Navarro de Ituren y Vera, Juan. La Habana (Cuba), 20.X.1842 – Zaragoza, 13.X.1885. Político y jurisconsulto.
Nació en el seno de una noble familia turiasonense de honda tradición militar, siendo su padre contador general de las Cajas de La Habana, intendente de Ejército y consejero real de Ultramar. Fue su madre Carlota de Vera Martínez, natural de Cartagena. Bachiller en Derecho Administrativo (1862) y licenciado en Derecho Civil y Canónico (1864) por la Universidad Central, la Reina le concedió una plaza en el Real Colegio de España o de San Clemente en Bolonia (Italia) (1864). Una vez terminada su carrera fue nombrado oficial de la Dirección General de la Deuda, cargo que ejerció por algún tiempo. Individuo de la Academia Matritense de Jurisprudencia y Legislación, fue ascendido a académico profesor (1865), cuando era presidente de la Academia Cándido Nocedal. Poco después se inició la vida política de Navarro de Ituren.
Tras el alzamiento del general Prim en Cádiz, se produjo la Revolución de 1868 y el exilio de la Reina a Francia. Se convocaron Cortes Constituyentes por sufragio universal y se promulgó la Constitución de 1869. Monárquico por convicción, se puso al lado de los altos personajes que dirigían la obra de la Restauración, haciendo causa común con Cánovas del Castillo, Romero Robledo, Goicorrotea, Toreno, etc. En una de las muchas elecciones de diputados a Cortes que se celebraron durante el período revolucionario, se presentó Navarro de Ituren candidato por el distrito de Tarazona, frente a Navarro Ochoteco. Navarro de Ituren fue elegido, pero por uno de aquellos sucesos tan frecuentes en la época de la revolución, el acta de diputado la obtuvo su contrincante. Se presentó el acta en el Congreso, justificando Navarro de Ituren la legalidad de su elección. El dictamen de la comisión fue que Navarro de Ituren fuese proclamado diputado, pero, antes de discutirse el acta, fueron disueltas las Cortes. Le unía una íntima amistad con Silvela, Cánovas, Romero y otras elevadas personalidades del Partido Liberal-Conservador, que aprovechó muchas veces en beneficio de Zaragoza y a él se debe la organización del partido en esa ciudad. Buena prueba de ello es que, tras proclamar Martínez Campos la Monarquía en 1874, Cánovas hubo de hacerse con el poder, y el mismo día del triunfo fue nombrado Navarro de Ituren gobernador civil de Zaragoza.
En las elecciones de 1876 fue elegido diputado por el distrito de Alcañiz, en la circunscripción de Teruel; renunció al cargo en 1877 y fue sustituido por Francisco de Paula Jiménez. Durante su etapa de diputado fue designado para tomar parte en varias comisiones, como la de la ley electoral, municipal y provincial. Después fue nombrado director del Banco de España en Zaragoza, cargo que desempeñó hasta su muerte, y a él se debió el que fuese elevado a la categoría de primera clase. Gentilhombre de Cámara de Su Majestad, era además individuo de varias corporaciones, como las sociedades económicas de Zaragoza y Teruel y la Junta Central de Agricultura. Favoreció los intereses de Zaragoza fomentando carreteras y otras obras públicas, entre las que merece especial atención el ferrocarril de Tudela a Tarazona, donde se le dedica una de las vías urbanas más céntricas y tradicionales. También trabajó con gran empeño por la concesión del ferrocarril a Francia por el Canfranc al lado del ilustre general Moriones, siendo Navarro de Ituren uno de los cinco individuos que componían la comisión ejecutiva. A él se debe también el que se llevara la Facultad de Medicina a Zaragoza y buena prueba de ello es que su retrato figura en el paraninfo de la Universidad.
Casó con su prima hermana Victorina Vera Muñoz (1867) y tuvieron cuatro hijos. Murió con tan sólo 43 años, tras sufrir una cruel enfermedad.
Fuentes y bibl.: Archivo del Congreso de los Diputados, Serie documentación electoral, 79, n.º 6.
“Ferro-carril a Francia por el Canfranc. Sociedad Anónima”, en Suplemento al Boletín Oficial de la Provincia de Zaragoza, 15 de abril de 1883; “D. Juan Navarro de Ituren”, en El Diario de Zaragoza, 288 (1885), pág. 1; S. Parra de Mas, El ferrocarril del Canfranc y los Transpirenaicos, Zaragoza, Aldaba, 1988; J. L. Moreno Lapeña, Tarazona y su Comarca, vols. III-IV, Tarazona, J. L. Moreno, 1999.
Carlos Viscasillas Vázquez
