Rubió Bellver, Mariano. Tarragona, 24.XI.1862 – Niza (Francia), 10.III.1938. Militar, ingeniero y general de brigada de Ingenieros.
Hijo de Jaime Rubió Almirall y de Ventura Bellver Tarrats, cursó sus primeros estudios en Reus, preparándose en Barcelona para ingresar en la Academia de Ingenieros del Ejército en Guadalajara, lo que efectuó el 3 de julio de 1878. Permaneció en dicha Academia, hasta su ascenso a teniente de Ingenieros el 19 de julio de 1882, siendo destinado al 4.º Regimiento de Zapadores Minadores de Barcelona.
En 1883 se le destacó con su compañía a Mahón, encargándose de los proyectos de instalación de obuses de 21 milímetros en la fortaleza de Isabel II y de la línea óptica entre Mallorca y Menorca. Ascendió a capitán el 12 de marzo de 1885, realizando en la isla obras para la defensa del puerto, levantaba los planos de la posición de San Felipe, un plano de ampliación de los frentes de tierra de la fortaleza de Isabel II (o de la Mola) y otro de deslinde de los terrenos del ramo de guerra en Fornells.
En 1888 representó al Cuerpo de Ingenieros en la Exposición Universal de Barcelona, siendo premiado por su destacada labor en este evento con la Cruz blanca de 1.ª Clase del Mérito Militar.
El 7 de abril de 1890 contrajo matrimonio en la parroquia de San Francisco de Mahón con María Tuduri Monjo, y en enero de 1891 se le concedió la Cruz blanca de 1.ª Clase por su obra titulada Prontuario del Zapador.
Entre 1893 y 1896 mandó la Compañía Regional de Baleares; ocupó los cargos de jefe del Depósito de Reserva de Ingenieros y director del Servicio Radiotelegráfico Militar de Mahón; formó parte de la comisión encargada de realizar el estudio de la instalación de baterías de tubos lanzatorpedos en la boca del puerto, y fue nombrado ayudante de campo del comandante general de Ingenieros del 4.º Cuerpo de Ejército.
Rubió Bellver se hallaba en posesión del título de ingeniero para ejercer libremente la profesión, con arreglo al artículo 51 de la Ley de Presupuestos de 5 de agosto de 1893.
En 1897 se le concedió el empleo de comandante y la Cruz de 2.ª Clase del Mérito Militar con distintivo blanco en recompensa de la obra titulada Desenfilada. Empleo militar de las vías férreas y la traducción del Reglamento de Campaña del Ejército Alemán.
En 1901 pasó a la situación de supernumerario, con residencia en Barcelona, para ejercer el cargo de ingeniero jefe de la sociedad Tibidabo, realizando con este motivo importantes trabajos para la urbanización de dicha montaña. A él se deben las exposiciones, edificios, ferrocarril funicular y aéreo y hoteles y parques de atracciones que allí se admiran.
En 1905 se le premió con la Cruz de 2.ª Clase del Mérito Militar con distintivo blanco por su obra titulada Diccionario de Ciencias Militares.
Ascendió a teniente coronel en 1906, empleo con el que desempeñó servicio algún tiempo en la Comandancia de Ingenieros de Barcelona. En 1911 se le encomendó el estudio y redacción del proyecto del nuevo balneario de Caldas de Montbuy, y el ayuntamiento de esta capital le designó para formar parte de la asesoría técnica que estudió lo relativo al abastecimiento de aguas de la ciudad. Fue nombrado, además, presidente de la Sociedad de Atracción de Forasteros de Barcelona desde 1911.
Con antigüedad de 29 de diciembre de 1913 ascendió a coronel, continuando como supernumerario, al tiempo que se le nombraba asesor técnico de la Exposición de Industrias Eléctricas de Barcelona. Ayudado por su hijo Santiago, ingeniero civil, desarrollaron el proyecto de un funicular para subir al santuario de Monserrat, aprobado por R.O. de 18 de octubre de 1918. En 1916 presentó a la consideración del Gobierno una serie de propuestas técnicas encaminadas a construir un túnel para el tráfico ferroviario por debajo del estrecho de Gibraltar.
Con antigüedad de 29 de diciembre de 1913 ascendió a coronel, continuando como supernumerario.
Ese mismo año fue nombrado asesor técnico de la junta directiva de la exposición de Barcelona, teniendo a su cargo la dirección de los trabajos que se realizaron para establecer en la montaña de Montjuic su hermoso parque.
Ascendió a general de brigada en 1916. También ese año presentó a la consideración del Gobierno una serie de propuestas encaminadas a la construcción de un túnel para el tráfico ferroviario por debajo del estrecho de Gibraltar.
Rubió Bellver estaba en posesión de la Placa y Cruz de San Hermenegildo, y el rey de Portugal le nombró caballero de la Real Orden Militar de Nuestro Señor Jesucristo.
