Estrabón. Amaseia del Ponto (Grecia), 64-63 a. C. – 20 a. C. Historiador y geógrafo.
Pertenecía a una familia aristocrática, cuyos antepasados fueron muy honrados por los reyes del Ponto, Mitrídates V (150-120 a. C.) y VI (120-63 a. C.) y por el general romano Lúcullo. Fue discípulo en Nisa, Caria (Asia Menor) de Aristodemos, y en el 44 a. C. de Tirannión y de Xenarcos de Seleucia en Roma. Vivió en Roma en los años 31 y 7 a. C. En el 29 a. C.
hizo viajes de estudio o de placer por Asia Menor y por Corinto. En el año 25-24 a. C., en compañía del prefecto M. Aelio Gallo, marchó a Syene, en la frontera de Etiopía y del Mar Rojo. En una fecha desconocida, visitó Armenia y Siria. Entre los años 27 y 7 a. C. redactó los Comentarios históricos, y en el año 18 la Geografía, como complemento de su publicación anterior.
Estrabón considera que la Geografía hace conocer el mundo habitado, y que es no menos educadora que la Historia, que estudia la vida humana en el tiempo, y la Geografía, en el espacio. Para obtener todo el provecho posible, es necesario tener hábito de hacer una reflexión filosófica. Para la redacción de la Geografía, debe hacerla un hombre que tenga costumbre, a la vez, de lo divino y de lo humano. Necesita una multiplicidad de conocimientos. El conocimiento, por definición, es filosófico. El fin que se propone Estrabón (I, 1, 23), lo señala al término de su primera introducción, la Geografía debe ser de interés general y servir al individuo culto y al pueblo, al igual que en nuestra obra de Historia. Por hombre culto entiende el geógrafo de Amaseia, un hombre que, lejos de ser un hombre totalmente inculto, ha recibido la formación corriente de los hombres libres, y lo aplica a la filosofía. El fin que se propone Estrabón, es ayudar al hombre de acción a mejor comprender el escenario de su actuación, para mejor conocer los medios de hacer feliz al pueblo, actor de los acontecimientos. No parece que se dirija su obra a los dirigentes del Imperio Romano, a los gobernantes ni a los generales. Posiblemente, redactó el geógrafo su Geografía en Roma por presiones de sus amigos romanos. Otros investigadores defienden que Estrabón ha escrito su obra en su ciudad natal, sugerencia de su amigo, rey del Ponto, Pithodoris. Sus fuentes son escritores griegos, no los latinos, o que escribe para un público griego. También se ha sugerido que Estrabón pretendió ser leído por los griegos y apreciado por los romanos. Igualmente, se ha supuesto que compuso su obra por sugerencia de Augusto. Posiblemente, Estrabón, al escribir su Geografía, pensaba en todo el mundo culto, romano y griego.
Estrabón, antes de redactar su obra, se informó directamente de los pueblos de los que iba a hablar. Recorrió gran parte de las regiones de Italia, el Lazio, Campania, Córcega y Cerdeña. Visitó Cirene. Estuvo mucho tiempo en Alejandría. Remontó con su amigo Aelio Gallo el Nilo, hasta Philae. Se familiarizó con los problemas que la Geografía de Egipto planteaba al visitante. Gran parte de su información la obtuvo de la tradición oral. La información sobre Arabia Feliz se la proporcionó Aelio Gallo, y sobre la India, los comerciantes de Alejandría; sobre África Cn. Pisón, que fue gobernador allí; sobre Petra, su amigo Atenodoro, que permaneció algún tiempo en la ciudad.
La Geografía se basa, en gran parte, en los escritos de sus predecesores, por lo menos de los que considera dignos de crédito en la materia. Utilizó, igualmente, autores modernos. Entre los autores antiguos, consultó a Hecateo de Mileto, a Eudoxio, a Anaxandro, a Dicearco y a Éforo (I, 1, 1). Entre los escritores recientes menciona a Eratóstenes, a Posidonio, a Hipparco, a Polibio y a otros (I, 2, 1). En opinión de Estrabón, sólo la Geografía de Eratóstenes merece ser considerada como tratado científico en la descripción de la India. A través de Eratóstenes, Estrabón conoció las obras de Anaxandro, de Hecateo, de Dicearco, de Eudoxo de Cnido, de Piteas, los historiadores de la India, como Deimacos, Megástenes, Nearco, Onesicrito, Aristóbulo y Timóstenes. De Posidonio leyó, por lo menos, sus obras sobre el Océano, las Historias y la Historia de Pompeyo. La fuente más importante para Hispania y para Galia es Posidonio, que vino a Cádiz a estudiar el fenómeno de las mareas, y escribió sobre ellas. Estrabón extractó largamente la descripción de las minas del sur de Hispania, citándolo expresamente. A través de Posidonio conoció a Éforo, a Eratóstenes, a Polibio y a Artemidoro, y recibió preciosas informaciones sobre el Ponto Euxino. El pensamiento de Posidonio ha influído en los juicios que da Estrabón sobre los filósofos, los físicos, como Estratón, Trasialces y Aristóteles, y sobre los historiadores, como Éforo, Teófanes de Mitilene y Metrodoro de Scepsis. Con Polibio, la deuda es grande, no sólo en la recogida de materiales, sino en el método de comprender y de presentar la historia.
