Herrera y Sotomayor, José Antonio. Madrid, 27.VII.1625 – Sanlúcar de Barrameda (Cádiz), f. s. xvii. Militar, gobernador.
Hijo legítimo de Juan Herrera y Sotomayor y de María de Rivadeneyra. Actuó desde 1652 en los Ejércitos Reales, en las campañas de Flandes, Extremadura y Cataluña, alcanzando reputación y el grado de capitán de caballos corazas. Fue designado gobernador de Caballería del presidio y pasó a Buenos Aires al frente de las tropas que envió la metrópoli para resistir la ocupación de la Banda Oriental del Río de la Plata, realizada por Manuel Lobo, fundador de Colonia del Sacramento en la otra margen del río. Llegó a Buenos Aires en los primeros meses de 1681, y poco después era nombrado cabo y gobernador de la Caballería del presidio, al aumentar la guarnición del mismo en cinco compañías.
Ese mismo año el gobernador del Río de la Plata, José de Garro, lo designó teniente militar suyo y sucesor interino del gobierno, a causa de la ausencia forzosa de Garro a Chile para ocupar allí la capitanía general. El Cabildo aceptó su nombramiento a insistencia de Garro, pero la tenencia civil quedó a cargo de Juan Pacheco Santacruz. Dificultades con el Cabildo porteño y el uso de una cédula atrasada que ordenaba que en caso de vacancia fuera gobernador el de Córdoba, provocaron conflictos entre el Cabildo y Herrera. Pero el virrey del Perú, duque de la Palata, designaba a Herrera en lo político y militar, el 24 de noviembre de 1681, y el Cabildo le entregaba las insignias el 11 de junio de 1682.
Durante su gobierno ocurrieron hechos muy importantes, como la devolución de la Colonia del Sacramento en 1682, y la resistencia y entredicho constante con sus ocupantes. Garro y Herrera se mostraron contrarios al Tratado Provisional que garantizaba la devolución de aquella ciudad a manos portuguesas. Herrera no creía prudente trasladar a Buenos Aires las mil familias de la Banda Oriental y dispuso ensanchar la ocupación jesuítica para ofrecer una valla a la expansión portuguesa.
Inició, además, los trabajos de edificación del fuerte de San Sebastián con la ayuda de trescientos indios. Para solventar las obras creó un gravamen sobre el ganado, los cueros, el vino y la yerba, lo que ocasionó protestas entre el vecindario.
El 12 de febrero de 1683 entregaba Colonia del Sacramento al gobernador portugués Duarte Texeira Chaves. Días más tarde, Herrera dictó un auto prohibiendo todo trato con la ciudad vecina so pena de muerte y confiscación de bienes, aunque permitió el contrabando. Herrera dejó el gobierno del Río de la Plata en 1691 en manos de Agustín de Robles. En 1696 era ascendido a brigadier de caballería. Falleció en Sanlúcar de Barrameda siendo gobernador de aquella ciudad.
El juicio de sus contemporáneos le fue favorable, pues gobernó con corrección y tranquilidad. Realizó varias expediciones contra los indios pampas y serranos, en la provincia de Buenos Aires, intentando avanzar la frontera hacia el sur. Se sabe, también, que intervino en contrabandos y sostuvo encarnizados enfrentamientos con algunos vecinos poderosos de la ciudad. Se había casado con Josefa de los Ríos, con quien tuvo cinco hijos.
Bibl.: Crónicas y linajes de la Gobernación del Plata: Documentos inéditos de los siglos xvii y xviii, Buenos Aires, F. Lajonane y Cía., 1927; L. E. Azorla Gil, Los orígenes de Montevideo, 1607-1749, Montevideo, Casa A. Barreiro y Ramos, 1933; E. Udaondo, Diccionario biográfico colonial argentino, Buenos Aires, Editorial Huarpes, 1945, pág. 441; R. A. Molina, Diccionario biográfico de Buenos Aires (1580-1720), Buenos Aires, Academia Nacional de la Historia, 2000, pág. 353.
Sandra Fabiana Olivero