Osorio Zabala, Amado Eugenio. Vegadeo (Asturias), 6.IX.1851 – Madrid, 10.XII.1917. Explorador, naturalista y médico.
En el seno de ilustre y acomodada familia, nació en la Vega de Ribadeo —hoy Vegadeo—, hijo de Antonio Osorio Bermúdez y de Francisca Zabala y Pérez- Vizcaíno.
Realizó sus estudios en Oviedo, Lugo y Santiago de Compostela; en esta última ciudad obtuvo el título de bachiller en Artes (1867) con la calificación de sobresaliente. A continuación, se trasladó a Madrid para cursar en la Universidad Central la carrera de Medicina y Cirugía, licenciándose (1877) con aprovechamiento.
Con el título de médico-cirujano en su poder, regresó a su villa natal para ejercer su profesión, pero su empeño en dispensar remedios más acordes con la medicina naturista —que defendía—, que con los cánones de la Academia, hizo que el alcalde Indalecio Arango, que reprobaba su conducta, le sometiese a una vil persecución y le prohibiese ejercer la medicina, lo que le llevó a abandonar su patria chica.
Desde joven, siempre había manifestado una gran curiosidad por el conocimiento de tierras inexploradas, y en especial por África, y estas inquietudes le llevaron a ponerse en contacto con diferentes sociedades británicas (1882), que le propusieron financiar sus proyectos, a condición de convertirse en ciudadano inglés. Su respuesta fue: “Para sufrir privaciones, los dolores y peligros de una expedición, no necesito ser inglés; y si del viaje resulta gloria, la quiero para mi patria”.
Fue miembro de la Sociedad Española de Africanistas y Colonistas —con Francisco Coello y Joaquín Costa, entre otros—, a la que aportó la entonces (1883) importante suma de 5000 pesetas (superior a la aportada por la Casa Real). Por fin, consiguió hacer realidad sus ilusiones y en agosto de 1884 partió hacia Fernando Póo con la expedición de Manuel Iradier. Ante la retirada por enfermedad, primero de Iradier y luego de Montes de Oca —gobernador de Fernando Póo—, continuó él solo la expedición (1886) apoyado por la escolta y cuatro fusiles, recogiendo datos arqueológicos, zoológicos y antropológicos (colección que lleva su nombre en el Museo Etnográfico de Madrid) de sumo interés. En esta expedición, se adquirieron para España cerca de 14.000 km2 de la costa africana, entre el Río Campo y el cabo de Santa Clara, después de negociar con ciento un jefes tribales.
Realizó el descubrimiento de tres inéditas especies de mariposas, de las cuales dos llevan su nombre Mustius Zabalius Guineensis y Playyphullum Ossoriori, y la tercera la dedicó a Iradier con el nombre de Oxyrrheppes Iradier. Un pico montañoso del África Ecuatorial Francesa, en la colonia del Congo, conocido como Osorio, le debe su nombre.
En estas fechas (1886), fue nombrado Hijo Esclarecido de la Vega de Ribadeo (Vegadeo). Entre 1899 y 1892 atravesó el Atlántico, esta vez en dirección a América, y la recorrió de Norte a Sur. Volvió a África en 1893, compartiendo con el doctor Llorente la dirección del Hospital de campaña que el periódico El Heraldo de Madrid había instalado en Melilla. Como médico del Batallón de Voluntarios del Principado de Asturias, organizado por el obispo de Oviedo fray Ramón Martínez Vigil y enviado a Cuba para sofocar la insurrección, regresó a América en 1896 y allí permaneció hasta el final de la guerra.
De nuevo en África (1901), formó parte de la Comisión Oficial Española para negociar con Francia el establecimiento de los fronterizos de las colonia de Río Muni y territorios del golfo de Guinea. Más tarde (1903), por expresa indicación de Maura, junto con otros renombrados políticos, formó parte de la Comisión de Reforma de estos territorios.
En 1906 se casó con Josefa Rodríguez Carballeira (madre del famoso pianista Pepito Arriola), se trasladó a Alemania a ampliar estudios y allí, de este matrimonio, tuvo dos hijas: Pilar, nacida en Leipzig, y Carmen, nacida en Berlín, asimismo precoces y magníficas pianistas. De regreso a Madrid, participó en la fundación del Instituto Ruber, desempeñando su trabajo como especialista en oftalmología y dermatología. Y definitivamente en Madrid residió, intercalando frecuentes viajes por Europa y América, hasta su fallecimiento en 1917.
Estaba en posesión de varias cruces y distinciones españolas por sus servicios en las campañas de Melilla y Cuba, y de Francia recibió una de sus más importantes condecoraciones, la de la Legión de Honor en su grado de caballero. Siempre afirmó que su mayor honor habían sido los títulos que le otorgaron en su villa natal: su nombramiento de Hijo Esclarecido de Vegadeo y su inscripción como socio de honor de la Sociedad Recreativa La Tertulia.
Obras de ~: “Fernando Póo y el Golfo de Guinea. Apuntes de un viaje”, en Anales de la Sociedad Española de Historia Natural (ASEHN) (Madrid), t. XV (1866), págs. 289-348; Vocabulary of the Fan Language in Western Africa, South of the Equator. With Spanish interpretation prepared on the spot, London, Society for promoting christian knowledge, 1887.
Fuentes y bibl.: Archivo Privado Osorio Sampedro, Ribeira (La Coruña); Archivo Privado Méndez Pérez (Vegadeo).
J. Macpherson, “Enumeración y estudio de las colecciones recogidas en su viaje por el Dr. Osorio. Geología”, M. Antón, “Enumeración y estudio de las colecciones recogidas en su viaje por el Dr. Osorio. Antropología y Etnografía”, F. de P. Martínez y Sáez, “Enumeración y estudio de las colecciones recogidas en su viaje por el Dr. Osorio. Vertebrados”, V. Reyes y Prosper, “Enumeración y estudio de las colecciones recogidas en su viaje por el Dr. Osorio. Moluscos” e I. Bolivar, “Enumeración y estudio de las colecciones recogidas en su viaje por el Dr. Osorio. Articulados”, en ASEHN (Madrid) (1886); Editorial, “Un explorador asturiano”, en El Carballón (Oviedo), n.º 1629 (1886); M. Iradier, “Reconocimiento de la Zona Ecuatorial de África en las Costas de Occidente: sus montañas, sus ríos, sus habitantes...”, en África, viajes y trabajos de la Asociación Eúskara La Exploradora, Imprenta Iturbe, Victoria, 1886; J. C. Paraje Manso, “Amado Osorio. Notas biográficas de un veigueño excepcional”, en Eoario, La Comarca del Eo (Ribadeo, Lugo), n.º 3210 (1981); A. Pedraz Marcos, Quimeras de África, Madrid, Ediciones Polifemo, 2000; J. I. García Noriega, “Amado Osorio y Zabala, explorador”, en Entrevistas en la Historia. La Nueva España, Oviedo, 21 de enero de 2002; A. Pedraz Marcos, “Médicos del mundo del siglo xix”, en Temperamentum, Revista Internacional de Pensamiento Enfermero, n.º 5 (2007).
Marcelino Méndez Pérez
