Oñate, Raimundo de. Autol (La Rioja), p. m. s. xviii – Santo Domingo de la Calzada (La Rioja), f. s. xviii. Monje cisterciense (OCist.), orador sagrado.
El padre Oñate es un caso curioso dentro de la Congregación Cisterciense de Castilla, aunque no excepcional. En la segunda mitad del siglo xviii la oratoria sagrada había sustituido a las publicaciones de muchos monjes, que daban así salida a su pensamiento y reflexión teológica.
Ni siquiera los cistercienses se libraron de esta moda. Así como los siglos xvi y xvii fueron de esplendor en la publicación de obras teológicas y escriturísticas, el xviii se caracterizó por la oratoria sagrada, y se escribían y publicaban libros de sermones, de reflexiones espirituales y piadosas y manuales de devoción.
El padre Raimundo era hijo del Monasterio de La Santa Espina (Valladolid), y perteneció a esa generación de monjes que alternaban su vida monástica con tareas de predicación, y que, gracias a sus cualidades, predicaban en lugares selectos. Fue también abad de Junqueira de Espadañado, Monasterio cisterciense en la provincia de Orense, y que contó con un excelente Colegio monástico de Humanidades y Teología, visitador de las casas cistercienses de Castilla y confesor de Las Huelgas de Valladolid y de Santo Domingo de la Calzada. Para confesores de los monasterios de monjas se destinaban monjes altamente cualificados en Teología, lo cual hace suponer que era un hombre muy preparado.
Sorprende que desempeñara durante doce años consecutivos el ministerio del púlpito en la Villa y Corte de Madrid. De sus sermones predicados en esta villa se sabe que sólo uno salió a la luz; también predicó a sus patronos, san Isidro y santa María de la Cabeza, en los años 1772 y 1773. No era esto muy habitual, pues se solía llamar cada año a un predicador diferente, y a los más prestigiosos de España. Quizá contribuyera a ello el que los jesuitas ya no eran llamados, debido a su supresión y expulsión.
Predicó también en la iglesia del Real Hospital en la fiesta de san Luis, rey de Francia, y su sermón fue tan del agrado de los franceses que hasta se mandó imprimir. El padre Muñiz, como siempre hace con sus hermanos de religión, se deshace en alabanzas, y cita varios sermones que dice están impresos, pero que no ha sido posible localizar aún.
En este sermón a los franceses, dada la situación que se vivía en España entonces, demuestra el padre Oñate una gran habilidad no sólo ante los recursos oratorios, sino como diplomático y captador de la atención del público asistente (que era lo que fundamentalmente se pretendía).
Parece ser que el padre Muñiz vio los manuscritos de sus sermones, y así reseña: “Sermones varios, m.s. 12. Tomos en fol; Vita Jesu Christi, m.s. Esta obra trabajada en Latin por el Autor, y que al presente la està traduciendo en nuestro idioma, si se imprimiese ocuparia quatro Tomos en 4.; Pensamientos de un Riojano, comprehende diez y seis pensamientos, de los que el 13 y 14 intitulados Mendigos y Pobres, merecieron la aprobación del Excmo. Señor Conde de Florida-Blanca, como se los significò al Autor en Carta respuesta su fecha en Madrid el 10. de Febrero del año pasado de 791. Compondrian 8. Tomos en 4. si se diesen à la estampa”. Ninguna de ellas está localizable.
Por las noticias que se tienen parece ser que murió en Santo Domingo de la Calzada, y las monjas de aquel Monasterio recuerdan haber tenido en sus archivos unos manuscritos pertenecientes a “un orador cisterciense muy famoso, de nombre Raimundo y que fue su capellán, y que murió en ese monasterio”.
Obras de ~: Sermon de San Saturio Anacoreta, Patron de la Ciudad de Soria, en la fiesta que los Sorianos comenzaron à celebrar en la Iglesia Parroquial de San Juan Bautista de Madrid este año de 1770, Madrid, por Juaquin Ibarra, 1770; Sermones de San Isidro Labrador y Santa Maria de la Cabeza, Patronos de Madrid, predicados ambos à aquella imperial Villa, Madrid, à costa de la misma Villa, 1771; Sermon panegyrico de S. Luis, rey de Francia / predicado en su Iglesia del Real Hospital, que es propio de la nacion francesa en esta corte [...] por [...] Raymondo de Oñate del orden de S. Bernardo [...], Madrid, por Joaquin Ibarra, 1773.
Bibl.: R. Muñiz, Biblioteca Cisterciense Española, Burgos, Joseph de Navas, 1793, págs. 242-243; J. Troncoso, Biblioteca completa de oratoria sagrada, ó Colección selecta de discursos dogmáticos, panejíricos y morales para todas las festividades del año, Madrid, Y enes, 1844-1848, 12 vols.; F. Herrero Salgado, Aportación bibliográfica a la oratoria sagrada española, Madrid, Consejo Superior de Investigaciones Científicas, Instituto Miguel de Cervantes de Filología Hispánica, 1971, pág. 233.
Francisco Rafael de Pascual, OCist.
