Blázquez y Delgado Aguilera, Antonio. Almadén (Ciudad Real), 2.III.1859 – Madrid, 14.II.1950. Historiador, geógrafo e intendente militar.
Cursó sus estudios en la Academia de Administración Militar de Ávila, de donde llegó a ser profesor, siéndolo también con posterioridad, y durante muchos años, en la Escuela Superior de Guerra.
Formó parte del selecto grupo de historiadores geógrafos integrados, entre otros, por Ricardo Beltrán y Rózpide, Ángel Altolaguirre, Jerónimo Becker y Abelardo Merino, quienes tanto en la Real Sociedad Geográfica como en la Real Academia de la Historia, dieron reiteradas muestras de erudición y profundos conocimientos de Geografía, Historia y de Geografía histórica.
En su próspera y dilatada vida académica, se distinguió como riguroso investigador, al tiempo que llevó a cabo una importante labor docente. Fue discípulo de Rafael Torres Campos, verdadero impulsor de las enseñanzas de la Geografía desde la normal Central de Maestras, hombre de gran personalidad que estuvo en contacto con la Institución de Libre Enseñanza, y que fue Secretario General de la Sociedad Geográfica de Madrid. Su labor permitió diferenciar la cátedra de Geografía de la de Historia en unos años en los que ambas disciplinas se enseñaban muy dependientes una de otra. Esta circunstancia, sin duda, explica la dualidad investigadora de Antonio Blázquez —historiador y geógrafo—, y aclara su tendencia renovadora que habría de desarrollar en relación con las enseñanzas de la Geografía e Historia.
En efecto, como profesor, Antonio Blázquez impartió clases de Geografía e Historia, sin duda sus disciplinas favoritas, y esta vocación docente le llevó a participar de la renovación pedagógica que se produjo en torno a la geografía en los primeros años del siglo XX. Formó parte de la comisión que reformó y propuso el nuevo plan de estudios de las enseñanzas en las academias militares, y redactó asimismo algunos de los manuales de geografía que se impartirían en dichas academias; entre ellos cabe citar Apuntes de Geografía económica de España, o la Geografía Económica militar de Europa. Puede decirse que su magisterio se materializó en la formación de un selecto grupo de discípulos que dieron testimonio de su profunda dedicación al mundo académico.
El 23 de junio de 1893 fue nombrado académico en Ávila, y el 23 de octubre de 1908 lo fue de número en la Real Academia de la Historia, tomando posesión el 16 de mayo de 1909 en solemne sesión con un discurso que versó sobre la Geografía de España en el siglo xvi; fue contestado por su maestro Ricardo Beltrán y Rózpide.
En la Real Academia de la Historia ocupó los cargos de vocal de la Comisión de Hacienda, y presidente de la de Indias; asimismo, dada su autoridad y rigor científico, fue requerido para la elaboración de diversos dictámenes de naturaleza histórico-geográfica, siendo necesario destacar, en este sentido, que actuó como árbitro en el litigio territorial entre Ecuador y Perú.
Como historiador realizó importantes trabajos sobre las vías romanas, lo que le llevó a cuestionarse la equivalencia de la longitud de las millas y leguas romanas, demostrando que tales medidas diferían de provincia a provincia. La mayor parte de sus numerosos trabajos históricos fueron publicados en el Boletín de la Real Academia de la Historia.
Como geógrafo perteneció a la Real Sociedad Geográfica, formando parte de ese distinguido grupo de profesionales gracias a los cuales el desarrollo de la geografía en España alcanzó importantes niveles de calidad con anterioridad a la Guerra Civil (Bosque, 1992). Fue nombrado bibliotecario a perpetuidad de dicha institución, ocupando el cargo ininterrumpidamente entre 1900 y 1929. Esta circunstancia le permitió tomar parte activa en un organismo —la Real Sociedad Geográfica— que por aquellos años gozaba de gran prestigio y que, a menudo, era solicitado por las diversas administraciones para redactar informes de carácter geográfico-territorial.
