Fresno Machacón, Andrés. Andrés de la Encarnación. Quintanas Rubias de Arriba (Soria), 22.XI.1716 – Logroño (La Rioja), 17.V.1795. Carmelita descalzo (OCD), historiador, teólogo, escritor místico.
De sus primeros años se sabe muy poco. Sus padres se llamaban Juan de Fresno Martínez y Magdalena Machacón. Entrado en el Carmen Descalzo profesó en el noviciado de Tudela el 1 de enero de 1733.
Se venía señalando como urgente hacer una revisión crítica de los escritos de santa Teresa y más aún de san Juan de la Cruz. En 1754 los superiores generales de la Orden llamaron a Madrid al padre Andrés para que trabajara en la proyectada revisión y nueva edición.
Llegado al convento de San Hermenegildo de Madrid lo primero fue ponerse a ordenar el gran archivo de la Orden allí existente. De su sagacidad crítica y buen sentido de las cosas ya da buenas pruebas en un escrito que tituló Un archivo es un tesoro. Su opinión es que el archivero “es necesario que sea él mismo otro archivo vivo”.
Así era fray Andrés: un archivo vivo. Durante nueve años se dedicó en cuerpo y alma a recorrer los fondos archivísticos por Castilla y Andalucía, a compulsar los códices de los libros sanjuanistas, a descubrir nuevas copias, etc., Su principal trabajo fue sobre los escritos de san Juan de la Cruz, pero también se ocupó de santa Teresa.
Ayudado inteligentemente desde los conventos de frailes y monjas fue almacenando noticias y noticias del paradero de los documentos. Y “de acuerdo con su talante ilustrado, el autor incorporó la metodología moderna, las normas de Mabillon, la forma de actuar de los monjes de la Congregación de San Mauro, de precedentes españoles, como el cardenal Aguirre, la práctica de los peritos de la Biblioteca Real, autoridades que reclama con reiteración”.
Después de tantos desvelos y sudores, la superioridad del Carmen retiró su confianza al padre Andrés y le relevó de la obra emprendida. Se volvió obediente, a su provincia religiosa de origen, viviendo en Logroño más que nada y allí en su retiro conventual fue poniendo en orden todo aquel arsenal teresiano-sanjuanista que había reunido.
El fruto de su obra quedó recogido en las Memorias Historiales, cuatro tomos, aunque se ha perdido el tercero. Se encuentran en la Biblioteca Nacional de Madrid (mss. 13.482, 13.483 y 13.484), y han sido publicados con ocasión del cuarto centenario de la muerte de san Juan de la Cruz.
Para recorrer obra tan rica, en la que se pueden ver no sólo los temas específicos relativos a los escritos de Teresa y Juan de la Cruz, sino también estudios doctrinales sobre algún punto particular, ofrece Andrés una clave muy sencilla, que viene a reducirse al siguiente ordenamiento: libros, tratados, opúsculos, epístolas y fragmentos que escribió san Juan de la Cruz. Dónde, a petición de quién, con qué ocasión y cómo los escribió. Dónde se hallan originales o traslados de sus escritos. Elogios que de sus escritos, doctrina, lengua y vida han dicho nuestra santa madre y otros. De modo parecido funciona la clave teresiana, deteniéndose más particularmente en sus cartas y poesías auténticas y dudosas.
A esta obra de Andrés han ido recurriendo los estudiosos y especialistas, sobre todo en el siglo XX. Los juicios acerca del valor de los códices sanjuanistas emitidos por Andrés de la Encarnación fueron de los más seguros críticamente. Al trabajo inmenso de este hombre son tributarios todos los estudiosos de la cosa carmelitana teresiano-sanjuanista.
Retirado a su convento de Logroño, redacta unas páginas, que él llama Previos, para los Superiores, en las que cuenta cómo se le hizo el encargo de trabajar en ese campo de la crítica, cómo “se me mandó —dice humildemente— después suspenderlo por justos motivos que se presentaron”. En el Previo 1.º explica la necesidad, la utilidad, la importancia de llevar a término la obra emprendida. Envía todo el material para que no se pierda lo mucho acumulado e investigado. El Previo lo firma en Lerma el 28 de enero de 1776.
Todavía viviría casi veinte años, sintiendo, sin duda, que por pequeñeces humanas trabajo tan amplio no hubiese podido culminar en las nuevas ediciones que se estaban necesitando.
Obras de ~: “Un archivo es un tesoro”, en Archivo Carmelitano, 1 (1931), págs. 94-98 (lo publicó el padre Florencio del Niño Jesús en ese único número de la revista); Memorias Historiales (ms. inéds.: 13.482, 13.483, 13.484 BN-Madrid), ed. preparada por el departamento de lexicografía de la Universidad de Salamanca bajo la dirección y coordinación de María Jesús Mancho Duque, con la que han trabajado M.ª del Rosario Domínguez, M.ª Lourdes García-Macho y Juan Miguel Prieto, Valladolid, Junta de Castilla y León, 1993, 3 vols.: 418, 520 y 591 págs. [en el vol. III se publican otros dos ms.: 3180 (págs. 11- 380) bajo el nombre de Adiciones (A-E) y el 3653 (págs. 381-509) bajo el nombre de Previos (1.º-5.º). Introducción al tratado del Conocimiento oscuro de Dios afirmativo y negativo y modo de unirse el alma con Dios por amor, y notas tanto a este escrito como a la titulada “Espinas del espíritu” (ms. De los Carmelitas Descalzos de Burgos)]; Otros escritos de Andrés de la Encarnación se han perdido o están inéditos, tales como los contenidos en el ms. 639 de la Abadía de Montserrat (en la primera parte del ms., en sus 35 folios, se contienen Avisos de Santa Teresa, poesías suyas ciertas y dudosas, 6 cartas de San Juan de la Cruz, Avisos a un religioso, Dictámenes de espíritu, algunas cuentas de conciencia de la Santa, Avisos de la Santa después de muerta a religiosos y religiosas. Proposiciones sueltas del P. Nicolás Doria, etc. En la segunda parte del ms., 370 folios, se contiene la obra Armamentario Espiritual formado de las doctrinas que los antiguos padres y doctores eclesiásticos nos han dado de la divina contemplación).
Bibl.: Gerardo de San Juan de la Cruz, Obras del místico Doctor San Juan de la Cruz, t. I, Toledo, Viuda e hijos de J. Peláez, 1912, “Apéndice II”, págs. 417-421; Silverio de Santa Teresa, Obras de San Juan de la Cruz, t. I, Burgos, BMC, 1929, págs. 245-256; Historia del Carmen Descalzo en España, Portugal y América, t. XII, Burgos, Monte Carmelo, 1944, págs. 533-541; J. M. Prieto Hernández, Fray Andrés de la Encarnación: un hito en la crítica textual sobre San Juan de la Cruz, en Actas del Congreso Internacional Sanjuanista, Valladolid, Junta de Castilla y León, 1993, págs. 413-424; E. Pacho Polvorinos, “Andrés de la Encarnación, OCD (1716-1795)”, en VV. AA., Diccionario de San Juan de la Cruz, Burgos, Monte Carmelo, 2000, págs. 94-95; T. Egido, Introducción a las “Memorias Historiales”, t. I, Valladolid, Consejería de Educación y Cultura, 2002, págs. 13-25.
José Vicente Rodríguez, OCD
