Caballero y Rozas, Francisco. Marqués de Torneros (I). Madrid, 20.VIII.1822 – 4.I.1907. Diplomático político, caballero de la Orden de Santiago.
Nació en una familia madrileña, con antecedentes santanderinos, de propietarios urbanos. Era hijo de Andrés Caballero y Mazo, caballero de la Orden de Carlos III, intendente honorario de provincias y político, y de María Luisa de Rozas y Ondarza.
Su abuelo Andrés Caballero del Moral regentó una importante casa de comercio en Madrid entre 1790 y 1810, invirtió en inmuebles y en préstamos a la nobleza. Igual que su hermano Andrés, Francisco Caballero era un rico propietario de fincas rústicas. —el segundo mayor contribuyente por Ávila (1872)— y urbanas en Madrid. Cursó Derecho.
Según su hoja de servicios, en mayo de 1846 era auxiliar de la Secretaría del Ministerio de Gobernación y desde marzo de 1847 ejerció de diplomático, agregado en la legación de Bruselas. En diciembre de 1848 figuraba en la embajada de París, en 1850 en Viena, en 1852 en Nápoles y en 1853 volvió a París.
El 23 de junio de 1854 recibió merced de hábito de la Orden de Santiago y, un mes después, era secretario de la legación de Estocolmo. En octubre de 1856 era secretario de la comisión del arreglo de límites entre España y Portugal y, desde julio de 1857, ascendió a secretario de primera clase en la legación de San Petersburgo. En noviembre contrajo matrimonio en París con Malvina de Saavedra y Cueto, marquesa del Villar e hija del duque de Rivas, Grande de España.
Pero cesado en marzo de 1859 y tras fallecer su esposa años después, el marqués viudo del Villar —título que recibieron sus hijas Ángela (1863) y María del Carmen (1892)— siguió los pasos de su padre en la política.
Caballero salió diputado en 1863 por el distrito de Ávila; sustituyó a su padre, que le representó por las filas moderadas antes de ser nombrado senador vitalicio (1866): en el Congreso (1840), en el Senado (1843), otra vez diputado en 1844-1845, en 1856- 1858 por Piedrahita y en 1859-1860 por Ávila. Francisco Caballero fue reelegido en 1864, 1865 y 1867, al tiempo que era alcalde de Madrid hasta la Gloriosa.
Con la Restauración, volvió por las filas conservadoras y vio premiada su trayectoria con honores y nombramientos.
Salió elegido senador por Ávila en 1876; el 13 de marzo se le concedió el título de marqués de Torneros —y a su hermano Andrés, el de marqués de Somosancho (1878)—. En 1877 era senador por León y lo fue vitalicio desde marzo de 1878, al tiempo que alcalde de Madrid entre febrero de 1877 y 1881, y consejero de las Órdenes Militares desde noviembre de 1877. Como alcalde, mejoró los jardines, la salubridad, los alrededores del Prado y el ensanche de la calle Sevilla; como parlamentario, participó en numerosas secciones y comisiones, entre otras, de deuda y obras públicas, contra la filoxera, de tratados de comercio, ferrocarriles —el de Ávila a Salamanca—, carreteras —la del hipódromo de Madrid a Chamartín o de Ávila a Piedrahita— y diversas de protocolo. En octubre de 1880 fue nombrado por Alfonso XII gentilhombre de Cámara con ejercicio.
Afianzó su vínculo con la vieja nobleza tras el enlace en 1883 de su hija Carmen con Fernando Roca de Togores y Aguirre-Solarte, hijo del marqués de Molins, Grande de España. En septiembre de 1884 recibió la Gran Cruz de Carlos III. Fue vocal como senador del Consejo de redención y enganches del servicio militar entre 1884 y 1886. Desde agosto de 1890 fue decano del Tribunal Metropolitano de las Órdenes Militares y vocal de la Suprema Asamblea de la Orden de Carlos III entre 1897 y 1905.
Bibl.: P. E. Tebar y J. de Olmedo, Las segundas Cortes de la Restauración. Semblanzas parlamentarias, Madrid, Imprenta de Manuel G. Hernández, 1880, págs. 105-106; A. Bahamonde y J. G. Cayuela, Hacer las Américas, Madrid, Siglo XXI, 1992, págs. 168 y 178; P. Carasa Soto (dir.), Elites políticas castellanas de la Restauración. Diccionario biográfico de parlamentarios castellanos y leoneses (1876-1923), vol. I, Salamanca, Junta de Castilla y León, 1997, págs. 164-165.
Pilar Calvo Caballero
