Rey Joly, Celestino. San Fernando (Cádiz), 25.VII.1875 – Cádiz, I.1958. Militar e historiador.
Era hijo del comandante Celestino Rey y García Valdés, perteneciente a la Primera Promoción de Infantería de Marina, y de Aurora Joly Allende. Ingresó en la Armada en 1895 para cumplir su servicio militar y pasó a pertenecer como marinero al Departamento Marítimo de Cádiz, con destino en el Arsenal de la Carraca. Alcanzó plaza en junio de 1897 en la Academia de Infantería de Toledo, en la que siguió el plan de estudios abreviado impuesto por las guerras de Cuba y Filipinas, hasta que en junio de 1898 fue promovido a segundo teniente.
En los años siguientes sirvió en los Regimiento de África y Álava, continuando en este último, de guarnición en Cádiz, al ascender a primer teniente, en 1903. Al obtener en 1910 el empleo de capitán fue destinado al Batallón de 2ª Reserva de Valverde del Camino, regresando enseguida a Cádiz con destino en el Batallón de 2ª Reserva de dicha Plaza, donde continuó dedicando su tiempo libre a trabajos de investigación histórica.
En agosto de 1918 fue destinado al Regimiento de San Fernando, al que se incorporó en Melilla, prestando durante los meses siguientes servicio de guarnición en las posiciones de Dar Busada, Kandusi, Monte Arruit y Ain Yir. En octubre de 1919 tomó parte en la ocupación de la posición de Zoco T’zelata y en mayo del año siguiente combatió en Tamasusin, pasando seguidamente a guarnecer Dar Drius desde donde a las órdenes del coronel Rodríguez Casademunt intervino en el mes de julio en la toma de la posición de Midar y en septiembre en las operaciones sobre Buhafora y Tafersit, siendo premiado por todo ello con una Cruz roja al Mérito Militar.
Destinado en noviembre de 1920 al Regimiento de Cádiz, se incorporó a él dos meses después en dicha plaza, pero enseguida fue trasladado a la Brigada Disciplinaria de Melilla, a la que se incorporó en Nador. Al producirse la caída de Anual, el día 23 de julio le fue ordenada la contención de los soldados dispersos que huyendo de sus posiciones trataban de llegar a Melilla, a los que armó y municionó, retirándose seguidamente a la Fábrica de Harinas de Nador, en la que, al mando del teniente coronel Francisco Pardo Agudín, resistió durante diez días el sitio puesto por el enemigo, sufriendo toda clase de privaciones, entre ellas la falta de agua potable, cuyo suministro les fue cortado el día 27, viéndose los supervivientes obligados a capitular el 2 de agosto. Por la defensa de la Fábrica le fue abierto juicio contradictorio para la concesión de la Cruz Laureada de San Fernando.
En septiembre de 1922 obtuvo por antigüedad el empleo de comandante, con el que fue destinado al Regimiento de la Victoria, de guarnición en Salamanca, desempeñando a partir del año siguiente el cargo de delegado gubernativo del Partido Judicial de Ledesma, y a partir de 1925 el de Ciudad Rodrigo-Sequeros, tras haber sido trasladado al Regimiento de Pavía.
Nombrado en abril de 1926 delegado gubernativo en la provincia de Salamanca, causó baja en el Pavía y pasó a la situación de disponible, siendo en enero de 1930 nombrado para igual cargo en la provincia de Cádiz, en el que cesó al mes siguiente al ser destinado a la Circunscripción de Reserva de Lorca, de la que en diciembre pasó al Regimiento de Cádiz.
Se retiro del Ejército en julio de 1931, acogido a la Ley de Azaña, participando posteriormente en la Guerra Civil y volviendo a la situación de retirado al ser desmovilizado. A su muerte fueron enterrados sus restos en San Fernando (Cádiz), en el panteón de la familia Gómez Ruiz. Estuvo casado con María de las Mercedes Ruiz Grace. Por sus trabajos literarios recibió como premio dos Cruces blancas al Mérito Militar y una Mención Honorífica. En febrero de 1914 fue nombrado académico correspondiente de la Real Academia de la Historia. Poseía la Cruz de Caballero del Mérito Civil. Uno de sus dos hijos, Celestino Rey Ruiz intervino en la última Guerra Civil y falleció en la batalla de Brunete. La biblioteca y muchos de sus documentos pasaron a su muerte al Diario de Cádiz, que había sido fundado por un tío abuelo llamado Federico Joly Velasco, mientras que la documentación de carácter castrense fue donada al Servicio Histórico Militar.
Obras de ~: Historia del regimiento de Infantería de Álava núm. 56, Cádiz, 1903; Cervantes y el Quijote desde el punto de vista militar, s. l., 1905; Estudio histórico-orgánico-militar de los Ejércitos Españoles de Ultramar, s. l., 1906; Los moros tiradores de Ceuta, su origen e historia, 1906; El teniente Ruiz y el Regimiento de Álava nº 56, Cádiz, 1908; Historia del Regimiento de Cazadores de Alfonso XII, 21º de Caballería, Cádiz, 1910; Historia de los cuerpos distinguidos de voluntarios de Cádiz en la guerra de la Independencia, s. l., 1912; con F. J. Moya, El Ejército y la Marina en las Cortes de Cádiz, s. l., 1913; Catálogo del Museo Iconográfico e Histórico de las Cortes y sitio de Cádiz, Cádiz, 1917; Historia de los cuerpos distinguidos de voluntarios de Cádiz en la guerra de la independencia; Historia de la Brigada Disciplinaria de Melilla, s. l., 1923; Memoria sobre la restauración histórica de los Cuerpos de Infantería, s. l., 1929; El Dos de Mayo, s. l., s. f.; El voluntariado para África sobre organización de Cuerpos de Infantería, s.l., s.f.
Fuentes y bibl.: Archivo General Militar (Segovia), Secc. 1.ª, leg. R-613.
J. P. Aladro Duran (dir.), Diccionario enciclopédico ilustrado de la provincia de Cádiz, Madrid, Caja de Ahorros de Jerez, 1985.
José Luis Isabel Sánchez
