Veguer y Martiller, José. ?, u. t. s. XVIII – ?, p. m. s. XIX. Militar, coronel del Ejército y teniente coronel de Ingenieros.
En 1790 concurrió a una plaza de profesor de matemáticas en los estudios de San Isidro de Madrid con el “Ejercicio público de matemáticas que tendrá en los Reales estudios de S. Isidro de esta Corte D. José Veguer y Martiller, asistido de su maestro D. Antonio de Varas y Portilla (...) el día 8 de Julio de 1790”.
En septiembre de 1792 era nombrado ayudante de ingeniero y cuando se organizaba en 1803 la primera unidad de tropa del Cuerpo de Ingenieros, el Regimiento de Zapadores-Minadores (con guarnición en la ciudad de Guadalajara), se le destinaba al mismo como capitán primero de una Compañía de zapadores.
En 1808, al inicio de la Guerra de la Independencia, Veguer era el sargento mayor del segundo batallón del citado regimiento y protagonizaba un episodio conocido como “la Fuga de los Zapadores”. El hecho fue que los restos tanto de la unidad de Ingenieros que estaba en su mayor parte dispersa por España (con arreglo al Tratado de Fontaineblau), como algunos de los profesores y alumnos de la Academia decidieron marchar a Valencia para unirse al ejército allí formado con la intención de luchar contra los franceses. El 24 de mayo de 1808, en correcta formación con la bandera desplegada y a tambor batiente, la unidad salía de Guadalajara, llegando a Valencia después de diversas vicisitudes el 7 de junio, siendo recibidos en la ciudad entre aclamaciones. Inmediatamente después de la llegada, se formó en la citada plaza bajo el mando de Veguer un Regimiento de Ingenieros con los llegados más otras dos compañías con soldados de “oficios” que allí se formaron. Las Compañías que se organizaban habían de completarse cada una con 100 hombres de oficios análogos al servicio de zapadores, como carpinteros de hacha, carreteros, canteros, etc.
Este regimiento estuvo en la batalla de Tudela (23 de noviembre de 1808), después de la cual se acogieron a Zaragoza donde cooperaron en la defensa de la inmortal ciudad, durante el segundo sitio.
Después de su llegada a Valencia, Veguer lo comunicaba a la Junta, comunicación que se publicaba por la Gaceta de Valencia el día 7 de junio: “La Junta Suprema de Gobierno mandó por decreto de 12 que se insertase en este Periódico la siguiente exposición del valeroso Coronel del Regimiento de Zapadores Minadores D. José Veguer, bien conocido ya en toda la Península. Valencia 8 de junio de 1808.
La Junta Central de este Reino, ha concedido a V.S. el grado y sueldo de Coronel en consideración a la heroica hazaña, conque despreciando los mayores riesgos, se va a este Reino con el Cuerpo de Zapadores y Minadores de su mando para abrazar nuestra causa, y mando que V.S. forme un Regimiento de Zapadores compuesto por cuatro compañías con las facultades competentes y conocimientos para nombrar oficiales, dejando a su celo y conocimiento la formación de todo.”
En la misma Gaceta del día 7 se publicaba la arenga, que según indica la misma, fue dicha por Veguer el 24 de mayo:
“Soldados españoles, el juramento que acabáis de hacer espontáneamente de defender a la Patria, de permanecer obediente a mis órdenes, de conservar nuestra caja y de no molestar a nuestros compatriotas en los pueblos por donde transitamos, es el primer escalón por donde vais a subir a la clase de los héroes. Madrid desarmado con ardides de perfidia, mira con dolor rabioso los cantos de sus calles teñidos con la sangre inocente de sus conciudadanos asesinados y suspiran por un socorro pronto. Nuestro Príncipe, nuestros Jefes en opresión callan y también gimen nuestra Sagrada religión y sus Ministros. Todo peligra y corre riego en un profundo silencio; mas, españoles, escuchad todos y creedme, yo ya no puedo resistir a un interior impulso; me parece que oigo una voz imperiosa que manda os diga: Venid conmigo, demos una vuelta a nuestro suelo y veremos dentro de pocos días muchos millones de paisanos, de soldados descarriados, que buscan quien los dirija, unidos a nuestro Cuerpo. Organicémosles y con ímpetu de leones buscaremos, acometeremos en su centro, en sus retiradas y a esa tropa de bandidos y asesinos engañadores y los despedazaremos para escarnio eterno”.
