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Jesús Aizpún Tuero

Biografía

Aizpún Tuero, Jesús. Pamplona (Navarra), 17.VI.1928 – 29.XII.1999. Abogado y político.

Cuarto de los siete hijos de Carmen Tuero y del jurista y político Rafael Aizpún, se educó durante la Guerra Civil en el colegio de los capuchinos de Lecároz, Navarra, (1938-1939) y luego en los jesuitas de la calle de Areneros, de Madrid (1939-1945) para estudiar Derecho en Deusto y licenciarse en Zaragoza en 1950. Casado con María Teresa Viñes, con quien tuvo once hijos, se formó como abogado y foralista junto a su padre y asumió enteramente la causa de la defensa de la peculiaridad jurídica de Navarra, tanto en el Derecho Civil Privado como en el Público, a partir de la afirmación de que el status jurídico navarro era el definido en las Cortes españoles con la ley paccionada de 1841, que, como pacto, comprometía a ambas partes. En el terreno del Derecho Civil, fue uno de los firmantes del dictamen jurídico en virtud del cual se rechazó, en la Diputación de Navarra, el anteproyecto de Fuero Recopilado que se presentó para su aprobación en 1959 y, como consecuencia de ello, Aizpún pasó a formar parte de un pequeño grupo de juristas que, en torno a Juan García-Granero, elaboró entre 1959 y 1971 sucesivas Recopilaciones Privadas y se integraron finalmente en la Comisión Oficial Compiladora de Navarra, que acabó sus trabajos en 1973, cuando Franco promulgó el Fuero Nuevo.

Fue al tiempo, y por tanto, militante frente al nacionalismo vasco. Y fue esto lo que lo llevó a la política, cuando se puso de manifiesto que la colaboración de los nacionalistas vascos con la oposición de izquierda al Régimen, además de haber generado un nacionalismo vasco de izquierda, había hecho que los demás políticos de la oposición —incluso los opuestos a las concesiones autonomistas en 1931-1936— hicieran suyas las reivindicaciones nacionalistas, sobre todo vascas y catalanas. Así, en la propia izquierda navarra correspondiente a los partidos de ámbito estatal, la defensa de los fueros navarros (el régimen de autonomía político-administrativa configurado en las Cortes españolas entre 1839 y 1841, con la conformidad de los liberales navarros, y respetado tanto por los gobernantes de la Segunda República como por Franco) se considerase una baza conservadora, y la integración de Navarra en Euskadi, la propuesta que correspondía a la izquierda. En 1973, se presentó a las elecciones municipales y resultó elegido concejal del valle del Baztán y, en el mismo año, el secuestro de su cuñado Felipe Huarte por ETA (Euskadi Ta Askatasuna) terminó de decidirle a entrar en la política. En noviembre de 1973, al amparo de la vigente Ley de Asociaciones, Aizpún creó Unión Navarra: una asociación cultural que tenía, no obstante, el nombre del partido político con el que su padre, Rafael Aizpún, se incorporó a la Confederación Española de Derechas Autónomas (CEDA) en 1933. Una de sus primeras actividades fue la organización de un ciclo de conferencias en las que hablaron el antiguo tecnócrata Francisco Fernández Ordóñez y el liberal Joaquín Garrigues Walker, con quien Jesús Aizpún había entrado en contacto. En 1974, formó parte del primer comité ejecutivo del Partido Demócrata, presidido por Garrigues; partido que se convirtió luego en Federación e indujo a Aizpún, por tanto, a fundar el Partido Demócrata de Navarra. En 1976, en Diario de Navarra (“Las perplejidades del político”, 4 de junio), Aizpún avisó claramente de la crispación política que se vivía en la región, hasta el punto de recordar la primavera de 1936, e insistió en la defensa de la autonomía contemplada en la vigente Ley de 1841.

Como miembro de la Federación de Partidos Demócratas y Liberales, se incorporó a Unión de Centro Democrático (UCD) cara a las elecciones generales de 1977.

