Astrain, Antonio. Undiano (Navarra), 17.XI.1857 – Loyola (Guipúzcoa), 4.I.1928. Jesuita (SI), historiador.
Su nombre está unido a la Historia de la Compañía de Jesús en la Asistencia de España hasta su supresión (1773). A escribirla dedicó más de treinta años y siete tomos de alrededor de ochocientas páginas cada uno.
Comenzó a preparar la obra en 1893 y la publicó entre 1902 y 1925.
La historia no fue su primera ocupación. Se hizo jesuita sin haber cumplido los quince años. La Compañía de Jesús estaba suprimida en España desde 1868 y tuvo que realizar el noviciado (1871-1873) en el exilio de Poyanne (Francia). Allí mismo estudió Humanidades y los dos primeros años de Filosofía. El tercero lo cursó en Carrión de los Condes (Palencia).
Volvió un año (1879-1880) a Poyanne para enseñar Humanidades a los estudiantes jesuitas, tarea que continuó en Loyola (1880-1883). La Teología la estudió en Oña (Burgos, 1883-1887) y tras ella, ya sacerdote desde 1886, volvió a Loyola como profesor de Humanidades. Fue director de la revista El Mensajero del Corazón de Jesús, ubicada en Bilbao, de 1890 a 1893. Aquí comenzó a escribir breves artículos históricos.
A finales de 1892 fue elegido general de la Compañía de Jesús el padre Luis Martín. Él impulsó el estudio de la historia de la Orden en varias líneas.
Una de ellas fue encargar a jesuitas de diferentes naciones la Historia de la Compañía en cada una de ellas, dividiéndola en dos períodos, antes y después de la supresión. Antes de ser general, Luis Martín había encargado a Astrain una Historia popular de la Orden (1888), pero a partir de 1892 le incluyó en el proyecto general, encargándole de la Asistencia de España, que comprendía también a la América española.
La obra quedó finalizada, pues llegó al generalato del padre Luis Centurione (1755-1758), predecesor inmediato del padre Lorenzo Ricci, que sufrió la supresión de la Orden.
Sin tener formación histórica previa, aconsejado por el jesuita, futuro cardenal, F. Ehrle, corregido y animado muy cercanamente por los padres Martín y Juan José de la Torre y con la ayuda de muchos colaboradores (Julio Alarcón, Enrique del Portillo y Cecilio Gómez Rodeles, entre otros) y de bastantes amanuenses, fue realizando con constancia su obra.
Para ello viajó a varios archivos de Europa (la apertura del Archivo Vaticano era reciente) y también a América. En un sucinto Diario conservado en Roma en el archivo de Monumenta Historica Societatis Iesu se narran las vicisitudes de la composición de esta Historia. Con más detalle, pero más limitadas en el tiempo, se reseñan los pasos en la gestación de la obra en las Memorias del padre Luis Martín, cap. 55 especialmente.
La obra de Astrain es quizá la más lograda de las historias de la Compañía de Jesús antes de su supresión y de las más difíciles por la extensión de los escenarios que abarca. Consiguió lo que se pretendía: una narración de las vicisitudes de la Orden, basada en documentos y sujeta a las exigencias de su tiempo. Buscó y encontró documentos inéditos, rectificó errores, precisó posturas y arrojó luz sobre asuntos que desbordaban el cauce de la historia jesuítica y afectaban a la de la Iglesia y a la historia universal. Fue puliendo su estilo y logró escribir con amenidad, aunque a veces ésta nazca de su apasionamiento contra algunos personajes.
Sin la base de monografías previas, realizó una obra ingente, de consulta obligada, aunque en años posteriores ha sido sectorialmente completada.
Se puede disentir de algunos juicios y del peso que atribuye a algunos episodios e incluso de la extensión que les otorga, pero es una obra clásica. Une su amor a la Orden con la verdad al historiarla, sin ocultar sus fallos, aunque en algún momento es apologético. Es obra imprescindible para quien quiera acercarse a la historia de la Compañía de Jesús en España en su primera época.
