Alemany Gil de Bernabé, Francisco. Tortosa (Tarragona), 25.II.1815 – 26.XI.1879. Militar, brigadier de Ingenieros, mariscal de campo, carlista.
Ingresó en la Academia de Ingenieros de Guadalajara en mayo de 1834, de donde salía como teniente el 2 de octubre de 1837, después de completar sus estudios reglamentarios. Durante su etapa de alumno, participó en la defensa de la casa fuerte de Guadalajara, atacada por las expediciones de los generales carlistas, Gómez y Cabrera, en 1835. Destinado al Regimiento de Ingenieros, al salir de la Academia, tomó parte con su unidad en la Guerra Carlista, primero en el Ejército del Centro y posteriormente en el de Operaciones de Cataluña. En 1837 estuvo en la defensa de Madrid, ante la aproximación del ejército carlista mandado por general Cabrera, acompañado del propio pretendiente. Pasaba más tarde a operar en la Mancha y Andalucía, donde intervino en 1838 en las acciones de Úbeda, Baeza y Castril. En 1839 tomaba parte en el sitio de Morella y posteriormente en el de Alcañiz, donde reparaba caminos, fortificaba, y construía baterías de brecha, todo ello bajo fuego enemigo, y finalmente participaba en el asalto a la plaza. Mas tarde, aún en 1839, se encontró en la acción entre Alcora y Lucena, siendo promovido como recompensa a su valor, a Capitán de Infantería. Con posterioridad, formó parte en el ataque a Chinchilla, donde al construir un hornillo (explosivo) en la puerta del castillo recibió una herida que le obligó a retirarse. Como recompensa, fue promovido a primer Comandante de Infantería. En 1840, finalmente, estableció una línea de señales ópticas de Villafranca a Tarragona, y desde esta última a Reus y Valls. En premio a los señalados méritos realizados durante la campaña, se le concedió la Cruz de San Fernando de 1ª Clase.
Terminada la guerra fue destinado a la Comandancia de Ingenieros de Granada, y en 1842 se encontraba destinado en Cataluña, como miembro de la comisión de ensanche de la plaza de Barcelona. En junio de 1845, el Ayuntamiento de Tortosa había solicitado autorización para llevar a cabo un ensanche de la población. En respuesta a la demanda, Alemany, nombrado Comandante de Ingenieros de Tortosa, remitía a la Dirección del Cuerpo en Barcelona, con fecha 12 de diciembre de 1845, dos croquis de la Cabeza de Puente y otros dos de los frentes de San Juan y el Temple, relacionados con el ensanche de la citada plaza. Era el primero de varios trabajos realizados por Alemany y otros ingenieros para el diseño del ensanche de la ciudad. Siguiendo la orden recibida en marzo de 1847, en marzo del siguiente año entregaba los planos de tres proyectos, a escala 1:2.000, completando posteriormente la justificación y los presupuestos. Finalmente, desde Madrid, el Ingeniero General aprobaba “sin ninguna modificación el proyecto de ensanche de la plaza de Tortosa” el 21 de junio de 1851. Durante ese mes, los oficiales de ingenieros José Pera y Francisco Alemany realizaron “las operaciones geométricas de acotación de las defensas y los cálculos de desmontes, terraplenamientos y tanteos”.
En 1848 estaba destinado en la Dirección de las Posesiones de África, trabajando en las fortificaciones de las Islas Chafarinas. Al respecto, presentaba un proyecto general de fortificación permanente de la Isla de Isabel II: Plano de la Isla de Isabel 2ª con el proyecto de fortificación permanente hecho por el capitán D. Francisco de Alemany, 24 de septiembre de 1848. Al siguiente año, pasaba de nuevo a la Dirección-Subinspección de Ingenieros de Cataluña, y en 1861 realizó un informe con la propuesta del punto de travesía del ferrocarril de Gerona a Francia, para pasar de un lado a otro los Pirineos.
En 1863 era destinado como jefe de la Comandancia de Baleares, dirigiendo las obras de fortificación del fuerte de la Mola o de Isabel II, en Menorca. Promovido a Brigadier de Ingenieros en 1866, se le nombraba Director Subinspector del Cuerpo de las Islas Baleares.
Fue director de la Academia de Ingenieros de Guadalajara de
Obras de ~: Memoria sobre la importancia de las posiciones militares defensivas, y forma de atrincherarlas, según el carácter que tengan, como puntos estratégicos topográficos o como ejes de operaciones, s.l., s. f.
Fuentes y bibl.: Archivo General Militar de Segovia, Exps. personales.
Estados del Cuerpo de Ingenieros del Ejército, 1837-1875; J. Almirante, Bibliografía Militar de España, Madrid, 1876; J. de la Llave García, Lecciones de Fortificación explicadas en la Escuela Superior de Guerra, Madrid, Imprenta del Memorial de Ingenieros, 1898; E. Roldán, Estado Mayor General Carlista en las tres guerras del siglo xix, Madrid, Editorial Actas, 1998 (Colección Luis Hernando de Larramendi); J. Carrillo de Albornoz y Galbeño, “Caballeros de la Real y Militar Orden de San Fernando pertenecientes al Arma de Ingenieros”, en Memorial del Arma de Ingenieros (Madrid, Ministerio de Defensa), n.os 63-66 (2001 y 2002); A. Bravo Nieto et al. (coords.), “Chafarinas, el ayer y el presente de unas Islas olvidadas” [Número especial], en Aldaba, n° 37, (2013); J. L. i Ginovart, “El contexto del saber constructivo del Ingeniero Militar en el Arte abaluartado en el territorio y plaza de Tortosa (1580-1852)”, en El Arte Abaluartado en Cataluña, Estrategia de defensa en el siglo XVIII, Madrid, Ministerio de Defensa, 2013, págs. 425-452; J. I. Muro Morales, “Los planos de la plaza y la ciudad de Tortosa, 1845-1886” en Departament de Geografia Universitat Rovira i Vigili, Treballs de la Societat Catalana de Geografia, núm. 77 (2014), págs. 151-179.
Juan Carrillo de Albornoz y Galbeño
