Ródenas Rodríguez, Libertad. Chera (Valencia), 1892 – Ciudad de México (México), 19.I.1970. Anarquista, oradora.
Hija de Custodio y Emeteria, que se habían unido libremente y puesto nombres liberales a su hija e hijos —Progreso y Volney—, ya que durante la estancia de su padre en Francia le influyeron las ideas de Voltaire, al tiempo que le apasionó la lectura de Las ruinas de Palmira. En su infancia, la casa familiar fue lugar de encuentro y conspiración del republicanismo valenciano. Según dice su biógrafa, Lola Iturbe, no fue mucho el tiempo que acudió a una escuela laica.
Trabajó de aprendiz de modista y practicó la fotografía.
Libertad, junto con sus hermanos, asistió a los mítines desde joven y en ellos comenzó a intervenir, labrando poco a poco su cualidad oratoria, por la que ya fue conocida en Valencia a partir de sus veinte años. Entregada a su ideal y a su familia, ha sido una de las mujeres de mayor peso en el anarquismo hispano.
De natural hermoso (Samblancat la denomina “pálida vestal del sindicalismo rojo”), parece que fue musa de Elías García.
La familia migró a Barcelona en 1918, coincidiendo con el año en que el Comité Regional de la Confederación Nacional del Trabajo (CNT) organizó giras de propaganda para extender la organización asociativa obrera en torno a los sindicatos únicos. En cada equipo se pretendió que fuera una mujer (las otras fueron Rosario Dulcet y Lola Ferrer) y a Libertad le correspondió la zona levantina y la provincia de Tarragona.
Allí, en un mitin en Valls, conoció a José Viadiu —Juan d’Agramunt—, que a la postre sería su compañero de por vida. En los años siguientes sufrió en carne propia y en la de su familia los zarpazos del terrorismo blanco: Progreso fue objeto de persecuciones y herido en atentado por la banda del Barón de Koenig; a Volney y a su primo Armando, estando apresados, se les aplicó la ley de fugas, por lo que después murió Armando. Ella misma fue encarcelada durante tres meses en diciembre de 1920 y a la salida, expuso con Rosario Dulcet en el Ateneo de Madrid la situación represiva de Barcelona. Posteriormente, viajó con Peiró a Guadalajara, en donde fue encarcelada de nuevo. En este tiempo perteneció al Comité Pro-Presos y visitó con asiduidad las cárceles en ayuda de quienes sufrían detención.
Al unirse a Viadiu en 1922 y nacer sus hijos, se dedicó por entero a su crianza. Llegada la Segunda República volvió a la tribuna y actuó en el grupo Brisas Libertarias, en Sans, junto a Pilar Grangel, las Moreno, R. Segarra, etc. Su personalidad se dejó sentir en las jóvenes generaciones de muchachas. A estallar la Guerra Civil en julio de 1936, se enroló en la columna Durruti y participó en la toma de Pina de Ebro. Volvió a Barcelona encargada de las criaturas evacuadas desde el frente. Ahí actuó en Mujeres Libres, en cuya revista escribió, integrando el grupo Luisa Michel, que pedía el ingreso en la Federación Anarquista Ibérica (FAI) en 1937. Terminada la guerra, se exilió a Francia, desde donde, con José Viadiu, logró embarcar en el La Salle rumbo a Santo Domingo (parando en una dura colectividad agraria, con Peirats y otros libertarios) y después de pasar por La Habana, por fin a México, en donde se establecieron. Sus tres hijos habían sido enviados a Rusia durante la guerra y a pesar de los esfuerzos que hicieron por recuperarlos, sólo pudieron dar con Ismael, que pudo llegar a México en 1947; los otros dos, al parecer, murieron en la batalla de Stalingrado.
Un vivo dolor que la acompañó hasta la muerte.
Bibl.: J. Peirats Valls, Estampas del exilio en América, París, Ediciones CNT, 1950; H. Plaja Saló, Mis memorias, México, 1957 (inéd.); J. Viadiu i Valls, “Una excursión de propaganda”, en Solidaridad Obrera (París), 729 (1959); “Libertad Ródenas”, en Comunidad Ibérica (México), 44-45 (1970) pág. 21; L. Iturbe Arizcuren, La mujer en la lucha social y en la guerra civil española, México, Mexicanos Unidos, 1974, págs. 64-71; M. Íñiguez, “Ródenas Rodríguez, Libertad”, en Esbozo de una enciclopedia del anarquismo español, Madrid, Fundación Anselmo Lorenzo, 2001; I. C. Soriano Jiménez, Hermoso Plaja Saló y Carmen Paredes Sans, 1889-1982. El anarquismo silencioso (tesis doctoral), Salamanca, Universidad, 2002.
Ignacio Soriano Jiménez