Canelles Vives, Vicente de Paúl. Onda (Castellón), 25.VI.1894 – Calafell (Tarragona), 30.VII.1936. Religioso de la Orden Hospitalaria de San Juan de Dios (OH), beato.
El beato Vicente de Paúl Canelles era hijo de Agustín Canelles Piñón y de María del Carmen Vives Manuel, matrimonio ejemplar y de fuerte vivencia cristiana; eran labradores de profesión y de condición sencilla. Fue bautizado tres días después de su nacimiento. En el hogar familiar fue donde recibió una profunda educación cristiana, siendo sus padres el punto de referencia para su conducta, manteniéndose siempre muy sumiso a ellos. Asistió de niño a la escuela de su pueblo con aprovechamiento, pero todavía muy joven empezó a trabajar en las faenas agrícolas para ayudar a sus padres a sostener la familia. Los domingos ayudaba a personas mayores para que pudieran asistir a misa. Su vida cristiana era paralela a la de sus padres, perteneciendo a distintas organizaciones religiosas, como Adoración Nocturna y Congregaciones marianas.
Cumplió el servicio militar en África, en el cuerpo de Artillería; en el mismo se ganó el aprecio de oficiales y compañeros por su disponibilidad y buen temperamento. Al regresar del servicio militar, estaba dispuesto a seguir la vida religiosa que antes por respeto a sus padres dilató; les dijo: “Ya soy mayor y si quiero me puedo casar. Pero no es ése mi deseo, sino el de hacerme religioso”. Sus padres le comprendieron y, a los veinticuatro años, ingresó con los padres carmelitas, en el Desierto de Las Palmas, cercano a Onda, su pueblo natal. Ocho años después, sin embargo, convencido de que su vocación era la hospitalaria, tras los trámites canónicos, el 10 de julio de 1926 ingresó en la Orden de San Juan de Dios con el nombre de fray Vicente de Paúl. Seguro del paso dado y cumplido el noviciado canónico, el 28 de julio de 1927 emitió la profesión de los votos temporales; a los tres años en la misma fecha hizo los votos solemnes. Religioso hospitalario en verdad ejemplar, sus devociones sobresalientes fueron la Santísima Virgen María, el Ángel de la Guarda y la Eucaristía, que visitaba muy frecuentemente. Ejerció el oficio de limosnero en diversas comunidades de las que formó parte en Madrid, Valencia, Manresa y Barcelona. A los pocos días de estallar la guerra civil, el 30 de julio de1936 fue asesinado con la comunidad. Pasado un kilómetro y medio de Calafell, muy próximo a la finca denominada Corral del Rión, fueron obligados a bajar de la camioneta. Colocados en fila junto a la cuneta, uno gritó “¡Viva Cristo Rey!”, que fue coreado por todos, y sobre las seis o las siete de la tarde fueron asesinados catorce hermanos de San Juan de Dios.
El beato Vicente Canelles al morir tenía cuarenta y dos años de edad y nueve de religioso como hermano de San Juan de Dios. Sus reliquias reposan en el sanatorio de los hermanos de San Juan de Dios de Sant Boi de Llobregat (Barcelona). Abierta su causa de muerte como martirio en la curia diocesana de Barcelona (1948) y aprobada en Roma el 14 de mayo de 1991, fue beatificado el 25 de octubre de 1992, por el papa Juan Pablo II. Su fiesta litúrgica se celebra el 30 de julio como Mártires de la Hospitalidad.
Bibl.: O. Marcos Bueno, Violencias, profanaciones y asesinatos cometidos por los marxistas en los Establecimientos de San Juan de Dios: Ciempozuelos, Carabanchel Alto y Talavera de la Reina, Palencia, Ediciones HH. de San Juan de Dios, 1938; R. M. Saucedo Cabanillas, “Hasta el Cielo”, en Biografía y martirio de 54 Hermanos Hospitalarios de San Juan de Dios, Madrid, ARGES, 1952; O. Marcos Bueno, Testimonio Martirial de los Hermanos de San Juan de Dios en los días de la persecución religiosa española, Madrid, Ediciones Hospitalaria, 1980; F. Lizaso Berruete, Testigos de la misericordia hasta el martirio, Madrid, G. Ortega, 1992.
José Luis Martínez Gil, OH