Colaboró con frecuencia en periódicos y revistas especializadas, como el Memorial de Ingenieros, Ibérica, Energía eléctrica o Barcelona atracción. En 1932 viajó a Roma para estudiar las reformas urbanísticas realizadas por Mussolini. Como científico escribió numerosos trabajos relacionados con la ingeniería militar y civil, e incluso sobre el turismo y la industria turística. También sobre geología, el desarrollo de los tranvías y los funiculares eléctricos, además de traducir diversas obras militares del alemán al español.
Entre los años 1895 y 1901, Rubió publicaba su monumental Diccionario de Ciencias Militares, con casi tres mil páginas. Según el pensamiento del autor, el “arte militar es un compendio de todas las ciencias militares”
Fue autor de varios artículos en el Diario de Barcelona sobre la guerra chino-japonesa, otros muchos en La Vanguardia sobre la guerra de 1914 a 1918 y otros en el Día Gráfico sobre asuntos internacionales. Colaboró también en el Memorial de Ingenieros, en la revista Ibérica, en el Boletín de la Cámara Industrial, Anales, Energía Eléctrica, etc.
Exiliado en Francia en 1936, al principio de la Guerra Civil española, falleció en Niza, el 10 de marzo de 1938.
Obras de ~: La inestabilidad de la corteza terrestre como causa de los terremotos, Madrid, Imprenta del Memorial de Ingenieros, 1885; La constitución interior de la Tierra, Madrid, Imprenta del Memorial de Ingenieros, 1886; Nuevo transmisor telegráfico, Madrid, Imprenta del Memorial de Ingenieros, 1888; Sistemas de indicaciones para evitar los choques en las vías férreas, Madrid, Imprenta del Memorial de Ingenieros, 1888; Prontuario del zapador, Barcelona, Imprenta del Memorial de Ingenieros, 1891; Repuestos de pólvora y subterráneos, Madrid, Imprenta del Memorial de Ingenieros, 1891; Desenfilada. Empleo militar de las vías férreas, Madrid, Tipografía de Clemente Cano, 1893; Estudio de la protección en las obras defensivas, Imprenta del Memorial de Ingenieros, Madrid, 1894; Diccionario de Ciencias militares, Barcelona, 1895-1903; El reparto de África, Madrid, Imprenta del Memorial de Ingenieros, 1900; La guerra moderna: ojeada sobre sus principios fundamentales, Barcelona, Manuel Soler, 1900-1903; Estudios de Fortificación: El Foro, Madrid, Imprenta del Memorial de Ingenieros, 1905; Arte de estudiar, Barcelona, Sucesores de Manuel Soler, 1900-1911; Tranvías eléctricos, Madrid, 1911; Filosofía de la guerra, pról. de M. de los Santos Oliver, Barcelona, Ediciones Minerva, 1917; Ensayo de fuentes monumentales y juegos de agua en la Exposición de Barcelona, Barcelona, Ibérica, 1918; Fuerzas y motores, Barcelona, Sucesores de Manuel Soler, 1918-1925; La urbanización del Tibidabo en Barcelona, Madrid, Imprenta del Memorial de Ingenieros, 1919; La Quinta dimensión, Madrid, Imprenta del Memorial de Ingenieros, 1921; El Palacio de la Capitanía General de Cataluña: notas sobre su historia y reciente restauración y ampliación, Barcelona, Librería Francisco Puig, 1930; Reflexiones sobre la guerra mundial, Madrid, Imprenta del Memorial de Ingenieros, 1931; El túnel bajo el Estrecho de Gibraltar, Madrid, Imprenta del Memorial de Ingenieros, 1933; El plano de Barcelona, Madrid, Imprenta del Memorial de Ingenieros, 1935; Una aplicación interesante de la fotogrametría, Madrid, Imprenta del Memorial de Ingenieros, 1936.
Fuentes y bibl.: Archivo General Militar de Segovia (AGMS), Exp. personal; Memoriales de Ingenieros, 1885-1936.
VV. AA., Enciclopedia Universal Ilustrada Europeo Americana, Bilbao, Espasa Calpe, 1928; J. López Muiños, Algunos aspectos de la Ingeniería Militar española y el Cuerpo Técnico, Madrid, Ministerio de Defensa, 1993; G. Díaz Díaz, Hombres y documentos de la filosofía española, vol. 6, Madrid, CSIC, 1998; H. Capel Sáez y P.-A. Linteau, Barcelona-Montréal: développement urbain comparé, Barcelona, Publicaciones de la Universidad de Barcelona, 1998; M. Silva Suárez, Técnica e ingeniería. V: el Ochocientos. Profesiones e Instituciones civiles, Zaragoza, Real Academia de Ingeniería - Institución “Fernando el Católico”, 2007; M. Sánchez Orense, La fortificación y el arte militar en los tratados renacentistas en lengua castellana: Estudio Lexicológico y Lexicográfico, Salamanca, Ediciones Universidad de Salamanca, 2012.
Emilio Montero Herrero