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Tomás de San Martín

Biografía

San Martín, Tomás de. Palencia, 7.III.1482 – Lima (Perú), 1554. Religioso dominico (OP), fundador de la Universidad de San Marcos de Lima, profesor en el Convento de San Pablo (Andalucía), lector de Artes y Teología.

Pasó a Indias en 1537. De vuelta a España fue nombrado regente de la Orden de Santo Domingo. Al retornar nuevamente a la Península, se unió a fray Reginaldo de Pedraza que buscaba religiosos, y acompañó a los conquistadores de Perú e inició la evangelización. Fue albacea de Francisco Pizarro y consejero de Vaca de Castro y Pedro de la Gasca. Después de un largo trayecto llegó hasta la ciudad incaica del Cuzco. Desde aquí siguió sin descanso a Chuchito y después a Charcas. Este período de su labor evangelizadora debe considerarse uno de los primeros esfuerzos dominicos, por promover de manera pacífica la fe de Cristo entre los naturales. Ya en Lima, fue nombrado sucesor de fray Juan de Olías (1539), como superior de la Orden Dominica del Perú. Pizarro les donó unas tierras en Limatambo y Palpa. El 1 de mayo de 1543 el Emperador envió a cada uno de los superiores religiosos de Indias —entre ellos el provincial de Perú fray Tomás de San Martín— una carta con varios ejemplares de las Leyes Nuevas para que se repartan entre los conventos, y traduzcan a las lenguas de los indígenas. Se enviaron a los religiosos antes que a las autoridades civiles, seguro que aconsejado por Las Casas debido a las discusiones que causó la perpetuidad de la encomienda.

Cuando iniciaba la construcción de su Convento en Lima, recibió autorización para fundar la provincia de San Juan Bautista del Perú (4 de enero de 1540). Dicho permiso llegó acompañado del nombramiento de provincial. Después le fue autorizado fundar los Conventos dominicos de Arequipa y Huanuco. Fray Tomás envió a los predicadores dominicos por casi todo Perú, disputando el poder y control sobre los indios que tenían los encomenderos. Con fray Tomás de San Martín, los religiosos empezaron a tomar libertad en la catequización y el lascasismo surgió como una alternativa legal y doctrinal al abuso encomendero. Según Tauro del Pino, posteriormente “Vaca de Castro dio a fray Tomas poder para pedir al Cabildo de Lima le reconociese como gobernador. Fray Tomas pasó a unirse con Vaca de Castro y lo encontró no lejos de Lima. Vaca de Castro volvió a Lima donde fue bien recibido y luego emprendió de nuevo el camino de la sierra, llevando consigo a fray Tomás. Después, fray Tomas recibió una Real Cedula del Emperador en que este le pedía apoyase las Leyes Nuevas y ayudase a Blasco Núñez. Fray Tomas lo hizo y logró convencer a los vecinos de Lima para que lo recibiesen. En 1544 fray Tomás celebró el capitulo y eligió definidores. En setiembre fue depuesto Núñez vela y entró Gonzalo Pizarro en Lima. El arzobispo y fray Tomás recibieron el encargo de pasar a España para que le diesen a Gonzalo la investidura de Gobernador. En Panamá se plegó a La Gasca. Después de Jaquijahuana, La Gasca vino a Lima y fue recibido con grandes aplausos”. En 1548 fray Tomás celebró en Cuzco el segundo capítulo de su Orden, donde se autorizó la iniciativa de fundar un Estudio General en el Convento Dominico del Rosario en Lima. El año 1549 el Cabildo de Lima nombró procuradores o apoderados de la ciudad ante el Emperador a fray Tomás de San Martín y Gerónimo de Aliaga para gestionar la fundación de una Universidad. Dice la partida de nombramiento de los procuradores, del 10 de diciembre de 1549: “Conformes, todos acordaron que le capitán Gerónimo de Aliaga y el Padre Fray Tomas de San Martín Regente y provincial de la Orden de Santo Domingo destas fuesen a la dicha jornada y que habiéndose hablado de parte de esta ciudad lo habían aceptado, les mandaron llamar a este Cabildo o fecholes relación por esta Ciudad como había determinado los ynbiar en su nombre por procuradores y lo aceptaron y tobieoron por gran merced y por ella besaron á sus mercedes las manos y así quedó con ellos de acuerdo se empezasen a azer las ynstrucciones y poderes que avían de llevar e con esto se salieron fuera del cabildo”.