Para Hispania, los autores consultados por Estrabón son Polibio, Posidonio, Artemidoro, Asclepíades, todos los cuales la visitaron y escribieron sobre ella, y Eratóstenes. También se informó en gentes que habían participado en las Guerras Cántabras, en su descripción de los pueblos del norte. A Polibio se debe la crítica que hace Estrabón a Piteas, las noticias sobre los viajes de Ulises a Hispania y la descripción de Italia. Fuente importante para Estrabón, principalmente en lo referente a Hispania y Galia, también para Egipto y Asia Menor, es el tratado de Geografía, escrito a modo de periplo, de Artemidoro de Éfeso.
En la discusión sobre el valor de Homero como fuente histórica, citado por Estrabón al referirse a Hispania varias veces, el geógrafo menciona a Aristarco de Crates.
Para la descripción de Grecia, una fuente importante es Apollodoro. Las interpretaciones de los viajes de Menelao, al que Estrabón hace llegar varias veces hasta Hispania, proceden del gramático contemporáneo, que había recogido las opiniones de los autores anteriores, Aristónicos. Ha consultado, generalmente, las Milthridatica de Teófanes de Mitilene, compañero de Pompeyo; las Parthica de Apollodoro de Artemisa, coetáneo de Estrabón; a Demetrios de Scepsis, especialista de la Tróade; a Atenodoro de Tarso, contemporáneo también de Estrabón, que se especializó en problemas científicos. Leyó al compilador alejandrino Timágenes y la corografía de Vipsania Agrippa; Estrabón se sirvió de varias obras de síntesis, como la Geografía de Eratóstenes, las tres obras de Posidonio, el libro XXXIV de las Historias de Polibio y la Geografía de Artemidoro. El resto de su información procede de los tratados históricos referentes a países concretos, o a generales que participaron en las guerras.
La Geografía de Estrabón es una síntesis de los conocimientos geográficos de la época de los emperadores Augusto y Tiberio. A Hispania dedica el libro III; a Galia y Britania, el IV; a Italia y Sicilia, los V y VI; al norte de Europa, Epiro, Macedonia y Tracia, el VII, y a Grecia septentrional y a las islas, el VIII y el IX.
El libro XI se consagra al Tauro, a Partia, Media y Armenia; a Asia Menor, los libros XII al XV; a la India y a Persia, el XV; al Mediterráneo y al Mar Rojo con Egipto el XVI.
Estrabón consideró que su obra era de interés general. Era, en su opinión, una obra más de carácter político que científico. Debía servir al interés de los gobernantes. Las particulares físicas y atmosféricas explicadas son, según el geógrafo, en gran parte, la vida y el comportamiento de sus habitantes, sus tradiciones y su manera de vivir. Estrabón recoge, frecuentemente, muchos datos de geografía histórica, de etnografía, descriptivos, de carácter artístico, y sobre el gobierno de los países. Intercala el geógrafo descripciones regionales. La Geografía de Estrabón es, en su conjunto, original e importante. Se detiene en noticias de interés económico y humano, como hace muy frecuente en el libro III. Esta característica diferencia la Geografía de Estrabón de la obra de Eratóstenes, que se fija más en la geografía matemática y en hipótesis geológicas. También se distingue de los periplos, como los de Eutimenes, de Ps. Escilax, de Polibio, de Eudoxo de Cícico, etc. La Geografía de Estrabón es un buen manual para personas cultas, a las que suministra un buen conocimiento del mundo conocido.