En principio (agosto de 1977), Aizpún era partidario de respetar, sin más, la paccionada (aquella Ley de 1841); pero, de acuerdo con otro foralista y político que irrumpió en la vida pública en esos días —Jaime Ignacio del Burgo—, propuso una reforma del estatuto jurídico de Navarra sobre la base de la democratización de sus instituciones y de toda la ampliación posible de las competencias autonómicas. Frente a ello se alzaría enseguida la reivindicación de los nacionalistas vascos, quienes, para aceptar la Constitución española que iba a aprobarse en 1978, con el apoyo de los socialistas, impusieron a Adolfo Suárez que se aprobara previamente la formación de una Comunidad Autónoma Vasca, con Navarra en ella o, al menos (en vista del rechazo de los parlamentarios navarros de UCD, con especial protagonismo de Aiz pún), de manera que se contemplara explícitamente la posibilidad de que Navarra se incorporase a esa Comunidad algún día. De los parlamentarios navarros, fue Aizpún el único que no aceptó este hecho, que, sin embargo, fue lo que se recogió en la disposición transitoria cuarta de la Constitución de 1978, contra cuya aprobación (y contra los artículos concernientes a la enseñanza y al divorció) votó Aizpún en el Congreso de los Diputados. En la votación final sobre la aprobación del texto constitucional en conjunto, se abstuvo, rompiendo la disciplina de UCD. El 30 de enero de 1978, ya había presentado a Suárez la dimisión de todos sus cargos en UCD; aunque no lo hizo público por no lesionar los intereses del partido.

Fue uno de los parlamentarios navarros que negociaron con el Gobierno Suárez la democratización y ampliación del régimen foral navarro, que se hizo por Decreto de 26 de enero de 1979. Pero, por esos mismos días, abandonó UCD y fundó Unión del Pueblo Navarro (UPN), sobre todo con elementos de la propia UCD y con personas procedentes de una Alianza Foral Navarra que había concurrido a las elecciones de 1977 como opción de derecha. Elegido diputado en las elecciones de 1979, formó parte del Grupo Mixto en el Congreso y se enfrentó empeñadamente a las menciones a Navarra que se hicieron en el Estatuto de Autonomía Vasca. Luego tomaría parte activa en la elaboración del definitivo Amejoramiento del Fuero, con el que se terminaron de democratizar y modernizar las instituciones administrativas navarras en 1982.

El acierto político de la creación de UPN se puso de manifiesto en las elecciones generales de octubre del año 1982, cuando la candidatura de UCD fue derrotada, como en el resto de España, no sólo por los socialistas, sino también por Unión del Pueblo Navarro.

Coaligada con Alianza Popular, en esas elecciones UPN obtuvo dos escaños en el Congreso y uno en el Senado, en tanto que los otros tres diputados y los tres senadores correspondían al Partido Socialista de Navarra. En adelante, hasta la muerte de Aizpún (y después), la política navarra fue una alternancia de UPN y PSN (Partido Socialista de Navarra) al frente del Gobierno Foral; alternancia en la que Aizpún tuvo un papel de primer orden, tanto en la vida política regional como en las Cortes españolas, donde siguió representando a los navarros.

Fue asimismo, por tanto, uno de los negociadores de la Ley de Amejoramiento del Fuero (1979), enmarcada ya en la Constitución de 1978. Durante la negociación, el hecho de que algunos de los negociadores que representaban al Gobierno de Adolfo Suárez rechazaran verbalmente el carácter preconstitucional del Fuero navarro llegó a inducir a Aizpún a amenazar con abandonar cualquier trato.

En la vida política regional, el “navarrismo” de Aizpún —secundado inequívocamente por los votos de casi la mitad de los navarros— no dejó de suscitar la oposición de algunos sectores de su propio partido, que preconizaban una política de conciliación con los mandatarios de la Comunidad Autónoma Vasca y llegaron a proponer un nacionalismo navarro; oposición que cristalizó en 1991 en torno al abogado Juan Cruz Alli, militante de UPN y, como tal, presidente del Gobierno Foral por aquellas calendas. Alli acabó por formar su propio partido en 1995 (Convergencia de Demócratas de Navarra) y eso indujo a los dirigentes de UPN —con la resistencia de Aizpún— a aliarse de forma permanente con el Partido Popular, que ahora tenía a su frente, en Navarra, a Jaime Ignacio del Burgo.

Lo principal de su obra escrita, discursos y artículos de prensa en su gran mayoría, se recoge en el libro de Inés Aizpún et al. (2003).

 

Obras de ~: “La gran estafa”, en S. Becerril et al., Comentarios políticos de actualidad, Madrid, Unión Editorial (Cuadernos Libra), 1976.

 

Bibl.: J. Andrés-Gallego, Navarra, cien años de historia: Siglo xx, Pamplona, Diario de Navarra, 2003; I. Aizpún Viñes et al., Jesús Aizpún, abogado de Navarra, Pamplona, Sahats Servicios Editoriales, 2003.

 

José Andrés-Gallego

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