Carrasquer Fos, Miguel. Sueca (Valencia), 11.V.1881 – Calafell (Tarragona), 30.VII.1936. Religioso de la Orden Hospitalaria de San Juan de Dios (OH), mártir y beato.
Julián Carrasquer era hijo de Enrique Carrasquer Bruguera y Vicenta María Fos Ferrando, matrimonio muy cristiano, de santas costumbres y labradores de muy buena posición económica. Fue bautizado al día siguiente de nacer en la parroquia de san Pedro Apóstol, de Sueca, y recibió el nombre de Miguel. A los diez años, en el mes de mayo de 1891, en la misma parroquia de san Pedro, hizo la primera comunión; desde entonces su asistencia a los sacramentos y prácticas cristianas en la parroquia era muy asidua, estando afiliado también a distintas cofradías y asociaciones: Nuestra Señora de Sales, muy venerada en Sueca, del Rosario, del Carmen, Sagrado Corazón de Jesús, de las Ánimas del Purgatorio, y cumplía devotamente las obligaciones provenientes de las mismas. Hizo sus estudios de niño y muchacho en un colegio particular. Su relación con la parroquia y los sacerdotes era muy buena. Durante la semana se dedicaba a su trabajo en el cultivo de los campos y en los días de fiesta, después de las prácticas religiosas, visitaba a pobres y enfermos particulares y en centros benéficos; así, desde 1901 eran frecuentes sus visitas al Asilo-Hospital San Juan de Dios de La Malvarrosa, Valencia, donde trataba con los niños y religiosos, ayudándoles incluso en la enfermería y a dar la comida a los enfermos. Durante estas visitas fue germinando en su interior la vocación hospitalaria.
Con algo más de treinta y cinco años, solicitó y obtuvo el ingreso en la Orden, a la que se incorporó en Ciempozuelos el 26 de febrero de 1917. Su madurez y buena disponibilidad favorecieron sus primeros pasos y tomó el hábito el 18 de julio del mismo año. Al final de ellos, más seguro y convencido, el 18 de enero de 1920, con humildad y ejemplaridad admirables, dio inicio al noviciado canónico en Carabanchel Alto y siguió todo el proceso de formación, sintiéndose satisfecho, edificando a los demás por su observancia y fervor. Un año después, el 19 de enero, emitió la profesión de los votos temporales por un trienio, y el 19 de enero de 1924 hizo la profesión de los votos solemnes. Fue nombrado maestro de aspirantes, prior de su querido Asilo-Hospital de Valencia, de la Clínica Santa Fe de Bogotá, y vocal al capítulo general. Vivía siempre ante los acontecimientos prósperos o adversos de la vida totalmente en manos de la providencia, repitiendo su frase favorita: “Dios lo ha querido así”. “Trató siempre a los enfermos con tal respeto, dulzura y caridad, que daba bien a entender veía a Cristo en sus miembros dolientes”.
En junio de 1936, un mes antes de su asesinato, se hizo cargo como superior de la comunidad de Calafell. Todo su afán era salvar la vida de los novicios, pues los milicianos de izquierdas estaban cerca. El 30 de julio de 1936 fue asesinado con toda la comunidad; en gesto muy significativo del hermano Carrasquer, “descendió del vehículo el primero, e iba ayudando a bajar a todos, animándoles al mismo tiempo para que no tuviesen miedo”, uno gritó “¡Viva Cristo Rey!”. Al morir tenía cincuenta y cinco años de edad y diecinueve de religioso. Los vecinos de Calafell recogieron aquella misma tarde los cadáveres y los subieron al cementerio, donde todos juntos fueron sepultados al día siguiente, 31 de junio de 1936. Sus reliquias reposan en la iglesia de Sant Boi de Llobregat. Abierta su causa de muerte como martirio en la Curia diocesana de Barcelona (1948) y aprobada en Roma el 14 de mayo de 1991, fue beatificado el 25 de octubre de 1992, por el papa Juan pablo II. Su fiesta litúrgica se celebra el 30 de julio como “Mártires de la Hospitalidad”.
Bibl.: O. Marcos Bueno, Violencias, profanaciones y asesinatos cometidos por los marxistas en los Establecimientos de San Juan de Dios: Ciempozuelos, Carabanchel Alto y Talavera de la Reina, Palencia, Editorial Hermanos de San Juan de Dios, 1938; R. M. Saucedo Cabanillas, “Hasta el Cielo”, en Biografía y martirio de 54 Hermanos Hospitalarios de San Juan de Dios, Madrid, ARGES, 1952; O. Marcos Bueno, Testimonio Martirial de los Hermanos de San Juan de Dios en los días de la persecución religiosa española, Madrid, Editorial Hospitalaria, 1980; F. Lizaso Berruete, Testigos de la misericordia hasta el martirio, Madrid, G. Ortega, 1992.
José Luis Martínez Gil, OH