Sin embargo, la obra de Estrabón, en los detalles, no aparece siempre como una síntesis coherente. A veces produce la impresión de no estar rematada y de ser contradictoria, pero es la única suma de los conocimientos de su tiempo. Muchos de los escritos consultados se han perdido. De ellos sólo quedan las síntesis o referencias recogidas por Estrabón, como en lo referente a Hispania. Es un esfuerzo original de todo lo conocido sobre la geografía, la física y la matemática, y sobre las descripciones de las regiones. Estrabón se interesó como lo hizo al tratar de Hispania, en todas las formas de vida, en la economía, en la etnología, en las características climáticas y físicas. Recoge datos preciosos sobre los orígenes de los pueblos y sobre la fundación de las ciudades.
El libro III, dedicado a Hispania, es uno de los mejor elaborados. Se publicó en el año 17 o 18. El plan que sigue en la descripción de los pueblos, corresponde a la situación anterior a la conquista romana, no a la división administrativa de tiempos de Augusto y de Tiberio. Tanto Posidonio como Estrabón ordenaron la materia según los conjuntos políticos y étnicos de la etapa prerromana. La división del libro III es muy sencilla: Turdetania, Lusitania, Celtiberia, el norte y las islas. Las observaciones etnológicas marcan los límites de los capítulos. No se sigue la división climatológica, norte frío y templado el meridional.
Los tres primeros párrafos del capítulo primero sirven de introducción. El geógrafo señala en ellos las características generales y la forma y división de Hispania.
A Estrabón remonta comparar la forma de Hispania con una piel de toro. Concibe todo el territorio, desde el límite de Hispania y la Galia, como una unidad, si bien, con diferentes pueblos, culturas, economías y formas de gobierno. Desde el párrafo cuarto al quince del capítulo, describe Turdetania comenzando por la costa, siguiendo una descripción heredada de los geógrafos antiguos y de los periplos. El capítulo III está dedicado a Lusitania, según el mismo esquema. En el capítulo IV se describe Celtiberia, partiendo del litoral mediterráneo. El capítulo V se dedica a las islas, principalmente las Baleares, y a los fenómenos marítimos que se observan en Cádiz, las mareas.
El libro III de la Geografía de Estrabón tiene un fuerte carácter etnográfico, siguiendo a Posidonio, que se había fijado en las relaciones de las costumbres con el clima. La economía, la geofísica, la climatología y la hidrografía ocupan un lugar importante en el libro III.
Se ha propuesto que a Posidonio remonte el esquema siguiente: Capítulo 1. 2-3. Morfología de Hispania.
4-9. Descripción de la costa de Turdetania. La disputa con Artemidoro sobre el cabo de San Vicente.
Capítulo 2. 1-9, 11 y 14. Descripción de Turdetania, excepto las observaciones sobre César y Pompeyo.
Capítulo 3. 1-8. Descripción de Lusitania, salvo una reflexión de Estrabón al final.
Capítulo 4. 1-19. Descripción de Celtiberia, con una reflexión sobre la pacificación de Hispania. Informaciones sobre César y la administración imperial.
Capítulo 5. 1-11. Descripción de las islas Baleares, de Cádiz, de las Casitérides, de la actuación de L. Cornelio Balbo en Cádiz en los años 44-43 a. C., de la disputa de Estrabón con Posidonio, que redactó su obra después de la terminación de la guerra de Sertorio, en el año 72 a. C.
Se ha supuesto que Estrabón conoció el pensamiento de Asclepíades de Mirlea, de Artemidoro, de Polibio, de Éforo y de Eratóstenes a través de Posidonio.
La unidad de estilo y la lógica del desarrollo de los sucesos parecen avalar esta suposición. La descripción de Celtiberia debe remontar a Polibio, que la conocía directamente. A una fuente de información romana, C. Asinio Pollión, se ha propuesto que se deban:
Capítulo 1. 8. Fundación de Iulia Ioza.
Capítulo 2. 8. Muerte de los hijos de Pompeyo.
Capítulo 3. 15. Mención de los latinos en Hispania.
Capítulo 4. 9. Itinerario de César a Munda.
Capítulo 4. 10. Derrota de Afranio y Petreyo, y combates con los lacetanos.
Asinio Pollión escribió una historia de las guerras civiles.
Un tercer grupo de informaciones se refiere a la época de Augusto y de Tiberio, y a la obra de Augusto en Hispania.
Capítulo 2. 1. Fundación de la colonia Augusta en Emérita.
Capítulo 2. 15. Fundación de colonias augusteas.
Capítulo 3. 8. Pacificación de los cántabros.
Capítulo 4. 5. Pacificación de Celtiberia.
Capítulo 4. 9. Corrección del trazado viario del sureste.
