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Diego de Alcántara

Biografía

Alcántara, Diego de. ?, c. 1545 – Toledo, 11.IV.1587. Aparejador y maestro mayor.

No hay datos sobre sus orígenes; para algunos nació en 1538 mientras que para su principal estudioso, Fernando Marías, vino al mundo hacia 1545.

La primera vez que aparece documentado es en 1573 siendo aparejador en el Alcázar toledano. Ese mismo año fue llamado a Madrid por Juan de Herrera, arquitecto que ejerció de protector e introductor de Alcántara en la diversas obras reales que estaban comenzadas en ese momento. Así, en 1575, fue a Aranjuez a continuar las obras que dirigía Gerónimo Gil, al haber sido retirado de ellas; y en las que trabajó en colaboración con Minjares. A finales de este mismo año, estuvo también presente en las obras de El Escorial, concretamente dirigiendo las obras de los pilares de la basílica, para los que había realizado unas trazas. Alcántara hizo una maqueta —la segunda que se hizo, pues la primera fue de Juan Bautista de Toledo— de la basílica del monasterio de San Lorenzo de El Escorial.

En 1576 regresó a Toledo y continuó su labor de aparejador en las obras reales. Así, el 3 de julio de 1577, se le “despachó asiento de aparejador de las obras” del Alcázar.

En 1579 se le encargó nuevamente visitar y supervisar las obras de El Escorial y Aranjuez y regresó a las obras del Alcázar toledano el año siguiente.

En 1581 remodeló la capilla mayor de la iglesia del monasterio de la Concepción Franciscana de Toledo, intervención que consistió en una bóveda de horno adornada con molduras y pinturas.

Su fidelidad y dedicación hacia Herrera le valió que éste intermediase ante el Rey para que fuera nombrado maestre mayor de la catedral de Toledo, desplazando en el puesto a Nicolás de Vergara que había ocupado dicho cargo hasta el 23 de febrero de 1582, fecha en la que fue relevado por Alcántara. Un año después, el 18 de noviembre, también fue nombrado maestro mayor de las obras del monasterio de Uclés, sustituyéndole, tras su muerte, Francisco de Mora. El agradecimiento de Herrera hacia Alcántara quedó, incluso, reflejado en su propio testamento, que otorgó el 6 de diciembre de 1584, en que dice de éste a Felipe II: “Diego de Alcántara, que reside en Toledo, se podía S. M. muy bien servir y confiar mejor que de otra alguna persona en las cosas de la arquitectura”.

Realizó, en 1585, obras importantes en el monasterio de Santo Domingo el Real de Toledo, sobre todo en el denominado claustro o patio de la Mona donde sostuvo los dos pisos mediante dobles columnas toscanas que se acercan a la estética escurialense. En este mismo, convento parece que Alcántara supervisó la decoración de azulejos de dicho claustro y las rejerías. Ese mismo año, Gerónimo Gil y Diego de Alcántara terminaron la escalera y demás remates del Alcázar imperial.

También en 1585 intervino Diego de Alcántara en la catedral de Toledo, y en la parte alta de la puerta de los Leones, conjugando soluciones clasicistas sobre una realización en estilo gótico, incluyendo elementos historicistas en los que se pueden ver reminiscencias tanto de El Escorial como de Il Gesú. En 1586 presentó un proyecto efímero de arco triunfal para la puerta del Perdón de la citada catedral de Toledo, con motivo de la entrada de las reliquias de santa Leocadia.

Era una obra temporal en “leño y tela” de estilo clasicista para cubrir la puerta gótica, estilo que se estaba “superando”. Esta puerta gótica fue remodelada definitivamente en estilo neoclásico por Ventura Rodríguez en el siglo xviii.

Su estilo clasicista lo heredó directamente del que fue su maestro, Juan de Herrera, con el que se formó, al parecer, como delineante y aparejador. Al herrerianismo de su mentor incorporó Diego de Alcántara un sentido más volumétrico de las formas clásicas. Aunque algunas noticias dicen que sirvió al cabildo de la catedral toledana como escultor desde el año 1573, para otros no llegó a ejercer esta disciplina y no hay documentadas obras realizadas por él.

Falleció en Toledo el día 11 de abril de 1587 dejando viuda, Juana de Encinas (con la que ya estaba desposado en 1578), y tres hijos. Su pronta muerte truncó en Toledo una reconversión hacia el clasicismo que había planteado la obra de Herrera.

Parece ser que fue autor de un manuscrito de arquitectura que se encontraba en la biblioteca personal de su maestro Juan de Herrera y que no se conserva en la actualidad.

 

Obras de ~: Espadaña de San Juan de los Reyes, Toledo, 1591; restauración de la parte alta de la Puerta de los Leones, catedral de Toledo, 1585, Boceto para el arco triunfal de la puerta del Perdón, catedral de Toledo, 1586.

 

Bibl.: E. Llaguno y Amirola, Noticias de los Arquitectos y Arquitectura de España desde su restauración, Madrid, Imprenta Real, 1829; A. Ruiz de Arcaute, Juan de Herrera, Arquitecto de Felipe II, Madrid, Instituto Juan de Herrera, Escuela Técnica Superior de Arquitectura de Madrid, 1936; J. Camón Aznar, “Las Artes y la Orfebrería española del s. xvi”, en Summa Artis, Historia general del arte, vol. XVII, Madrid, Espasa Calpe, 1964; F. Marías, La arquitectura del Renacimiento en Toledo (1541-1631), t. II, Madrid, Consejo Superior de Investigaciones Científicas-Instituto Provincial de Investigaciones y Estudios Toledanos, 1985, págs. 34-49; B. Martínez Caviró, “Informe sobre el Monasterio de la Concepción”, en Toletum (Boletín de la Real Academia de Bellas Artes y Ciencias Históricas de Toledo), 22 (1988), págs. 187-189; V. Nieto, A. J. Morales y F. Checa, Arquitectura del Renacimiento en España. 1488-1599, Madrid, Cátedra, 1989; J. L. Sancho, La Arquitectura de los Sitios Reales, Catálogo Histórico de los Palacios, Jardines y Patronatos Reales del Patrimonio Nacional, Madrid, Patrimonio Nacional-Fundación Tabacalera, 1995; A. Herrera Casado, Monasterios y Conventos de Castilla-La Mancha, Guadalajara, Aache, 2005; http://www.dominicos.org/monjas/estudios/construccion.htm

 

Diccionario Biográfico Español