Pero sin duda una de sus aportaciones de mayor trascendencia para la geografía fue su labor como traductor. Por su interés y repercusiones en el pensamiento geográfico del momento, destacaron sus traducciones sobre Vidal de la Blache, concretamente de su obra Curso de Geografía (Barcelona, Sucesores de Juan Gili editores, 1916, 6 vols.), traducida y adaptada al español entre 1913 y 1917. En este sentido puede considerarse, junto con Dantín Cereceda, como uno de los introductores de Vidal de la Blache en España, contribuyendo con ello a divulgar los presupuestos de la geografía francesa en nuestro país, muy en especial la corriente posibilista que tanta trascendencia tuvo en el devenir de la geografía europea y española en la primera mitad de siglo XX. De igual manera, sus trabajos sirvieron para poner de relieve la importancia de la región como el marco territorial más adecuado para los análisis geográficos.
Como miembro de la Real Sociedad Geográfica, participó activamente en las tareas científicas programadas por dicha institución. Si bien es verdad que por aquellos años la Real Sociedad Geográfica manifestó una preocupación fundamental por los estudios sobre África, muy en especial a partir del tratado de Algeciras (1904), no es menos cierto que dicha institución también concedió un interés especial —como no podía ser menos— al conocimiento geográfico del pasado español, y es en esta línea en la que han de inscribirse los trabajos de Antonio Blázquez. Así, en 1904 fue nombrado representante, junto con Emilio Bonelli, Ignacio Arce, y Ricardo Beltrán, en las comisiones permanentes de la Unión Iberoamericana nacida en 1880, y que en cierto modo reflejaba la preocupación mostrada por la Real Sociedad Geográfica por el tema iberoamericano, muy en especial tras el Desastre del 98. Con ello, se inauguraba una importante línea de reflexión acerca del futuro de la comunidad de los pueblos iberoamericanos en el siglo xx, que en cierto modo respondía a la idea de formar una mancomunidad de pueblos de habla hispana unidos por lazos históricos, culturales y espirituales.
En esta línea, participó primero en el Congreso Geográfico Hispano-Portugués-Americano de 1892, con un trabajo sobre las exploraciones y estudios geográficos realizados en América, titulado Modernas exploraciones y estudios geológicos y geográficos en México y en la América central y meridional. Del mismo modo también tomó parte en los Congresos Internacionales de Geografía e Historia Iberoamericana celebrados en Sevilla en 1914 y 1921, y en los que se conmemoraron diversos acontecimientos del pasado español en América. En 1914 se conmemoró el IV Centenario del descubrimiento del Pacífico por Vasco Núñez de Balboa; dicho congreso fue patrocinado en origen por la Real Academia de la Historia pero pronto se le unieron diversas instituciones, tales como la Real Sociedad Geográfica, algunos ministerios (Estado, Instrucción Pública, Fomento), la Unión Iberoamericana, etc. La participación hispanoamericana no fue muy abundante, pero sí de gran calidad. En cuanto a la presencia española fue mayoritaria, con veinticinco vocales en el comité ejecutivo, seis de los cuales eran representantes de la Real Sociedad Geográfica: uno de ellos fue Antonio Blázquez.
El Segundo Congreso se celebró en 1921 y en él se conmemoraron el paso del estrecho de Magallanes (1520), el descubrimiento de las islas Marianas y Filipinas (1521) y la llegada a Sanlúcar de Juan Sebastián Elcano (1522). Antonio Blázquez impartió una de las tres ponencias plenarias que sirvieron de base para las posteriores discusiones; su título fue Tres relaciones de tierra y descubrimientos del s. XV (Bosque, 1992 y 2004).
Junto a estos trabajos que se enmarcan en su participación activa como representante de la Real Sociedad Geográfica, escribió numerosos artículos sobre Historia de la Geografía y cartografía española, en especial de los períodos medieval e imperial, en los que incluyó estudios de España en mapas antiguos; entre ellos cabe destacar los de Osorio, Isidoro de Sevilla, Beato de Liébana, mapas árabes y portulanos. De especial interés resulta su estudio sobre los mapas de España en el siglo XVI. Un gran número de sus trabajos puede consultarse en los boletines de la Real Sociedad Geográfica.
La Sociedad Geográfica de París le otorgó, en 1908, la máxima distinción, materializada en el premio Jomard; igualmente fue nombrado miembro de honor de la Sociedad Geográfica de Lima, obteniendo además diversos títulos de honor de sociedades científicas extranjeras así como un buen número de premios y medallas en certámenes y exposiciones nacionales e internacionales. Obtuvo igualmente, la Gran Cruz de San Hermenegildo y la Gran Cruz de Isabel la Católica.
