleo de coronel con antigüedad de 28 de agosto y la Cruz de Comendador de la Orden de San Benito de Avís de Portugal. El 3 de abril de 1853 asciende a brigadier.
Entre 1854 y 1856 mandó la Comandancia General de Cuenca y ocupó los cargos de gobernador militar de Jaén y Málaga.
En 1860 pasó a ser el primer jefe del Tercio de la Guardia Civil, hasta que el 30 de junio fue nombrado gobernador político militar de las islas Vizayas de Filipinas.
En este destino se ocupó del fomento de los caminos, mejora de la agricultura y de las obras públicas, de la enseñanza primaria, la persecución de malhechores, la organización de ayuntamientos y creación de nuevos pueblos, de los establecimientos de correos y misiones, de la organización de los Tercios Civiles y de la represión y exterminio de la piratería que tanto daño causaba a esas islas. El 19 de agosto de 1864 se hizo cargo interinamente de los destinos de 2.º cabo de la Capitanía General de Filipinas, del Gobierno de la plaza de Manila y de la Subinspección de Infantería y Caballería. En dichos cargos trabajó intensamente para reformar el Reglamento de Detall y Contabilidad, redactar un manual para sargentos y cabos, para mejorar la atención, instrucción y orden de la Academia de Cadetes, y para establecer la necesaria uniformidad de jefes, oficiales y tropa.
En atención a sus servicios, y muy especialmente al mérito que contrajo en el cargo de gobernador de Vizayas, ascendió a mariscal de campo el 20 de junio de 1865.
Regresó a España en abril de 1866, siendo nombrado en julio 2.º cabo de la Capitanía General de Valencia. Ocupando el cargo de 2.º cabo de la Capitanía General de Cataluña y gobernador de la plaza y provincia de Barcelona, en agosto de 1868, estalló la insurrección en las cuatro provincias catalanas. Actuó de forma brillante, tomando las medidas necesarias para acabar con la fuerza rebelde. Por estos distinguidos servicios se le concede la Gran Cruz de la Real Orden de Carlos III.
En 1874 fue nombrado delegado especial del Gobierno en Cuenca y jefe de la división del distrito militar de Castilla la Nueva, actuando contra los carlistas en Guadalajara y Cuenca. Durante el año 1875 fue nombrado comandante general del Campo de Gibraltar y capitán general de Granada y Burgos.
En consideración a sus destacados servicios, y muy particularmente a los prestados como capitán general de Burgos durante la insurrección carlista, contribuyendo eficazmente a la pacificación del país, ascendió a teniente general el 1 de abril de 1876.
En 1878 fue elegido diputado a Cortes por el distrito de Alcoy y en 1879 senador por la provincia de Alicante. En 1884 fue nombrado director de la Guardia Civil y en 1887 capitán general de Castilla la Vieja.
Por haber cumplido la edad reglamentaria, pasó a la sección de reserva del Estado Mayor General del Ejército el 3 de octubre de 1888.
Remigio Moltó Díaz Berrio era gentilhombre de cámara y estaba en posesión de la Medalla de la batalla de Mendigorría; las Medallas por la toma de Morella, Irún y Fuenterrabía; la Gran Cruz y Cruz de San Hermenegildo y de la Encomienda de Carlos III. Falleció en Madrid el 5 de diciembre de 1893.
Fuentes: Archivo General Militar (Segovia), Secc. 1.ª, Exp. personal; Archivo del Senado, Expedientes personales, HIS- 0291-07.
Emilio Montero Herrero