Fray Tomas viajó a Alemania y se entrevistó con Carlos V. Se dio la Real Provisión de Fundación en Valladolid el 12 de mayo de 1551. Según Antonio de la Calancha, Francisco Pizarro designó un solar para Universidad en Jauja, la ciudad que inicialmente se pensó como capital de la gobernación de Pizarro, llamada la Nueva Castilla. En la fundación de Lima, el 18 de enero de 1535, también se señaló sitio para la Universidad. Se llamó Universidad de Los Reyes, nombre que cambió en 1574, por el del evangelista San Marcos. La Universidad de Lima se constituyó sobre la base del Estudio particular del Convento limeño del Rosario, ordenado en 1548 en la ciudad del Cuzco, por acuerdo de fray Tomás de San Martín, la Gasca y el arzobispo Loayza. O sea, que antes de fundación había clases en el noviciado. El primer local fue el Convento del Rosario, ubicado hasta ahora en el centro de Lima. Tenía el apoyo económico y académico de la Orden Dominica. La inauguración se hizo el 2 de enero de 1553 en el Convento de Santo Domingo, en cuyo local estuvo durante dieciocho años hasta 1571 en que el virrey Toledo la exclaustró. En ese año, podría decirse, se estatizó la Universidad dentro de una concepción política del Estado regalista. Su viaje para gestionar la Universidad también sirvió para volver a reunirse con el padre Las Casas.

Durante la celebración del capítulo general de mayo de 1551 en Valladolid, el padre Las Casas recibió, de manos del propio fray Tomás de San Martín su Relación sobre los ritos y costumbres de los indios del Perú que utilizará luego, en su Apologética Historia. Esta vinculación revela la línea lascasista de la Universidad de San Marcos, que en el siglo xvi dio origen a la primera estatización (secularización) de la Universidad, es decir, la exclaustración que llevó a cabo el virrey Toledo en 1571. El lascasismo de varios frailes dominicos y catedráticos sanmarquinos resultaba sumamente incómodo para la naciente oligarquía limeña y para el mismo virrey Toledo. La oligarquía, atrincherada en el Cabildo de Lima, veía un gran peligro en los lascasistas que impugnaban no sólo la perpetuidad de las encomiendas sino la misma institución, base económica de esos magnates. El virrey, representante del Estado, veía con irritación que los seguidores de Las Casas pusieran en duda el título de posesión de la tierra que se basaba en la bula pontificia de 1493. Aún se discutía la restitución de la soberanía o señorío en los descendientes de los reyes incas. Era un problema candente que terminó con la ejecución del último inca Túpac Amaru, en Cuzco en 1572, en presencia del virrey Toledo. Peor fue cuando se descubrió hacia julio de 1571 un foco de herejía nada menos que en el Convento de Santo Domingo y local de San Marcos. Esto terminó con la ejecución de fray Francisco de la Cruz, prior rector de la Universidad de Lima, en 1576. Hubo altercados entre los frailes dominicos y de otras órdenes y los profesores seglares. El virrey Toledo propició la elección del primer rector laico, el doctor Pedro Fernández de Valenzuela, en 1571.

