Carderera y Potó, Mariano. Huesca, 1.X.1816 – Madrid, 15.I.1893. Pedagogo y escritor.
El pedagogo y destacado miembro de la administración educativa de su tiempo, nació en el seno de una familia oscense a comienzos del siglo xix, el 1 de octubre de 1816.
Su vida transcurrió en Huesca, Barcelona y Madrid, ciudad esta última donde falleció el 15 de enero de 1893. Realizó estudios de Filosofía, tres cursos con el grado de bachiller, y seis de Teología en los años escolares de 1829 a 1837, en la Universidad Literaria de Huesca. Siguió estudios privados, a su costa, de varios idiomas como francés, alemán, italiano e iniciación del inglés. En la Universidad de Barcelona estudió matemáticas, ampliación de la Física, Química, Mineralogía, Botánica, Zoología y lengua griega.
Fue alumno pensionado por la Diputación Provincial de Huesca para cursar estudios en la Escuela Normal Central de Maestros de Madrid durante los cursos 1839-1841, escuela que había sido recientemente fundada por el médico liberal Pablo Montesino. A su vuelta a Huesca, trabajó por la creación de la Escuela Normal de Maestros, que se inauguró el 5 de marzo de 1842, para la que había sido nombrado director por la Comisión Superior de Instrucción Primaria el 1 de mayo de 1841.
Debido al excelente papel desempeñado en la creación y puesta en marcha de la normal oscense (1842-1847), según consta en la prensa de su tiempo, se le nombró director de la Escuela Normal de Barcelona el 24 de agosto de 1847. El reconocimiento a la labor del pedagogo oscense en Cataluña se plasmó en el regalo de una escribanía, que puede contemplarse en el Museo de Huesca. Tal como consta en la descripción publicada en Anales de Primera Enseñanza: “En las dos urnas que forman parte de la escribanía están esculpidos los nombres de los eminentes pedagogos Quintiliano, San José de Calasanz, Platón, De Gerando, Basedow, Pestalozzi, Lancaster, Jacotot, Niemeyer, Vives, Montesino, Carderera”, demostrando una alta valoración al colocar su nombre junto a los autores más destacados del mundo de la pedagogía.
Tras permanecer dos años en la Normal barcelonesa, se trasladó a Madrid al ser nombrado inspector general de Instrucción Primaria por Real Orden de 26 de mayo de 1849. Fue uno de los seis primeros inspectores generales nombrados como aplicación del Reglamento de marzo de 1849, cargo que simultaneó con el de vocal de la comisión auxiliar del gobierno de Primera Enseñanza. Años más tarde, fue también secretario (1866) y consejero (1877) del Real Consejo de Instrucción Pública.
El conocimiento de varios idiomas le facilitó visitar los más acreditados institutos de enseñanza en Francia, Alemania, Bélgica, Suiza y Austria. Como consecuencia de sus inquietudes por conocer las tendencias y corrientes educativas coetáneas, visitó la Exposición Universal de Londres (1862) para conocer la pedagogía lúdica froebeliana y a su vuelta publicó La Pedagogía en la Exposición Universal de Londres de 1862. Asistió también a la de París de 1867 participando como jurado en dicha exposición y en la vienesa de 1873. Por último, asistió al Congreso de Maestros de París que se celebró en 1881, aunque en estos viajes no se limitó a ser mero representante de la administración educativa sino que aportó sus obras pedagógicas más representativas, recibiendo algunos premios por dichas publicaciones. El nombre de Carderera también estuvo vinculado a varias revistas de educación. Así, Joaquín Avendaño y él respaldaron la Revista de Instrucción Primaria (1849-1851) y La aurora de los niños (1849-1854); fue el único redactor de Anales de la educación (1854-1858) y aconsejó a Anales de la enseñanza. Revista de las escuelas y de los maestros (1875-1880).
Su trayectoria profesional se plasmó en un trabajo ininterrumpido que abogaba por elevar el estatus socioeconómico, cultural y profesional del maestro. Carderera atribuía un gran valor a la formación de los profesionales de primera enseñanza y les reconocía el poder de cambio social. Al interesarse por conocer nuevas experiencias educativas en el extranjero demostró una actitud abierta y receptiva hacia la innovación educativa y se mostraba partidario de una metodología activa e intuitiva. Sintonizando con los pensadores educativos más relevantes de su época, recomendaba la incorporación de recursos didácticos como salidas al campo, visitas a fábricas o excursiones a pie, que más adelante se incluirían como uno de los supuestos metodológicos de la Institución Libre de Enseñanza. A pesar de no estar vinculado a este movimiento filosófico fue vicepresidente del Congreso Nacional Pedagógico y publicó el Discurso resumen de las sesiones leído en la clausura del Congreso Nacional Pedagógico el 5 de junio de 1882.