Veguer en mayo de 1809 tenía el empleo efectivo en el Cuerpo de Ingenieros de teniente coronel. En abril de 1810 era brigadier (empleo que no se le reconocería más tarde), coronel del Ejército y segundo jefe de la plaza de Lérida. Ante el asedio francés a la ciudad por el mariscal Suchet, la guarnición se refugiaba en el castillo situado en el monte de Gardeny, que dominaba la ciudad. Al resultar la situación del castillo insostenible, la Junta de Defensa de la plaza optó por la capitulación, tocándole en suerte a don José Veguer llevar la noticia de la capitulación al campo francés.
Tras la caída de ciudad fue llevado prisionero a Francia. Al finalizar la guerra, estando en Sevilla el 18 de Julio de 1814 presentó a la superioridad un trabajo que denominó Apuntes sobre el modo de establecer un ejército permanente, trabajo que, analizado detalladamente, encontramos que fue tomado en consideración varias veces a través de más de dos siglos (Depósitos de Instrucción, los Centros de Instrucción de Reclutas, Escuelas regimentales etc.). Aunque Veguer denominara a estos apuntes “sencillas ocurrencias”, estas no fueron fruto de la improvisación, sino de un trabajo concienzudo, bien pensado y muy elaborado en todos sus detalles, pues como indica al final de las mismas ya había realizado el desarrollo de cada uno de los puntos en que hacía mención sus propuestas, fruto de la madurez y de la observación adquirida a través de los años propia de un profesional, amplio conocedor del ejército y de su administración.
No figuraba en el Escalafón de Ingenieros de 1815 y siguientes ni en Estado Militar de España de esa época, lo que hace suponer que había muerto o se había retirado.
Fuentes y Bibl.: Archivo General Militar de Segovia (AGMS). Exps. Personales.
E. Torner, “Servicios Militares del Cuerpo de Ingenieros durante la guerra de la Independencia”, en El Cuerpo de Ingenieros del Ejército. Resumen Histórico de su Organización y Servicios durante la Guerra de la Independencia, Madrid, Memorial de Ingenieros, 1908; Estudio Histórico del Cuerpo de Ingenieros del Ejército, Madrid, Establecimiento Tipográfico “Sucesores de Rivadeneyra”, 1911, 2 vols.; J. López Muiños, Algunos aspectos de la Ingeniería Militar española y el Cuerpo Técnico, Madrid, Ministerio de Defensa, 1993; L. M. de Diego Pareja, La Academia de Ingenieros y el Regimiento de Zapadores de Alcalá de Henares (1803-1823), Alcalá de Henares, Institución de Estudios Complutenses, 1999; A. Ferrandis Poblaciones, “El Real Cuerpo de Ingenieros del Ejército en la Guerra de la Independencia. Valencia” y A. Torres Santo Domingo, “El Real Cuerpo de Ingenieros del Ejército en la Guerra de la Independencia: Cataluña”, en A. Quesada Gómez (coord.), El Real Cuerpo de Ingenieros del Ejército en la Guerra de la Independencia, 1808-1814, Madrid, Ministerio de Defensa, 2009; L. J. Sanz Balduz, Los Puentes y los Ingenieros en el sitio de Zaragoza, Zaragoza, Asociación Cultural “Los sitios de Zaragoza”-Ayuntamiento de Zaragoza, 2013; R. Fernández López, La Academia de Ingenieros y los Zapadores-Minadores en Alcalá (1803-1823), Letrame, 2019.
Juan Carrillo de Albornoz y Galbeño