Autor prolífico y fecundo, publicó un importante número de trabajos sobre Historia, Geografía y Geografía histórica. Además de ejercer como prologuista, director o traductor de un gran número de obras, publicó numerosos artículos en la Real Sociedad Geográfica y en el Boletín de la Real Academia de la Historia. La lista de sus trabajos, que supera los ciento cuarenta títulos, justifica por sí misma su acertada actividad científica, así como el incuestionable valor de sus estudios; una tarea que se resuelve en cincuenta y siete años de labor corporativa caracterizada siempre —según testimonio de sus contemporáneos— por el acierto en la investigación y la depurada crítica a que sometió todas sus publicaciones.
Obras de ~: Grecia (estudio geográfico-militar), Madrid, 1878; con J. Lledo, Estudios de Administración comparada, Madrid, Imprenta de Enrique Rubiños, 1881; Bosquejo histórico de la Administración Militar española, Madrid, 1885; La administración militar española, Ávila, 1886; Apuntes de Geografía económica de España, Ávila, 1886; Apuntes de Geografía militar y económico-militar de Europa, Ávila, 1887; Apuntes para la Historia de la provincia de Ciudad Real, Ciudad Real, 1888; Apuntes para las biografías de hijos ilustres de la provincia de Ciudad Real, precedidos del catálogo de libros que se ocupan de su territorio e historia, Ávila, 1888; Romancero de la provincia de Ciudad Real, Ciudad Real, 1888; Juicio histórico-crítico sobre el fratricidio de D. Pedro I de Castilla en los campos de Montiel, Ciudad Real, 1889; Geografía económico-militar de Europa (menos España) y del Imperio de Marruecos, Ávila, 1890; El Clima de España (conferencia), Madrid, 1891; Historia administrativa de las principales campañas modernas, Madrid, 1892; Nuevo estudio del Itinerario de Antonio, Madrid, 1892; Exploraciones geográficas y geológicas en América, Madrid, 1892; La Literatura abulense (conferencia), Ávila, 1894; Apuntes de Estadística, Ávila, 1894; Guía de Ávila o descripción de sus monumentos, Ávila, 1896; La milla romana, Madrid, 1896; Historia de la Administración militar, Madrid, 1897; Historia de la provincia de Ciudad Real, Ávila, 1898; Biografía de Diego de Almagro, Ciudad Real, 1899; Descripción de Iberia de Estrabón, Madrid, 1900; Descripción de España por Abu-abd-Allá-Mohamed al Idrisi, Madrid, 1901; Vía romana de Tánger a Cartago, Madrid, 1902; El itinerario de Fernando Colón y las relaciones topográficas, Madrid, 1904; La Administración Militar en campaña (conferencias), Madrid, 1905; La Mancha en tiempos de Cervantes, Madrid, 1905; Los manuscritos de los comentarios al Apocalipsis de S. Juan por el Beato de Liébana, Madrid, 1906; Historia de la Cartografía española en la Edad Media, Madrid, 1906; La Hitación de Wamba, Madrid, 1907; Geografía de España en el S. xvi, discursos leídos ante la Real Academia de la Historia en la recepción pública del Sr. D. Antonio Blázquez y Delgado Aguilera el día 16 de mayo de 1909, Madrid, 1909; Elogio de D. Pelayo, obispo de Oviedo e historiador de España (discurso), Madrid, 1910; Una joya de la cartografía americana del siglo xvi, Madrid, 1910; El periplo de Himilco. Contestación al artículo de D. Celso García de la Riega, titulado “Oemstrymnis-Ohinsa”, 1911; Estudios de Historia Antigua de Egipto, Madrid, 1912, 2 vols.; La cronología en la Antigüedad clásica, Madrid, 1913; Estudios geográficos e históricos de Marruecos, Madrid, 1913; Pateas de Marsella. Estudio de su exploración del Occidente de Europa, Madrid, 1915; Las Casitérides y el comercio del estaño en la Antigüedad, Madrid, 1915; Instrumento neolítico del corral de Caracuel, Madrid, 1915; Vías Romanas de Valle del Duero y Castilla la Nueva, Memoria de los resultados