En 1574 la Universidad de Lima pasó a un local vecino a la iglesia de San Marcelo. Maticorena insiste en que “al contrario de lo que dicen todos los autores, la Exclaustración no fue una ‘reforma’ de signo positivo. Es, desde luego, una reforma administrativa, pero negativa en cuanto la reforma estaba destinada a apagar los últimos ecos del ideario lascasista pro indigenista”. La fundación de San Marcos debe vincularse con el surgimiento de la sociedad criolla. Debe buscarse en las expectativas de ascenso social de los limeños y la exaltación de su identidad regional. La fundación de San Marcos es entonces un símbolo representativo del “criollismo” en formación. Una nueva clase culta y profesional que disputaría los altos cargos a los peninsulares. Este conflicto es el eje del criollismo barroco del siglo xvii que veía en la nueva Universidad y su primacía un motivo de exaltación e identidad. La magnificación de Lima y San Marcos aparece especialmente en los cronistas sanmarquinos del Barroco, por ejemplo en las obras de fray Antonio de la Calancha, fray Diego de Córdova y Salinas, y fray Buenaventura de Salinas y Córdova, Antonio de León Pinelo y se prolonga hasta el siglo xviii con Peralta y Barnuevo. Por los cuatro siglos y medio de vida de San Marcos se ve que fray Tomás de San Martín fue un visionario al gestionar la fundación de la primera Universidad de América por Real Provisión de Valladolid 12 de mayo de 1551, confirmada por la bula del Papa del 25 de julio de 1571. La verdadera cronología de la Universidad en América colonial comienza con la de Lima (mayo de 1551), luego la de México (Real Provisión de Toro, 21 de septiembre de 1551) y Santo Domingo (Real Provisión, 23 de febrero de 1558). Grave error es quitar a San Marcos de Lima la prioridad en América. Algunos autores aducen que es anterior la Universidad de Santo Domingo por una bula papal de 1538, pero estos autores desconocen la legislación de fundación de Universidades, cuya base es el llamado pase regio, Institución que data del siglo xiii, como dice Alfonso García Gallo, Antonio Muro Orejón y los especialistas en Historia del Derecho Español e Indiano. El pase regio es la aprobación del Rey de España, una prerrogativa mayestática y signo del Estado absolutista. Santo Domingo no tuvo este passe regio hasta el siglo xvii, y no en el siglo xvi.

En el siglo xviii hubo un pleito entre las dos Universidades de Santo Domingo que reclamaban la prioridad. Al final el Rey de España dictaminó que a Santo Domingo “le faltaba mi condescendencia y el pase regio de mi Consejo de las Indas” y le prohibió intitularse primaria o más antigua. Ante este definitivo argumento debe recordarse también que al fundar el Rey la Universidad de Santo Domingo en 1558, no menciona fundación anterior ni la bula de 1538. Finalmente, fray Tomás de San Martín fue nombrado obispo de Charcas en 1553, pero falleció antes de tomar posesión del cargo en 1554. El Cabildo de Lima hostilizó en los últimos años a fray Tomás y le prohibió que siguiera en la crítica la encomienda. Incluso le pidió que diera cuenta del dinero que se le dio cuando se le envió comisionado a España con Gerónimo de Aliaga.

 

Obras de ~: Relación de los sacrificios que los indios del Perú hacían a sus dioses en tiempo de cosechas sementear y trabajos públicos sus ritos en los entierros y otras noticias, Valladolid, 1551; Parecer [...] sobre el escrúpulo de si son bien ganados los bienes adquiridos por los conquistadores, pobladores y encomenderos de indias, s. f.

 

Bibl.: C. de Utrera, Universidades de Santiago de la Paz y de Santo Tomás de Aquino y Seminario Conciliar de la Ciudad de Santo Domingo de la Isla Española, Santo Domingo, RD, 1932; L. A. Eguiguren, Diccionario Histórico-cronológico de la Real y Pontificia Universidad de San Marcos y sus Colegios, Lima, Talleres Gráficos Torres Aguirre, 1940-1951, 3 ts.; C. D. Valcárcel, San Marcos, Universidad Decana de América, Lima, Fondo editorial UNMSM, 1968; I. Pérez Fernández, Bartolomé de las Casas en le Perú, Cuzco, Ed. CBC, 1988; M. Maticorena Estrada, San Marcos de Lima Universidad en Decana de América. Una Argumentación Histórico-Jurídica y el Derecho Indiano, Lima, Fondo Editorial UNMSM, 2000.

 

Yovani Soto Villanueva