En su faceta de escritor, Carderera respondió a la demanda socioprofesional de su época. Se documentó en la literatura pedagógica de lengua francesa y alemana más destacada: Rousseau, Pestalozzi, Fröebel, De Gérando, Niemeyer, Braun, Matter, Locke o la Pädagogische Real Enzyklopädie (1852) entre otros y la reflejó en su propia obra. También hay que destacar la especial influencia que sobre él ejerció su maestro Pablo Montesino.
Entre sus escritos son de especial relevancia: el Diccionario de educación y métodos de enseñanza en cuatro tomos (1854-1858), que revisó en la segunda edición (1858-1877) y en la tercera (1883-1886); los dos volúmenes de Pedagogía Práctica (1875) y Disciplina escolar como medio indirecto de educación y enseñanza (1890). En concreto, el diccionario supuso una gran aportación al campo de la pedagogía científica española de su época y se adelantó varios años al Dictionnaire de Pedagogie de F. Buisson. Para su realización se inspiró en la Pädagogische Real Enzyklopädie (1852) que le sirvió de guía, ya que además de la similitud en la estructura hay determinados vocablos que coinciden con bastante fidelidad.
Obras de ~: con J. Avendaño, Curso elemental de Pedagogía, Madrid, A. Vicente, 1850; con J. Avendaño, Método completo de lectura, Madrid, Imprenta de A. Vicente, 1851; Guía del Maestro de Instrucción primaria o estudios morales acerca de sus disposiciones y conducta, Madrid, Imprenta de A. Vicente, 1852 (ed. con apénd. “La educación de la mujer”, Madrid, Imprenta de Gregorio Hernando, 1884); Diccionario de educación y métodos de enseñanza, Madrid, Librería de G. Hernando, 1854-1858, 4 vols.; con F. de A. P., La ciencia de la mujer al alcance de las niñas, Madrid, Imprenta de A. Vicente, 1855; Apuntes sobre la educación elemental del sordomudo, Madrid, Librería de G. Hernando, 1859; Principios de educación y métodos de enseñanza, Madrid, Imprenta de Sordomudos y Ciegos, 1860; Nociones elementales de industria y comercio, Madrid, V. Hernando, 1861; “Vida y obras de Pestalozzi”, en Revista Anales de primera enseñanza (1861-1864); La Pedagogía en la Exposición Universal de Londres de 1862, Madrid, Imprenta de Victoriano Hernando, 1863; Pedagogía Práctica. Curso completo de lecciones y ejercicios para las escuelas, Madrid, Imprenta de V. Hernando, 1874-1875, 2 vols.; Epítome de los principios de educación y métodos de enseñanza, Madrid, Imprenta de G. Hernando, 1881; Discurso resumen de las sesiones leído en la clausura del Congreso Nacional Pedagógico el 5 de junio de 1882, Madrid, Librería de Gregorio Hernando, 1882; La disciplina escolar como medio indirecto de educación y enseñanza, Madrid, Librería Hernando, 1884; con R. Buldú (adapts.), La Biblia infantil o Lecciones entresacadas del Antiguo y Nuevo Testamento, Barcelona, Hijos de Paluzie, 1906.
Bibl.: M.ª J. Vicén Ferrando, Mariano Carderera. Su pensamiento y su aportación pedagógica, tesis doctoral microfichada, Barcelona, Servicio de Publicaciones, Universidad, 1992; “Mariano Carderera y las exposiciones universales decimonónicas”, en Historia de la Educación. Revista Interuniversitaria, 11 (1992), págs. 231-240; B. Delgado Criado, “M. Carderera y Potó”, en Historia de la Educación en España y América, vol. iii. La Educación Contemporánea (1789-1975), Madrid, SM, 1994, págs. 342-347; M.ª J. Vicén Ferrando y D. Aísa Moreau, Fuentes documentales de la obra pedagógica de Mariano Carderera y Potó, Huesca, Escuela Universitaria del Profesorado de EGB, 1995; M.ª J. Vicén Ferrando, “El pensamiento pedagógico de M. Carderera y Potó”, en Revista Interuniversitaria de formación del profesorado, 23 (1995), págs. 189-205; “Influencias de J. E. Pestalozzi en la pedagogía de M. Carderera y Potó”, en Revista Complutense de Educación, 9/8 (1998), págs. 209-223; Mariano Carderera y Potó. Orígenes y desarrollo de su pensamiento pedagógico, Huesca, Instituto de Estudios Altoaragoneses, 1999.
María Jesús Vicén Ferrando