obtenidos en las exploraciones y excavaciones practicadas en el año 1916, redactadas por los Delegados Directores, Excmo. Sr. D. Antonio Blázquez y Delgado Aguilera y D. Claudio Sánchez Albornoz [...], Memoria de la Junta Superior de Excavaciones y Antigüedades, Campaña de 1916; Vías romanas de Briviesca a Pamplona y de Briviesca a Zaragoza. Memoria de los resultados obtenidos en las exploraciones y excavaciones practicadas en el año 1916, redactadas por los Delegados Directores, Excmo. Sr. D. Antonio Blázquez y Delgado Aguilera y D. Claudio Sánchez Albornoz [...], Memorias de la Junta Superior de Excavaciones y Antigüedades, campaña de 1917; Mapas antiguos adquiridos por la Real Sociedad Bilbaína y un mapa de Juan de la Oliva, Madrid, 1918; Vías romanas de Botos a Mérida.-Mérida a Salamanca.- a Riaca, a Sigüenza.- a Riaca, a Titulcia.- Segovia a Titulcia y Zaragoza al Bearne. Vías romanas de Briviesca a Pamplona y de Briviesca a Zaragoza. Memoria de los resultados obtenidos en las exploraciones y excavaciones practicadas en el año 1916, redactadas por los Delegados Directores, Excmo. Sr. D. Antonio Blázquez y Delgado Aguilera y D. Claudio Sánchez Albornoz [...], Memorias de la Junta Superior de Excavaciones y Antigüedades, Campaña de 1918; Vías Romanas de Albacete a Titulcia, de Aranjuez a Toledo, y de Ayamonte a Mérida. Vías romanas de Briviesca a Pamplona y de Briviesca a Zaragoza. Memoria de los resultados obtenidos en las exploraciones y excavaciones practicadas en el año 1916, redactadas por los Delegados Directores, Excmo. Sr. D. Antonio Blázquez y Delgado Aguilera y D. Claudio Sánchez Albornoz [...], Memorias de la Junta Superior de Excavaciones y Antigüedades, Campaña de 1920-1921; Vías de Sigüenza a Zaragoza, de Alhambra a Zaragoza, de Bierzo a Lugo, de Lugo a Betanzos, de Betanzos a Padrón y de Padrón a Lugo, Vías romanas de Briviesca a Pamplona y de Briviesca a Zaragoza. Memoria de los resultados obtenidos en las exploraciones y excavaciones practicadas en el año 1916, redactadas por los Delegados Directores, Excmo. Sr. D. Antonio Blázquez y Delgado Aguilera y D. Claudio Sánchez Albornoz [...], Memorias de la Junta Superior de Excavaciones y Antigüedades, Campaña de 1921-1922; Las costas de Marruecos en la Antigüedad, Madrid, 1921; “Un nuevo relato de la expedición de (la Armada de) García (Jofre) de Loaysa”, en Segundo Congreso de Historia y Geografía Hispanoamericanas, Sevilla, 1921; Vías romanas de Sevilla a Córdoba por Antequera, de Córdoba a Cástulo por el Carpio, de Fuente la Higuera a Cartagena, a Cástulo, Vías romanas de Briviesca a Pamplona y de Briviesca a Zaragoza. Memoria de los resultados obtenidos en las exploraciones y excavaciones practicadas en el año 1916, redactadas por los Delegados Directores, Excmo. Sr. D. Antonio Blázquez y Delgado Aguilera y D. Claudio Sánchez Albornoz [...], Memorias de la Junta Superior de Excavaciones y Antigüedades, Campaña de 1922-1923; Exploraciones en las vías romanas de Bergido a Artúrica y de Cataluña, Valencia y Jaén. Vías romanas de Briviesca a Pamplona y de Briviesca a Zaragoza. Memoria de los resultados obtenidos en las exploraciones y excavaciones practicadas en el año 1916, redactadas por los Delegados Directores, Excmo. Sr. D. Antonio Blázquez y Delgado Aguilera y D. Claudio Sánchez Albornoz [...], Campaña de 1923-1924; Avieno. Hora marítima, ed. crítica y estudio geográfico, Madrid, Real Sociedad Geográfica, 1923; A propósito de la Crónica de Alfonso III. (Contestación a D. Zacarías García Villada), El Escorial, Imprenta del Real Monasterio, 1928; Lucha por la verdad. Calzada romana de Astorga a Pamplona, La Coruña, 1930.
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Pilar Almoguera Sallent