Álvarez de Toledo y Samaniego, José María. Conde de La Ventosa (XIV). Madrid, 7.V.1881 – 30.VIII.1950. Militar y fotógrafo.
Quinto hijo del coronel de Infantería Alonso Álvarez de Toledo y Silva, X marqués de Martorell (Nápoles, 11 de febrero de 1835 – Madrid, 11 de julio de 1895), y de Genoveva de Samaniego y Pando, VII marquesa de Casa Pontejos, V marquesa de Miraflores, XIII condesa de La Ventosa, VII condesa de Villapaterna y IX vizcondesa de la Armería, dos veces Grande de España (París, 3 de enero de 1841 – Madrid, 31 de enero de 1926), que fue dama particular de la reina regente María Cristina y luego de honor de Victoria Eugenia y que perteneció a la Real Sociedad Económica Matritense de Amigos del País, en la que ingresó en 1879 y de la que fue secretaria de la Junta de Damas muchos años y, a partir de 1916, su presidenta.
Gran aficionado a la fotografía desde su juventud, fue uno de los pioneros de este arte en España y uno de los mejores pictorialistas, aunque, abierto a las nuevas tendencias, fue evolucionando hacia una mentalidad más documentalista. Cultivó la fotografía de paisajes y las escenas de género. Participó en los diversos concursos nacionales y salones internacionales de Madrid que se convocaron durante las cuatro primeras décadas del siglo xx, recibiendo varios premios. Además, organizó los primeros concursos sociales de la Real Sociedad Fotográfica, una de las actividades más populares —que aún hoy continúan celebrándose—, y pronunció numerosas conferencias divulgativas sobre la fotografía en diversos lugares de España. No en vano, durante años fue el alma de la Real Sociedad Fotográfica de Madrid, cuya junta directiva integró desde 1907. Sin embargo, siguió la vocación militar de su progenitor, ingresando en la Academia de Caballería en 1898, siendo su primer destino como teniente el Regimiento de Lanceros de la Reina, 2.º de Caballería, desde donde pasó destinado en diciembre de 1904 a la Escolta Real. De hecho, el 31 de mayo de 1906, iba al estribo de la carroza real del cortejo nupcial cuando estalló la bomba que lanzó el anarquista Mateo Morral en la calle Mayor al regreso de la boda en la madrileña iglesia de San Jerónimo el Real Alfonso XIII con la princesa británica Victoria Eugenia de Battenberg. Aunque la pareja real salió indemne, el atentado causó numerosas víctimas que ensombrecieron el acontecimiento.
También José María Álvarez de Toledo salió ileso del atentado, continuando en su empleo en la Escolta Real hasta octubre de 1913, que obtuvo su ascenso a capitán, año en el que el Rey volvió a ser objeto de un nuevo atentado y un año después de que José María Álvarez de Toledo hubiera contraído matrimonio el 12 de marzo de 1912 con María del Pilar Frígola y Muguiro. No obstante, continuó vinculado a la Casa Real como gentilhombre de cámara del rey Alfonso XIII. Fallecida su primera mujer sin descendencia, volvió a casar el 2 de mayo de 1916 con María de las Mercedes Mencos y Bernardo de Quirós, hija de los condes de Guendulain, habiendo de estas segundas nupcias ocho hijos.
El XIV conde de la Ventosa, que había sucedido en esta merced por cesión de su madre, fue, a partir de 1926, presidente de la Real Sociedad Fotográfica de Madrid —habiendo pasado previamente por los cargos de bibliotecario, secretario y vicepresidente—, institución desde la que impulsó las charlas radiofónicas sobre la fotografía, y creó en 1928 una sección cinematográfica en la misma, para después promover una nueva edición bajo su presidencia del Boletín Oficial de la Real Sociedad Fotográfica. Al año siguiente, coincidiendo con la Exposición Universal de Barcelona, expuso con gran éxito noventa de sus obras en la sede de la Agrupación Fotográfica de Cataluña.
En julio de 1931, proclamada la Segunda República, pasó a retirado con la ley de Azaña, pero, debido a sus profundas convicciones monárquicas, se reincorporó al ejército con ocasión del levantamiento del 18 de julio de 1936, ascendiendo a coronel por antigüedad el 18 de marzo de 1938 y a general de brigada el 18 de junio de 1942. Su último destino fue el mando de la Brigada Mixta de Caballería de Marruecos e inspector de todas las Fuerzas y Servicios de Caballería de Marruecos, con sede en Melilla. Entre otras condecoraciones a lo largo de su carrera militar recibió las Grandes Cruces de San Hermenegildo y del Mérito Militar, aunque también fue agraciado fuera de las fronteras españolas como caballero de la Legión de Honor francesa y con las cruces de la Orden Militar portuguesa de San Benito de Avis y de la Orden de San Miguel de Baviera. Al finalizar la Guerra Civil había retornado a la presidencia de la Real Sociedad Fotográfica de Madrid, en cuyo cargo permaneció hasta 1944. Tras su fallecimiento en el verano de 1950, su familia decidió depositar en la Universidad de Navarra su archivo fotográfico personal, aunque una gran cantidad de positivos se conservan en la Real Sociedad Fotográfica.
Obras de ~: “Divagaciones sobre arte fotográfico”, en La Fotografía (Madrid), 2.ª época, febrero-marzo de 1914; Por España, impresiones gráficas, Madrid, Tipográfica Artística, 1920; Notas para el estudio y empleo de la Caballería, Madrid, Ruiz Ferri, 1931; “Cómo veo y ejecuto la fotografía”, en Galería (Madrid), enero de 1936.
Fuentes y bibl.: Archivo General Militar (Segovia), Sección 1.ª, leg. A-802.
J. Francés, “El VII Salón Internacional de Fotografía de Madrid”, en Foto (julio de 1928); S. C. King, The Photographic Impressionists of Spain. A History of the Aestetics and Technique of Pictorial Photography, Lewiston/Queenston/Lampeter, Edwin Mellen Press, 1989; R. Doctor, “Apuntes del pictorialismo español”, en VV. AA., 50 años de fotografía española en la colección de la Real Sociedad Fotográfica (1900-1950), Madrid, Fundación Cultural MAPFRE Vida, 1995; J. Latorre Izquierdo, Santa María del Villar, fotógrafo turista, Pamplona, Gobierno de Navarra, 1998; A. M. Martín López y M. Muñoz García, Historia de la Real Sociedad Fotográfica: Voluntad de fotógrafos, Segovia, Real Sociedad Fotográfica, 2004.
José María Álvarez de Toledo y Gómez-Trenor, conde de la Ventosa
