Poley y Poley, Manuel. Prado del Rey (Cádiz), 23.XI.1848 – Villamartín (Cádiz), 1.VI.1902. Doctor en ambos Derechos, catedrático de la Universidad Central, profesor de la Institución Libre de Enseñanza, abogado, político, traductor.
Hijo de José Poley Sosa, maestro nacional en Prado del Rey, y de Rosario Poley Aguilar. Después de estudiar la enseñanza primaria, y algo más, en la escuela paterna, fue a Sevilla a los trece años a examinarse de bachiller en Artes en su Instituto, obteniendo el título con sobresaliente. Prosiguió en la Universidad y el 27 de junio de 1867, a los diez y ocho años, obtuvo el título de bachiller en Derecho Civil. Al mismo tiempo, cursó estudios en la Facultad de Filosofía y Letras, donde encontró a un compañero, gran amigo toda su vida, Antonio Machado Álvarez, hijo de Antonio Machado Núñez, rector de la Universidad. Su amigo Machado, con seudónimo de Demófilo fundó el periódico Un Obrero de la Civilización e incluyó entre sus redactores a Manuel Poley. Su círculo de amigos se ensanchó con Luis Montoto, Joaquín Guichot, Francisco Rodríguez Marín y otros intelectuales.
El 23 de junio de 1866 obtuvo el Bachillerato en Filosofía y Letras; presidió el Tribunal Federico de Castro, quien le invitó a ser redactor de la Revista Mensual de Filosofía, Literatura y Ciencias, codirigida por Castro y el rector Machado. La Revista… alcanzó éxito nacional y en ella colaboraron Nicolás Salmerón, Giner de los Ríos, Julián Sanz del Río, entre otros. El 29 de mayo de 1869 Poley se licenció en Derecho Civil, con Sobresaliente. En el verano redactó su tesis doctoral Concepto del Código como una de las formas del Derecho Positivo. Condiciones y elementos para la codificación, que defendió en la Universidad Central de Madrid, el 5 de octubre de 1869, con máxima calificación; tenía veinte años. Volvió a Sevilla, siguió en la Revista… Se inscribió en el Colegio de Abogados y abrió bufete, con Antonio Machado. El bufete se extendió a Cádiz y a Villamartín. El inquieto Poley aspiraba a más y preparó oposiciones a cátedras de Derecho Romano, se examinó en Madrid en mayo y junio de 1873, obtiene el número 2, y quedó con plaza en Madrid. En octubre de 1873 explicó la Cátedra de Legislación Comparada. La junta de profesores, al vacar una cátedra, propuso como suplente a Poley. En el siguiente curso, 1874, explicó Teoría de los Procedimientos Judiciales y Prácticas Forenses.
Fundada en 1876 la Institución Libre de Enseñanza, Poley vio en ella “el arquetipo que había soñado para lograr la enseñanza ideal” (A. Mesa, 1999); se adhirió y al abrir el curso 1876-1877 fue profesor de Historia de España y, dos años después, de Derecho. Artífice de su gran Biblioteca, quedó como bibliotecario. Acometió, con Jacinto Mesía, la traducción del tratado de Derecho Romano de Savigny, libro “clásico” donde los haya, con última edición, por ahora, en 2005. En 1892 opositó a la Cátedra de Derecho Mercantil, que ganó. El 4 de diciembre de 1892, con cuarenta y cinco años, se casó con su amiga de juventud María Pacheco Lobo, de cuarenta y tres. Se instalaron en Sevilla un año después y Poley volvió a sus bufetes de Sevilla, Cádiz y Villamartín. En 1898 era diputado provincial por Arcos de la Frontera, siendo votado como vicepresidente de la Diputación. Se entregó a esa tarea y decidió vivir en Villamartín, con gran contento de su esposa. Efímera felicidad. Murió el 1 de junio de 1902, a los cincuenta y tres años de edad.
Obras de ~: M. F. C. de Savigny, Sistema del Derecho Romano actual, trad. de ~ con J. Mesía, ed. francesa traducida del alemán por M. Ch. Guenoux, Madrid, F. Góngora y Compañía, 1878-1879, VI vols. (reed. Madrid, Góngora, 1924, VI vols; Pamplona, Analecta, 2004, III vols.; Albolote, Granada, Comares, ciencia jurídica nº 58, 2005).
Bibl.: El Porvenir, Sevilla, 6 de junio de 1902; A. Palau y Dulcet, Manual del Librero Hispanoamericano…, vol. XX, Barcelona, Librería Palau, 1968, pág. 180; A. Mera Jarén, Hijos Ilustres y personajes relevantes en la muy noble y muy leal Villa de Villamartín, Villamartín, Ayuntamiento, 1999, págs. 102-123.
Fernando Rodríguez de la Torre