Publicó por separado el tomo I como Vida de San Ignacio de Loyola, que fue reimpreso. En 1921 lo abrevió y, además de tres ediciones españolas, fue traducido a siete lenguas. Publicó también la Introducción histórica a la historia de la Compañía de Jesús en la Asistencia de España, que acompañaba a la Vida de San Ignacio y también se imprimió por separado. Colaboró en Razón y Fe, Gregorianum y Monumenta Historica Societis Iesu, las Enciclopedias Espasa y Americana, prologó la Historia de la Compañía de Jesús en la Provincia del Paraguay del padre Pablo Pastells, tomó parte en el homenaje al padre Luis Coloma y dejó sin publicar una Historia de la Literatura Española, una Preceptiva de la Historia y un Compendio de Historia general de la Compañía de Jesús. Fue interinamente rector del ICAI, cuando la gripe de 1918 acabó con la vida del padre Mateo D’Arcy, y desde 1921 a 1928 dirigió la colección documental Monumenta Historica Societatis Iesu.
Obras de ~: Historia de la Compañía de Jesús en la Asistencia de España, Madrid, Razón y Fe, 1902-1925, 7 vols.; “Los españoles en el Concilio de Trento”, en Razón y Fe (RF), 3 (1902), págs. 189-206 y 289-303; 4 (1902), págs. 312- 321; 5 (1903), págs. 145-154; “Hagiografía. Día del tránsito de San Francisco Javier”, en RF, 5 (1903) 375-386; Introducción histórica a la Historia de la Compañía de Jesús en la Asistencia de España, Madrid, Razón y Fe, 1912; “Menéndez y Pelayo. Examen crítico de sus obras”, en RF, 33 (1912), págs. 297- 310; Discursos de los Srs. [...] Antonio Astrain, S.J., [...] en la [...] sesión celebrada por el Centro de Defensa Social, de Madrid, el [...] 5 de Marzo de 1916, consagrada a la memoria del R.P. Luis Coloma de la Compañía de Jesús, Madrid, Sucesores de Rivadeneyra, 1916; “San Ignacio de Loyola y la liturgia”, en RF, 44 (1916), págs. 35-46, 173-186 y 291-305; Vida breve de San Ignacio de Loyola, Bilbao, Mensajero, 1921; “La condenación de un libro”, en RF, 66 (1923), págs. 420-427; “San Pedro Canisio”, en RF, 72 (1925), págs. 145-160.
Bibl.: A. Pérez Goyena, “El P. Antonio Astrain”, en RF, 82 (1928), págs. 170-175; Espasa 6, págs. 789-790 y Ap. 1, 944; L. Koch, Jesuiten-Lexikon: die Gesellschaft Jesu einst und jetzt, Paderborn Bonifacius, 1934, pág. 106; D. Fernández Zapico- P. Leturia, “Cincuentenario de Monumenta Historica SJ”, en Archivum Historicum Societatis Iesu, 13 (1944) 1-61; M. Batllori, “Astrain, Antonio”, en Q. Aldea Vaquero, T. Marín Martínez y J. Vives Gatell (dirs.), Diccionario de Historia Eclesiástica de España, vol. I, Madrid, Consejo Superior de Investigaciones Científicas, Instituto Enrique Flórez, 1972, pág. 151; J. R. Eguillor, M. Revuelta y R. M.ª Sanz de Diego, Memorias del P. Luis Martín, General de la Compañía de Jesús (1846-1906), vol. II, Roma-Madrid, Institutum Historicum Societatis Iesu, Universidad Pontificia Comillas, 1988, cap. 55, págs. 773-807; L. Polgar, Bibliographie sur la Compagnie de Jesús, 1900-1980, Roma, Institutum Historicum Societatis Iesu, 1990, págs. 3, 1, 178; M. Revuelta, La Compañía de Jesús en la España Contemporánea, vol. II, Madrid, Universidad Pontificia Comillas, 1991, pág. 941; R. M.ª Sanz de Diego, “Astrain, Antonio”, en Ch. O’Neill- J. Domínguez, Diccionario Histórico de la Compañía de Jesús, vol. I, Roma-Madrid, Institutum Historicum Societatis Iesu- Universidad Pontificia Comillas, 2001, págs. 258-259.
Rafael María Sanz de Diego, SI