Capítulo 4. 10 y 13. Fundación de Caesaraugusta.
Capítulo 4. 19 y 20. Administración de Augusto.
Capítulo 5. 3. Censo imperial. Este último dato puede fecharse en el año 14. Las restantes noticias serían anteriores al año 1.
Estrabón señala que parte de sus fuentes se deben a autores que visitaron Hispania, como Posidonio para Turdetania, Artemidoro para las costas, y Asclepíades de Mirlea también para Turdetania. Para valorar más sus fuentes, puntualiza que Artemidoro visitó el promontorio sagrado, cabo San Vicente; Posidonio, Cádiz; Asclepíades, Turdetania; y Polibio las minas de Cartagena en al año 147 a. C., y Celtiberia en el año 151 a. C. La información sobre Galicia, Lusitania y parte de Celtiberia puede proceder de testimonios que conocen estas regiones, con la expedición de Bruto Galaico (138-136 a. C.) y de la guerra contra Viriato (155-136 a. C.). Asinio Pollión recorrió el valle del Guadalquivir y la cordillera bética. Testigos oculares visitaron casi toda Hispania. Sólo la costa comprendida entre el cabo San Vicente y Finisterre y la costa cántabra, quedó fuera de estas visitas. Posidonio, que obtuvo su información principalmente de Polibio, de Asclepíades de Mirlea, de Artemidoro y de Asinio Pollión, apenas se refiere a las Islas Baleares, pues sus fuentes no debieron ocuparse de ellas.
El texto de la Geografía de Estrabón ha llegado en muy mal estado. Los dos mejores manuscritos se encuentran en París. Uno se fecha en el siglo xi, y sólo contiene los nueve primeros libros. El segundo, de los siglos xiii y xiv, tiene diecisiete libros. Una copia de 1423, con los diecisiete libros, se guarda en la biblioteca de El Escorial.
Durante el Renacimiento se imprimió varias veces el texto: en 1471 en Roma y en 1578 en París. La edición moderna, ya con buen aparato crítico, se publicó en los años 1844-1852 en Berlín. En el año 1856, se fecha en París una edición acompañada de mapas. A estas ediciones han seguido otras varias en Alemania, Francia y Estados Unidos.
La Geografía de Estrabón fue conocida y comentada en España durante el Renacimiento, ya traducida directamente, ya a través del latín. En 1787, Juan López tradujo el libro III. En 1836, Miguel Cortés introdujo en su Diccionario geográfico-histórico de España Antigua la versión castellana. En 1900, A. Blázquez publicó otra traducción. Las versiones más usadas en el siglo xx se deben a A. Schulten, a A. García y Bellido, a G. Aujac, a F. Lasserre, a I. Granero, a A. Roig, a J. Vela, a J. G. Ramón, a J. G. Blanco, a M. J. Meana, a F. Piñero, a J. J. Torres y a M. P. de Hoz.
Bibl.: A. Schulten, Estrabón. Geografía de Iberia, Barcelona, Librería Bosch, 1952; F. Lasserre, Strabon. Geographie, t. II, París, Les Belles Lettres, 1966; G. Aujac, Strabon et la science de son temps, París, Les Belles Lettres, 1966; Strabon. Geographie. Tome I-Ire partie, París, Les Belles Lettres, 1969; I. Granero y A. Roig, Estrabón. Geografía. Prolegómenos, Madrid, Aguilar, 1980; J. M.ª Blázquez, Urbanismo y sociedad en Hispania, Madrid, Istmo, 1991, págs. 11-145; J. G. L. Ramón y J. G. Blanco, Estrabón. Geografía. Libros I-II, Madrid, Gredos, 1991; M. J. Meana, F. Piñero, Estrabón. Geografía. Libros III- IV, Madrid, Gredos, 1992; A. García Bellido, España y los españoles hace dos mil años, según la Geografía de Estrabón, Madrid, Espasa Calpe, 1993; J. Mangas, D. Plácido, La Península Ibérica prerromana de Eforo a Eustacio, Madrid, Fundación de Estudios Romanos, 1999, págs. 626-680; C. Andreotti, Estrabón en Iberia: Nuevas perspectivas de Estudio, Málaga, Universidad, 1999; J. Vela, Estrabón. Geografía. Libros V-VII, Madrid, Gredos, 2001; J. J. Torres, Estrabón. Geografía. Libros VIII-X, Madrid, Gredos, 2001; M. P. de Hoz, Estrabón. Geografia. Libros XI-XIV, Madrid, Gredos, 2003.
José María Blázquez