Mendizábal y Pérez de Isaba, Francisco Javier de. San Sebastián (Guipúzcoa), 22.XII.1763 – Sevilla, 1.I.1838. Mariscal de campo, director subinspector de Ingenieros.
Ingresó en el Ejército el 20 de junio de 1781, como cadete y subteniente, en el Regimiento de Infantería de Cantabria y posteriormente en el Cuerpo de Ingenieros, el 17 de febrero de 1787, como ayudante, después de estudiar en la Academia de Matemáticas de Barcelona. Fue destinado, al terminar su formación, a la Dirección de Ingenieros de Guipúzcoa y en julio de 1792 al ejército del Perú, con sede en Lima, embarcando al siguiente año. Había sido ascendido a teniente e ingeniero extraordinario el 8 de diciembre de 1892.
Una vez en América, en octubre de 1796 era comisionado por el virrey del Perú para que pasara a la isla de Juan Fernández, con ocasión de una nueva guerra con Inglaterra, donde permaneció trabajando en sus defensas, durante cuatro años. En la citada isla, levantó un plano de la misma, redactando, además, un plan general de defensa, siendo promovido a capitán e ingeniero ordinario y a sargento mayor de brigada del Cuerpo el 30 de abril de 1804. Regresaba posteriormente a Lima, donde realizó numerosos trabajos técnicos. En 1807 fue encargado de llevar el agua a varios pueblos de la intendencia de Arequipa, siendo recompensado con el grado de teniente coronel del Ejército (los oficiales de Ingenieros podían ascender en dos escalas distintas: una, la del Ejército, por elección, y otra, en el Cuerpo, por antigüedad). En 1809 levantó un plano topográfico de cinco leguas de los contornos de Lima, acompañándolo de un plan de defensa.
Después de ejercer como gobernador de una mina en Huancavelica, en 1812 elaboraba el primer plano urbano de Cochabamba. La ilustración de este plano contiene, además del movimiento militar de la batalla de 27 mayo de 1812, interesantes e inéditos datos sobre la configuración física de la ciudad, discriminando con colores los sectores edificados, áreas agrícolas circundantes, zonas húmedas, como la laguna Alalay y otras de carácter geográfico.
En julio de 1812, fue nombrado cuartel maestre general del ejército del Alto Perú, en el que estuvo hasta noviembre de 1812. Del Perú pasaba a la Argentina, hallándose en varias acciones contra los insurrectos de Buenos Aires. Entre ellas, en la batalla de Vilcapugio (1 de octubre de 1813), Ayohuma (14 de noviembre de 1813), en la que el ejército al mando del general Manuel Belgrano fue derrotado por segunda vez por las tropas virreinales mandadas por el general Joaquín de la Pezuela, y Sipesipe (29 de noviembre de 1815). Había sido nombrado coronel del Cuerpo el 13 de marzo del último año citado. Además, asumía, entre otras, la responsabilidad de dibujar los planos de las acciones de guerra que él denominó como “Guerras del Sur”.
El trabajo de Mendizábal consistió, además de los levantamientos cartográficos, en la documentación de los hechos con los relatos de los testigos presenciales. Su gran conocimiento del territorio le permitió intervenir en la recomendación de estrategias que los jefes militares debían asumir para adjudicarse el éxito en la batalla. Permaneció en dicho ejército hasta fines de 1816 en que volvía a Lima nuevamente.
Una de las actividades más importantes de Mendizábal en el Perú, junto a las relacionadas con la minería, fue la relativa a la descripción de itinerarios del virreinato. A él se le debe el itinerario y descripción de varios caminos, pueblos y ciudades de la América del Sur. En 1824, describe “el Camino de Lima a Arequipa” con detalles de la composición del firme y pueblos del trayecto, así como diferentes aspectos del terreno; el itinerario y descripción del Camino Real de la Posta desde Lima a Buenos Aires y el camino desde El Callao a Cobija y Potosí y desde Jujuy a Sorosora.
En el aspecto relacionado con la minería, Mendizábal estuvo a cargo de las obras en las vertientes de Lirima, Guantiaga y Coyacagua del partido de Osorno. Trataba de solucionar el suministro de agua a las minas de Huantajaya que ofrecía grandes dificultades. Para ello levantó un plano: Vista del célebre mineral de Huantajaya, en 1807, acompañado de un informe sobre la “imposibilidad de dar agua al referido Mineral”, remitido por el virrey del Perú en carta de 23 de septiembre de 1808. Más tarde, realizaba también otro plano de las vertientes de Lirima, complemento del anterior y un tercer plano con plantas y secciones de las obras que propone en su proyecto, para lograr la regulación de la Cuenca y suministro de agua destinada a la extracción del mineral, entre otras el malecón para aumentar el agua de Lirima y la “Azequias” de Lirima y Coyacagua. En el primero de los citados planteaba una extensa relación histórica sobre el mineral de Huantajaya.
Nombrado comandante general de Ingenieros del virreinato del Perú, en 1819 estaba en Pisco, siendo promovido a brigadier el 9 de junio de 1820. Al producirse la evacuación de Lima, se trasladó a El Callao, donde fue hecho prisionero en septiembre de 1821. Una vez liberado, marchaba a Río de Janeiro, desde donde regresó a España en agosto de 1825, siendo ascendido a mariscal de campo y condecorado con la Gran Cruz de San Hermenegildo. Era destinado el 29 de marzo de 1829, como director-subinspector del Cuerpo en Galicia, donde estuvo hasta agosto de 1836, en que era relevado por el general de Ingenieros Antonio Fernández y destinado a la Dirección del Cuerpo en Andalucía.
Obras de ~: Nuevo sistema de fortificación, dedicado al Rey N. S. D. Fernando VII, Lima, 1817 (ed. rev., Pamplona, 1828); Itinerario y descripción de varios caminos, pueblos y ciudades de la América del Sur, 1824.
Fuentes y bibl.: Archivo General Militar (Segovia). Exps. personales.
Estados (Escalillas) del Cuerpo de Ingenieros del Ejército, 1792-1838; J. Almirante, Bibliografía Militar de España, Madrid, Imprenta de Manuel Tello, 1876; VV. AA., El Cuerpo de Ingenieros del Ejército. Resumen Histórico de su Organización y Servicios durante la Guerra de la Independencia, Madrid, Memorial de Ingenieros, 1908; H. Capel et al., Los Ingenieros Militares en España. Siglo XVIII. Repertorio biográfico e inventario de su labor científica y espacial, Barcelona, Publicaciones y Ediciones de la Universidad, 1983; M. G. Cano Révora, Cádiz y el Real Cuerpo de Ingenieros Militares (1697-1847). Utilidad y Firmeza, Cádiz, Servicio de Publicaciones de la Universidad, 1994; C. Laorden Ramos, Obra Civil en Ultramar del Real Cuerpo de Ingenieros, Madrid, Ministerio de Defensa, 2008, 2 vols.; A. Martín-Lanuza Martínez, Diccionario Biográfico del Generalato Español. Reinados de Carlos IV y Fernando VII (1788-1833), Madrid, Foro para el Estudio de la Historia Militar de España, 2012; C. R. Lavayén Mendoza, “Documentos y personajes para la historia urbana de Cochabamba 1800-1825”, en Los Tiempos, 12 de septiembre de 2017 [en línea], disponible en https://www.lostiempos.com/actualidad/local/20170912/documentos-personajes-historia-urbana-cochabamba-1800-1825.
Juan Carrillo de Albornoz y Galbeño
